1. Un modelo para integrar el tic en la educación escolar
Cuando una Institución Educativa (IE) resuelve transformarse e integrar dentro
de sus procesos de enseñanza/aprendizaje el uso efectivo de las Tecnologías de la
Información y la Comunicación (TIC), una de las primeras decisiones que los
encargados de liderar ese proceso debe tomar tiene que ver con la adquisición de
hardware esto es, de computadores, periféricos y otros dispositivos electrónicos.
Se debe tener en cuenta que las respuestas a éstas preguntas no solo son
interdependientes sino que el factor económico las afecta a todas; pero lo más
importante es que la forma de responderlas determinará hasta qué punto es real
y factible alcanzar los dos objetivos, que al integrar las TIC en sus procesos
educativos, generalmente se propone una Institución: a) promover el desarrollo de
competencias en TIC en la mayor cantidad posible de sus estudiantes y b) integrar
las TIC en la enseñanza de las asignaturas básicas del currículo, esto es, mejorar
aprendizajes con el uso efectivo de ellas.
La experiencia en diversas Instituciones Educativas del mundo, señala tres
opciones a considerar antes de responder las preguntas formuladas; opciones estas
que difieren entre sí tanto en términos presupuestales como en la forma en que
permiten alcanzar los objetivos establecidos.
La siguiente gráfica, utiliza un plano cartesiano cuyos ejes representan los dos
objetivos propuestos y ayuda a visualizar lo que las distintas opciones permiten
lograr o alcanzar:
Las Instituciones Educativas deben procurar que su dotación en Hardware les
permita trabajar tanto el desarrollo de competencia en TIC por parte de sus
estudiantes.
2. ¿DÓNDE?
Hasta ahora, el aula/laboratorio de informática ha resultado eficaz para
desarrollar las competencias en TIC de los estudiantes y para facilitar, tanto la
administración como el cuidado y protección de los equipos. Sin embargo, para el
aprovechamiento efectivo de las TIC en los procesos educativos, esa ubicación
centralizada no es la más apropiada pues por un lado limita el acceso a los equipos y
por el otro exige el desplazamiento hasta ellos de docentes y estudiantes.Factor
importante a tener en cuenta por parte de la IE, en caso de adoptar esta opción,
es la distribución de los equipos dentro del aula/laboratorio.
En su lugar se propone
adoptar una
distribución
perimetral de las mesas, en forma de U, o de U con isla central o de W (la
elección depende del área del aula). Esta distribución permite al docente ver
con facilidad los monitores de los estudiantes, mejorar el control de la clase y
trabajar de manera individual con algún estudiante o con todo el grupo. La
distribución en U es altamente recomendable en los ambientes de aprendizaje
enriquecidos apoyados por TIC, en los que se trabaja por Proyectos, de manera
individual o colaborativa.
3. Por otra parte, es algo que debe atenderse al momento de diseñar un
laboratorio de informática. Se debe adquirir el amueblamiento adecuado,
instalar las luces apropiadas, además de estimular a los estudiantes a que
aprendan y mantengan posturas y hábitos de trabajo correctos para evitar
lesiones.
La segunda opción, consiste en distribuir los computadores en la mayor cantidad
posible de aulas, de manera que estén disponibles cuando los estudiantes los
necesiten durante las clases. Este modelo distribuido, ha demostrado ser eficaz
al posibilitar el acceso, en cualquier momento, tanto a equipos como a Internet,
para integrar las TIC en diferentes materias/asignaturas curriculares.
4. Obviamente, este modelo distribuido tiene implicaciones en cuanto a costo,
seguridad, conectividad y exige mayor habilidad por parte del docente en la
administración de la clase con estudiantes dedicados a diferentes actividades
con el uso de las TIC. Pero, definitivamente, es en esa dirección hacia donde
deben moverse nuestras Instituciones y nuestros sistemas
educativos.Consideración importante respecto a este modelo distribuido es el
espacio adicional que se requiere en cada aula de clase.
