2. Nada tiene que ver el dolor con el dolor
nada tiene que ver la desesperación con la desesperación,
las palabras que usamos para designar esas cosas están viciadas
no hay nombres en la zona muda.
E.Lihn
3. BLINDADO
aprendí
a robar
a mentir
a esperar
el momento adecuado
a observar
los gestos de desencanto
para reconocerse y extraviarse
conseguir
algunas horas de calma
dejar que los extraños
me protejan
como si fuera una pieza de museo
como si fuera
parte del equipaje
sin dinero
sin grandes promesas
solo la imagen
de un escombro
apoyado en otro.
7
4. VEREDAS VIDRIO MOLIDO
estos caminos el aire de esta casa
no han sido fáciles se vuelve repulsivo
ni acertados
soy un trozo de carbón
sentada en una esquina ovillado y ardiendo
observo sus sonrisas
sus rostros brillando solo logro
en las luces perder el equilibrio
una vereda limpia y tibia y caer hecha cenizas
por delante tiznando esta cama
esperando más dolor
manos entrelazadas sobre las mesas envuelta en analgésicos
anillos relucientes en sus dedos y botellas
de agua mineral
una tranquilidad
que solo da eso solo puedo
que llaman levantar la cabeza
calma. para ver esta escalera
angosta y pequeña
en la que todas las tardes
la luz se extingue
oscureciéndolo
aún más
todo
8 9
5. quisiera desaparecer papelinas
en lo negro y alcohol
adherirme a la pared
perder los sentidos nadie
sentir la noche volverá a levantarme la voz
en sábanas limpias ni tocarme
como si fuera un cadáver
meter la mano
dentro de mi cabeza nadie
y cubrir puede enseñarme
con los ruidos de la calle lo que es caminar
los túneles de esta memoria sobre vidrio molido
lijando
quiero que el tiempo pase las aceras
que la sangre de mi brazo con la palabra
ya no sea sobrevivencia
un hervidero mutilado lentamente
desapareciendo.
quiero abandonar
este colchón
en el suelo
esta habitación
esta miseria
cuando cruce
la puerta de escape
nadie
volverá a comprarme
por un baño caliente
10 11
6. ANIMALES MUERTOS vencidas
como animales muertos
en medio de las luces
de la autopista.
se acaban
los contratos
de arrendamiento
el eco
de las pequeñas
habitaciones vacías
donde vivía de prestado
las mudanzas
los errores
las heridas abiertas
curtidas
por las goteras
del techo
por el yeso
del cielo raso
que caía
a pedazos
sobre mi cara
terminaron
mordiendo el polvo
aplastadas
12 13
7. ESCARCHA TRAZADO
paseo por la cocina el dolor en el pecho
con una taza de té solo aparece
de amapola algunas noches
cuando regreso
dibujando ciudades a esa guerra perdida
con la escarcha hace años
de mis huesos
ya no hay cansancio
escucho ni grandes equivocaciones
motores de aviones ni carreras sin final
que practican contra la pared
horas de vuelo
sobre el techo por ahora
de mi pequeña casa la sangre sigue su curso
hacia atrás
el sonido
de la lluvia aquí
golpeando el cemento
los cardos aún
de la calle está limpio.
destrozando
la belleza de lo primitivo.
14 15
8. DESPEDIDA una mano huesuda
venosa
los dedos engarfados
las uñas amarillas
tres nudillos rotos
me recuesto en la cama el temblor intermitente
mirando el techo del alcohol
y la abstinencia
estas murallas
llenas de papeles adhesivos no tengo deseos
escritos de jugar en la oscuridad
tachados solo quiero estar aquí
observando
abro mi mano
y cierro los ojos
encegueciéndome las citas y fechas perdidas
con la luz de la ampolleta que alguna vez
me comprometí a cumplir
salgo y entro al pasado y que dejé abandonadas
sin deseos de hacerlo
como un efecto quiero dormir
de esta despedida hasta el día siguiente
que no tengo deseos sin despertar con resaca
de perseguir con los ojos pegados
por la pintura negra
estiro un brazo y los labios quemados
y observo mi mano
su aspecto ya no quiero
no es el que recordaba estar en batalla
16 17
9. conmigo misma ASTILLA
tan sólo quiero
no levantarme de la cama
descansar
de estos últimos años.
