Las agroexportaciones peruanas a EE.UU. se verán afectadas debido a que el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal de EE.UU. comenzará a cobrar una tasa de inspección de US$ 237, lo que significa que los agroexportadores peruanos deberán pagar tanto por el tratamiento sanitario de sus productos como por la supervisión de dicho tratamiento. Estos nuevos cobros afectarán directamente la competitividad de los precios de las exportaciones peruanas y beneficiarán a competidores como México.