Una propuesta que tiende a conjugar las ventajas del modelo distribuido con la
optimización de costos, uso y seguridad del modelo centralizado es la de los
“portátiles sobre ruedas”. Se trata de un carrito dotado con determinado
número de computadores portátiles, provistos de baterías de larga duración,
recargables en la noche. El carrito se lleva, por demanda, al aula del docente que
lo requiera para una clase específica. Para esta opción y con el fin de evitar
cableados adicionales, todas la aulas de la Institución deben tener acceso
inalámbrico a Internet. Aunque, para la gran mayoría de las escuelas
latinoamericanas, este tipo de instalación parece muy costosa y lejana, no
podemos olvidar que la reducción exponencial de los costos de equipos y
comunicaciones.
Una última pero importante consideración respecto al dónde, tiene que ver con la
iniciativa “un computador por estudiante”, también conocida como Uno a Uno. Dicha
iniciativa se aceleró cuando la Fundación “OLPC” propuso hace algunos años el
programa “un portátil por niño” y para llevarlo a la práctica presentó el prototipo
de un portátil que solo costaría 100 dólares. A partir de ese momento se hizo
realidad la posibilidad de acceso a equipos de cómputo de bajo costo, sobre la que
volveremos más adelante.
5. Considerar seriamente esta posibilidad es importante en vista de la fuerza que
ha tomado. Pero si esta se adopta en los países Latinoamericanos, además del
tema presupuestal para adquirir los portátiles, se debe atender el de la
seguridad tanto de los equipos como de los estudiantes que los utilizan.
Aunque los fabricantes anuncian que estos equipos cuentan con un esquema de
seguridad que exige “autenticar” periódicamente el portátil, no deja de ser
riesgoso para la integridad física de algunos estudiantes cargarlos en su morral.
Por otra parte, como esos portátiles se convierten para el estudiante en una
especie de cuaderno sofisticado, los pupitres o mesas de las aulas de clase,
deben tener una superficie suficientemente amplia, plana y cómoda para
apoyarlos y trabajar sobre ella; por ningún motivo se debe permitir que los
estudiantes sostengan los portátiles en sus piernas, pues el calor que estos
generan puede ser perjudicial para su salud.
¿CUÁNTOS?
Respecto al cuántos, tanto en un modelo centralizado como en uno distribuido,
el factor más importante a tener en cuenta, además del ya citado de
disponibilidad presupuestal, es la relación “número de estudiantes por
computador” en la Institución, pues ella determina tanto la posibilidad real de
que los estudiantes desarrollen competencia en TIC como el número de horas
disponibles para integrarlas a las áreas o materias curriculares fundamentales
(ver Gráfico 1).
Mientras más baja sea la relación anterior, número de estudiantes por
computador en la Institución, mayor será el tiempo de exposición de éstos a los
equipos y mayores serán también sus oportunidades de desarrollar tanto
competencia en TIC, como de enriquecer los aprendizajes en las áreas
curriculares fundamentales; y si además tenemos en cuenta que los
computadores son herramientas de la mente, herramientas que permiten
potenciar los procesos mentales de los estudiantes, estos podrán también
trabajar en el desarrollo de sus capacidades intelectuales de orden superior.
Las razones antes mencionadas, nos permiten concluir que la situación ideal es
aquella en la que cada estudiante dispone de un computador. A esto le apuntan
iniciativas como “un portátil por niño” (OLPC, por su sigla en inglés), liderada por
Nicholas Negroponte, antiguo director del Laboratorio de Medios del MIT. El
XO, como se le llama actualmente al computador de los 100 dólares, se basa en
Linux, tiene pantalla a color de 7.5 pulgadas, procesador de 500MHz, 128MB de
memoria DRAM y 500MB de memoria Flash; no tiene unidad de disco duro, pero
cuenta con cuatro puertos USB. Además, trae conexión inalámbrica de red y una
innovadora fuente de energía.
