El documento describe la evolución de la población uruguaya en el siglo XIX y las condiciones sociales en Montevideo a comienzos del siglo XX. Para las clases altas, era una época de prosperidad simbolizada por mansiones y estilos de vida europeos. Sin embargo, los inmigrantes enfrentaban dificultades viviendo en conventillos y barrios pobres. También existía un creciente sector de clases medias y un nuevo proletariado urbano. En el campo, la vida seguía centrada en pulperías y ranchos.