Este documento describe la importancia de la imaginación controlada por el Espíritu Santo y las visiones que produce. Explica que las visiones espirituales dan forma a nuestros planes y los hacen posibles, mientras que los esquemas mentales dan lugar a fantasías dañinas. También proporciona consejos para desarrollar nuestra imaginación espiritual a través de la oración, voluntad fortalecida y actuando para vivir la realidad espiritual que vemos.