Este poema habla sobre la muerte de un pastor llamado Xabier Lete. Está lleno de sentimientos y está escrito en euskera. Describe al pastor como alguien de buen corazón que cantaba en las plazas lleno de soledad. En su último aliento, canta el verso más profundo, intentando ser libre de todas las ataduras antes de escaparse subiendo por las laderas de las montañas.