El documento presenta el veredicto de un juicio en el que Rubén Lucero fue acusado de homicidio calificado. Los jueces determinaron que Lucero era culpable de homicidio simple por la muerte de Lidia Yamile Molina. Como atenuante se consideró la falta de antecedentes penales de Lucero, y como agravantes se consideró el daño causado a la víctima y sus familiares, así como la violación de la confianza entre familiares. Lucero fue condenado a 20 años de prisión.