6. OX (OLPC) PC (Intel).
CloudBook (Everex)
One (Elonex)
Eee PC (Asus)
Ink MC (Inkmedia)
7. Tianhua GX-1C de Sinomanic
HP 2133 de Hewlett-Packard
Equipos portátiles de bajo costo para implementar modelos de integración. En el
caso de Instituciones Educativas (IE) que opten por el modelo centralizado de
aulas/laboratorios de informática, una buena relación entre el número total de
estudiantes de la Institución y el número de computadores disponibles debe ser no
mayor a 5 estudiantes por equipo.
Con frecuencia, IE que tienen una relación de 20 o más estudiantes por
computador, tratan de distribuir, entre todos los integrantes de sus grados
escolares, las horas disponibles en su(s) aula(s) de informática. Pretenden así que
todos los estudiantes de la Institución se expongan al computador, aunque sea por
tiempo muy corto. Además, tratan de optimizar ese tiempo poniendo dos o más
estudiantes a trabajar en una máquina y asignan horarios quincenales de 40 o 45
minutos para poder hacerlo.
8. Estas dos medidas obstaculizan alcanzar los dos objetivos propuestos, dado que
para desarrollar competencias en TIC y lograr experiencias de Integración
(aprendizaje) significativas, es fundamental que cada estudiante pueda usar un
computador con mayor frecuencia y por periodos de tiempo más prolongados. Si se
tiene la situación antes descrita, es recomendable reprogramar el uso de la(s)
aula(s) de informática, privilegiando el acceso frecuente y prolongado a estas de
los estudiantes de los últimos grados escolares; quienes, por estar próximos a
graduarse y a enfrentarse a la educación superior o al mercado laboral, son los que
las requieren con mayor urgencia, pues no olvidemos que son indispensables para
poder desenvolverse adecuadamente en la sociedad del Siglo XXI. Además, antes
de asignar espacio en el laboratorio, a estudiantes entre pre-escolar (prekinder) y
segundo grado de primaria, es importante considerar que aún se encuentra abierto
el debate sobre la conveniencia o no del uso temprano del computador en grados
inferiores a 3° primaria (7-8 años).
¿CUÁLES?
Respecto a cuáles, no entraremos aquí en discusión de marcas de los equipos o de
cuál sistema operativo utilizar (Windows, Macintosh, Linux, etc); escogencia esta
que debe hacerse teniendo en cuenta, no solo el presupuesto disponible, sino la
posibilidad de capacitación, apoyo y soporte técnico que puedan ofrecer tanto el
distribuidor cómo el proveedor de los mismos.
Lo importante es adquirir equipos que tengan las especificaciones adecuadas para
el uso educativo que se les vaya a dar. En todo caso, es básico contar con un
procesador rápido, buena capacidad de memoria RAM, disco duro de capacidad
media y un reproductor de DVD (no es necesario el quemador). En caso de usar
software gráfico, además de las características anteriores, es fundamental contar
con una buena tarjeta de video y de aumentar, hasta donde se pueda, la memoria
RAM. Además, tener en cuenta el espacio requerido, dependiendo del tipo de
computador, para diseñar la mesa de cada estación de trabajo. Un computador de
escritorio con pantalla CRT ocupa una superficie de 90cm x 76cm, con pantalla
plana 90cm x 60cm y si es portátil 90cm x 45cm. Además, cada silla de una
estación de trabajo ocupa 55cm x 70cm. Resumiendo, cada una de estas
estaciones, con algo de espacio para cuaderno abierto y papeles, necesita
alrededor de 90cm x 115cm si se trata de portátiles y 90cm x 146cm si son
computadores de escritorio.
La tendencia a mediano plazo, es que todos, docentes y estudiantes, cuenten con su
computador portátil (1:1), meta posible por las diferentes razones antes
expresadas en este documento. El lapso de tiempo en el que se alcance esa meta
dependerá del esfuerzo decidido de los gobiernos de los países latinoamericanos
para dotar de equipos a cada uno de sus docentes y estudiantes, acompañada por la
capacidad de ofrecerles, a personas e Instituciones, Internet inalámbrico y de
banda ancha (512Kbps como mínimo).
