El documento discute cómo los medios de comunicación como la televisión, la radio, el internet y los celulares influyen en los jóvenes y pueden causar que cambien su forma de vestir, pensar y actuar para adaptarse a las imágenes falsas de la realidad que estos medios promueven. Los medios también pueden generar dependencia en los adolescentes y exponerlos a contenidos que afecten negativamente su pensamiento y decisiones.