El documento habla sobre una sequía que sufrieron los indios aztecas en México. La sequía fue tan grave que todas las plantas se secaron y hubo escasez de alimentos. Los indios le rogaron al dios de la lluvia. Vieron un pájaro amarillo posado en un árbol y pensaron en matarlo, pero decidieron no hacerlo porque tal vez el pájaro les traería suerte.