todas
las cosas que he dicho
quisiera
que fueran verdad
deseos de mejorar
un trabajo seguro
una vida tranquila
y sensata
pero algo
me arrastra
a huir
a ser un trozo más
de carretera
ocultando el miedo
de mirarse
frente al espejo empañado
cada mañana
de envejecer
aislarse
dejar atrás
18 19
10. las viejas ÚLTIMA NOCHE
malas costumbres
los sonidos
y olores familiares
el riesgo de las calles me hablas a mí
la música de los barrios de hombres oscuros
las caídas que llegan
las luces difusas a la barra de los bares
de las golpizas nocturnas pretendiendo beber
los hematomas en el cuerpo a costa de quienes
guiñan el ojo
la astilla a la deriva en la presa equivocada
que fui y terminan arrastrándose
hacia la puerta
pero que aún tarareando cuchilladas
secretamente entre los dientes
sigo siendo. me hablas a mí
de hambre
cuando solo el olor
del aceite
de los mercados
saciaba el apetito
y daban ganas de llorar
por el asco
me hablas a mí
del miedo
20 21
11. de la paranoia de las cucarachas
del terror que se esconden
a entrar entre las fisuras
en una cabina telefónica del concreto
para esperar un automóvil
con las marcas de la muerte no me hables
mientras bebo
no me hables no me interesa
de lo que se siente escuchar a alguien
cuando te rompen el corazón decir lo mismo que yo
después de bajar la guardia
y el sudor -mirémonos
te arrastra bajo tierra en el espejo de los licores
a un pozo encementado una conversación silenciosa-
no me hables observa a los demás
como si fuéramos niños todos sienten lo mismo
dejando migas de pan un perro rabioso
en las calles les arrancó el amor
para encontrar el camino de las manos
a la cordura
ninguno
sólo encontramos tuvo el valor
hoteles sucios para mirar de frente
y malos negocios a la eternidad
al guardarlas en los bolsillos
ahora
déjalas ahí se quejan
para que sean alimento como tú lo haces
22 23
12. de que nada tiene sentido no me hables
de la desilusión de hijos
del desencanto de llevarme lejos
de las formas en las cuales y protegerme
se suicidarán de mí misma
para vengarse
no me hables
no me hables de la civilidad
de segundas oportunidades de los trenes amarillos
porque son de la seguridad social
las que siempre del frío
duelen más que hace explotar
las tuberías
si quieres
improvisamos una canción yo soy un mounstruo
para que todos puedan llorar y esta selva
mientras reímos de boxeadores viejos
sarcásticamente es mi jardín secreto
y mi familia
si quieres
golpeamos las mesas no me hables
de esta cantina de corazas
o subimos al centro de rencores
a buscar balas perdidas de odios
en las esquinas
yo
porque da lo mismo sólo tengo
ya no queda nadie mi reputación
a quien le importemos que es la llave
24 25
13. para que las navajas uno a uno
silben en el silencio enredados con la saliva
que dejo
tras de mí esto
es lo que dejaste
no me hables para cultivar
de amor
de seguirte esto
a otras ciudades que te asusta
de conseguirme empleo demoró años
y matrimonio
en volverse
yo solo tan severo
voy detrás tan crudo
de quien me siguió primero tan inclemente
de quien me cuidó
y me dio un lugar no te acerques
en su pobreza muchacho
de quien trinchó
con sus dedos que las luces rojas
los trozos de vidrio de este barrio de negros
de mi destilado comienzan
para que siguiera bebiendo a caerte encima
ya no eres invisible
no me hables cuando caminas
por favor junto a la grasa
que duele
tanta falsa rudeza estas arenas movedizas
y los amigos van cayendo solo son
26 27
14. para los que tienen
un cajón desvencijado
lleno de promesas
de la peor clase
para no naufragar Í NDICE
para los que arden
en el reflejo de los cristales
de un hotel
durante una tormenta eléctrica BLINDADO . . . . . . . . . . . . 7
sin saber nada VEREDAS . . . . . . . . . . . . . 8
el uno del otro. VIDRIO MOLIDO . . . . . . . . . 9
ANIMALES MUERTOS . . . . . . . 12
ESCARCHA . . . . . . . . . . . . 14
TRAZADO . . . . . . . . . . . . 15
DESPEDIDA . . . . . . . . . . . 16
ASTILLA . . . . . . . . . . . . . 19
ÚLTIMA NOCHE . . . . . . . . . 21
28