El documento analiza el fenómeno del acoso escolar o bullying en cinco escuelas primarias en México a través de métodos etnográficos. Identifica el poder y el acoso como formas de ejercer control sobre los estudiantes mediante violencia física, psicológica, verbal y sexual. Debido a la falta de recursos para abordar el bullying, este se ha convertido en una práctica recurrente y difícil de identificar y resolver.