9. Por otro lado, es posible acogerse a un modelo mixto en el que se combine la
modalidad de un computador portátil por estudiante en uno o más grados escolares,
complementada con aulas de informática tradicionales (laboratorios) dotadas con
equipos de mayor capacidad, que permitan utilizar aplicaciones que demandan
recursos más robustos, por ejemplo para diseño gráfico/Web.
PERIFÉRICOS Y OTROS DISPOSITIVOS ELECTRÓNICOS:
La pregunta de ¿cuáles? comprende también la asignación de recursos para
adquirir además de los computadores, dispositivos complementarios o equipos
periféricos que los potencian u optimizan, indispensables en muchos casos para
posibilitar la generación de Ambientes de Aprendizajes enriquecidos por las TIC, a
los que hemos hecho referencia.
Imagen 6: Periféricos y otros dispositivos electrónicos complementarios
Por otra parte, la velocidad del cambio tecnológico y la consiguiente reducción de
costos de las TIC están apuntando hacia equipos móviles en los que convergen
diversas tecnologías y que además posibilitan el acceso inalámbrico a Internet.
Ejemplos destacados de ello son los teléfonos inteligentes (smartphones) y los
Asistentes Personales Digitales (PDA). Diversos laboratorios de investigación y
10. desarrollo, entre los que se cuenta el de Hewlett Packard (HP), plantean que el
futuro de la movilidad no estará centrado en los dispositivos mismos sino en los
servicios que sobre estos se puedan ofrecer. Pero para que este escenario se haga
realidad, primero se debe trabajar con mayor ahínco el tema de laconectividad.
Finalmente, la respuesta a la pregunta sobre cuáles equipos adquirir solo se
responde a cabalidad cuando la Institución Educativa defina claramente los
objetivos que desea alcanzar con la inclusión de las TIC en sus procesos
educativos; esto le permitirá determinar, con mayor precisión, las necesidades
reales de: computadores, periféricos y otros dispositivos electrónicos.
SOFTWARE DE BASE.
El último elemento a considerar respecto al componente “Hardware” del eje
“Infraestructura TIC” es el software básico que los computadores deben tener.
En principio, se debe contar con un Sistema Operativo de Red residente en el
servidor de laRed Escolar de Datos de la Institución Educativa. Esa red tiene como
propósito principal compartir y así optimizar, los recursos que en TIC tiene la
Institución, lo cual posibilita procesos de trabajo conjunto o complementario entre
directivos, coordinadores académicos, docentes y estudiantes. Este tema se trata
con mayor profundidad en el componente“Conectividad”.
Adicionalmente, es fundamental contar con un software básico como es la Suite de
Oficina: Procesador de Texto, Presentador Multimedia, Hoja de Cálculo y Base de
Datos. Aunque existen muchos programas educativos excelentes, en la FGPU
estamos convencidos que, para empezar, es suficiente tener instalados y a
disposición de docentes y estudiantes: una suite de oficina, una herramienta para
elaborar Mapas Conceptuales, un navegador de Internet que ojalá cuente con los
complementos (plug-in) necesarios para ejecutar archivos de Flash y un lector de
archivos PDF. Recordemos que lo que aquí se propone es, de una parte, promover el
desarrollo de competencia en el uso de estas herramientas básicas y, de la otra,
integrarlas en la enseñanza de las asignaturas básicas del currículo.
Ahora bien, todas estas herramientas informáticas básicas se pueden conseguir
tanto en versiones gratuitas como de pago (licenciadas). Es necesaria la reflexión
del costo beneficio de la inversión que se haga en esta materia, especialmente, si la
IE tiene problemas presupuestales; ya que dada la cantidad de programas gratuitos
disponibles, puede traer mayores beneficios adquirir más computadores o mejorar
la conexión a Internet que invertir en licenciamiento de software. Por otra parte,
la elección de estas herramientas también va a depender de las características que
ofrezca cada programa para cumplir tanto con los objetivos en la enseñanza de las
TIC, como con las expectativas de mejorar y actualizar con estas los aprendizajes
en otras áreas del currículo (Integración). El tema del software se trata en
profundidad en el eje correspondiente a “Recursos Digitales”.