Este ensayo compara los rumores en las organizaciones con los virus, argumentando que ambos pueden propagarse rápidamente y causar daño si no se controlan. Explica que para hacerse inmunes a los rumores y virus, las organizaciones deben fomentar la transparencia, la claridad de comunicación, y actuar rápidamente para detener la propagación de información falsa. También sugiere que antes de compartir cualquier información, las personas deben asegurarse de que sea cierta y que su difusión beneficie a la organización.