El espacio de huertoterapia debe satisfacer las necesidades de los pacientes y favorecer la fisioterapia y estimulación cognitiva. Debe contener bancos para descansar y un baño accesible, sin plantas tóxicas. Los espacios deben adaptarse a cada condición, evitando colores brillantes para pacientes con Alzheimer. La huertoterapia puede ayudar en la rehabilitación física y psicológica.