El Poder de nuestras oraciones y conversaciones con Dios.pdf
YouCat Confirmación. La confesión
1.
2. Si
durante
meses
y
meses
no
cargas
las
actualizaciones
de
tu
ordenador,
incluso
el
mejor
sistema
opera1vo
en
algún
momento
se
puede
bloquear,
se
producirán
graves
fallos
de
seguridad.
Los
virus
y
los
troyanos
camparán
a
sus
anchas
en
tu
ordenador,
poniendo
en
peligro
tus
datos.
“Yo
no
necesito
ningún
perdón
y
menos
aún
la
confesión”.
Es
como
decir:
“Mi
ordenador
no
necesita
ninguna
actualización;
mi
so=ware
funciona
perfectamente
sin
ellos”.
Dios
te
ha
creado
con
un
so@ware
maravilloso,
pero
que
necesita
actualizaciones
periódicas.
La
confesión,
o
sacramento
de
la
reconciliación
es
la
mejor
oferta
de
actualización
que
Dios
te
hace
para
que
el
so@ware
de
tu
vida
pueda
funcionar
a
la
perfección.
Confesión=
actualizar
tu
so@ware
3. Lo
que
te
machaca
es
el
pecado
El
mal
que
hacemos:
ira,
dureza
de
corazón,
envidia,
trampas,
críGcas,
avaricia…
El
bien
que
no
hacemos:
Haber
podido
ayudar
y
no
hacerlo,
tener
talentos
y
haber
sido
vago
para
trabajar
con
ellos,
haber
podido
colaborar
con
una
causa
justa
y
no
haberlo
hecho
por
miedo
o
comodidad…
4.
5.
6. ¿Basta
la
fuerza
de
voluntad?
A
veces
pensamos
que
con
nuestro
esfuerzo
lo
podríamos
arreglar
todo,
¡pero
nos
engañamos!
Después
de
intentar
eliminar
por
enésima
vez
la
dureza
de
nuestro
corazón,
nos
resignamos
y
nos
limitamos
a
encubrir
o
jusGficar
nuestra
maldad.
7. Todo
pecado
se
dirige,
en
úlGmo
término,
Dios.
Él
nos
ha
creado
con
talentos,
libres,
capaces
de
amar,
y
nos
quiere
al
100%
de
nuestras
posibilidades.
¿Qué
hacemos
con
los
dones
que
Él
nos
dio?
Poco
a
poco
van
perdiendo
su
belleza
original.
Y
eso
no
es
lo
que
Dios
quiere
para
sus
hijos.
Nos
da
una
nueva
oportunidad
para
hacer
que
nuestra
vida
vuelva
a
brillar
y
podamos
recomenzar.
8. La
historia
del
Hijo
Pródigo
(o
del
padre
misericordioso):
una
de
las
más
hermosas
de
toda
la
Biblia.
Está
en
Lucas
15,
1-‐32.
Nos
muestra
a
un
Dios
tan
lleno
de
amor
y
bondad
que,
aunque
nos
equivoquemos,
no
se
aparta
de
su
amor
por
nosotros.
9. Aunque
tus
pecados
no
sean
tan
graves
como
los
del
hijo
pródigo,
necesitas
que
Dios
te
acoja
en
su
gran
amor
y
ponga
tu
contador
“a
cero”.
Si
seguimos
el
deseo
de
nuestro
corazón,
buscaremos
la
perfección
y
la
hermosura.
Supone
un
esfuerzo,
pero
vale
la
pena,
sobre
todo
antes
de
un
momento
como
la
confirmación.
10. También
los
sacerdotes
se
confiesan,
y
el
Papa,
cada
15
días,
acude
a
su
confesor
y
se
arrodilla,
como
un
pecador
más,
en
el
confesionario,
para
decirle
a
un
pobre
sacerdote
sus
pecados
y
omisiones
y
dejarse
reconciliar
de
nuevo
con
Dios.
¡Imaginate
al
sacerdote
que
Gene
que
escuchar
los
pecados
del
Papa!
20. No
es
pecado
Sí
es
pecado
Disfrutar
de
las
cosas
hermosas
de
la
vida
ConverGrlas
en
mis
dioses
y
perseguirlas
a
cualquier
precio
Querer
ganar
mucho
dinero
Que
el
bienestar
material
se
convierta
en
un
absoluto
para
mi,
sin
dejar
espacio
a
la
solidaridad
y
la
compasión.
Reclamar
mis
derechos
Abusar
de
ellos
de
un
modo
exigente
y
menospreciar
los
derechos
de
otros.
Sen1r
deseos
e
impulsos
sexuales
Dejarme
dominar
por
mis
insGntos
o
uGlizar
a
otros
como
objetos
para
saGsfacer
mis
ansias.
Que
haya
personas
que
no
me
resulten
simpá1cas
Tratarlas
como
si
no
fueran
dignas
de
respeto
e
hijas
de
Dios,
como
yo
Cri1car
a
otras
personas
Hacerlo
de
modo
irreflexivo
o
descuidado,
y
así
desacreditarles
o
herirles.
Experimentar
sen1mientos
de
envidia,
ira
o
alegría
por
el
mal
ajeno
No
intentar
superar
esos
senGmientos
o
dejarme
llevar
por
ellos
en
mis
acciones.
Hablar
de
otras
personas
Contar
de
un
modo
irreflexivo
o
superficial
cosas
malas
de
otras
personas.
Callar
en
situaciones
de
conflicto
Callar
cuando
otros
son
humillados,
calumniados
o
vícGmas
de
menGras.
Discu1r
con
alguien
Buscar
camorra,
no
escuchar
a
otros,
no
ocuparme
de
ellos,
negarme
a
la
reconciliación.
Que
mi
corazón
no
sienta
nada
en
la
oración
Que
no
valore
el
Gempo
de
oración
y
no
me
moleste
de
abrirme
a
Dios
o
escuchar
su
Palabra
Tener
a
veces
dudas
de
fe
Separarme
de
la
comunión
de
los
creyentes,
no
parGcipar
regularmente
de
la
eucarisfa,
dar
más
valor
a
lo
terrenal
que
a
lo
espiritual.
Hacer
planes
para
mi
vida
No
dejar
espacio
en
ella
para
Dios
y
los
planes
que
Gene
para
mi.
21. ¿Qué
es
el
secreto
de
confesión?
El
sacerdote
no
puede,
de
ningún
modo
y
bajo
ninguna
circunstancia,
revelar
a
otras
personas
algo
que
haya
conocido
en
la
confesión.
El
secreto
de
confesión
es
absoluto.
Todo
presbítero
que
lo
violara
quedaría
excomulgado.
No
puede
hacerlo
ni
siquiera
a
la
policía
en
caso
de
delitos.