1. 2.2. ATICA (lV – lll a.c.):
Ática, región del centro sureste de Grecia, una península al borde del mar Egeo,
limitada al norte por Beocia, al este por las colinas de Parnis y al oeste por el
monte Citerón.
El nombre de Ática probablemente deriva de la palabra griega que significa
„península‟. Durante la antigüedad griega Ática era el territorio directamente
perteneciente a Atenas.
Según la leyenda griega, Ática en un principio estaba dividida en doce estados
pelasgos, más tarde unificados por Teseo, rey de Atenas. En realidad, la región
estuvo habitada por los griegos jónicos, cuyos pequeños pueblos y ciudades se
unieron políticamente a la ciudad-estado de Atenas hacia 700 a.C. Debido a esa
larga dominación sobre los asuntos políticos y culturales griegos, el dialecto ático
se convirtió en el idioma usado en la literatura de la antigua Grecia. Ática era rica
en recursos naturales, especialmente en arcilla para la industria de la cerámica, en
mármol, minerales y en plata, con la que financiaba las fuerzas navales
atenienses. En la actualidad está dividida en los departamentos (nomos) de Ática
y Beocia y la conurbación de Atenas, capital de Grecia.
Se le llama ática por la ciudad Atenas, y volvemos a hablar sobre el “SER”, en el
siglo V comienza una nueva etapa de la filosofía griega, caracterizada por
ocuparse del hombre y todo lo humano. Los temas anteriores sobre el ser y la
constitución del cosmos son dejados a un lado por los sofistas.
Comienza una nueva etapa de la filosofía griega, se desenvuelve en Atenas,
estalla súbitamente el interés por el propio yo, por su conocimiento y aspiraciones,
es decir se centra en el hombre y todo lo humano. Los temas anteriores sobre el
ser y la constitución del cosmos son dejados a un lado por los sofistas.
Atenas se convierte en el centro cultural más importante de la época, y en ella
alcanza el filosofar universal una de sus más altas cumbres con Sócrates, Platón y
Aristóteles. Estos dos últimos crean sistemas tan profundamente pensados que
llegan a ser la base de toda la filosofía occidental posterior.
El materialismo aplicado a la vida diaria inspiró la filosofía de un grupo conocido
como los sofistas, que surgió en el siglo V a.C. Haciendo hincapié en la
importancia de la percepción humana.
En el siglo V comienza una nueva etapa de la filosofía griega, caracterizada por
ocuparse del hombre y todo lo humano. Los temas anteriores sobre el ser y la
constitución del cosmos son dejados a un lado por los sofistas. Volverán a
aparecer en Platón y Aristóteles, pero ya cuando el tema del hombre se haya
constituido en el centro de la reflexión filosófica.
Atenas se convierte en el centro cultural más importante de la época, y en ella
alcanza el filosofar universal una de sus más altas cumbres con Sócrates, Platón y
Aristóteles. Estos dos últimos crean sistemas tan profundamente pensados que
llegan a ser la base de toda la filosofía occidental posterior.
La Sofística: Atenas se convierte en cabeza de una poderosa liga política y en
centro de la vida cultural y comercial de Grecia, alcanzando el apogeo de su
grandeza bajo Pericles. El predomino de la aristocracia fue sustituido por un
régimen democrático en el cual los ciudadanos podían hacer oír su voz en el
ágora e intervenir en los debates públicos.
2.2.1. SOFISTAS: (lV – lll a.c.)
2. La palabra sophistes significaba MAESTRO en sabiduría. Como tales se
presentaban estos señores que andaban de lugar en lugar, participaban en la
política y cobraban por sus lecciones. Sabían o simulaban saber de todo:
astronomía, geometría, aritmética, fonética, música, pintura. Pero su ciencia no
buscaba la verdad sino la apariencia de saber porque ésta reviste de autoridad.
Del griego sophi, 'experto', 'maestro artífice', 'hombre de sabiduría', en su origen,
nombre aplicado por los antiguos griegos a los hombres eruditos, tales como los
Siete Sabios de Grecia en el siglo V a.C.Son personas cultas y educadas que
cobraban por sus enseñanzas, es decir fueron los primero profesores de la
historia. Fueron maestros itinerantes y polifacéticos de la juventud atenienseque
proporcionaban instrucción en diversas ramas del conocimiento a cambio de unos
honorarios convenidos con antelación. No conformaban una escuela. Su común
denominador, en cambio, era la práctica de una misma profesión: enseñar a los
futuros ciudadanos, el papel de los sofistas (maestros ambulantes de retórica, que
impresionan a todos con los numerosos conocimientos adquiridos durante sus
viajes y el uso brillante de la palabra) fue fundamental en la historia de la filosofía,
ya que transformaron las preocupaciones intelectuales griegas. Los sofistas fueron
maestros de la retórica (el alma política principal en estos momentos): el arte de
persuadir mediante argumentos y por ello fueron bien acogidos. Por la misma
razón se interesaron por comprender el funcionamiento del lenguaje.
Personas que compartían puntos de vista filosóficos mucho más amplios que los
de una escuela, los sofistas popularizaron las ideas de varios filósofos anteriores;
pero, basándose en su interpretación de ese pensamiento filosófico anterior, casi
todos ellos concluyeron afirmando que la verdad y la moral eran en esencia
materias opinables. Así, en sus propias enseñanzas tendían a enfatizar formas de
expresión persuasivas, como el arte de la retórica, que facilitaba a los discípulos
técnicas útiles para alcanzar el éxito en la vida, en especial en la vida pública.
Los sofistas son subjetivistas, relativistas (afirman que no existe un único
conocimiento verdadero sino que sobre cualquier tema puede haber varias
razones igualmente válidas), Pragmatistas(lo bueno es lo útil, lo que permite
conseguir el éxito y dominar la realidad) y son escépticos (No existe para ellos una
verdad estable y objetiva).
Enseñaban la “ARETE”(la palabra areté, traducida generalmente por virtud, no
tenía entonces las connotaciones morales que nuestra palabra virtud tiene; era
más "lo que es propio de")requerida para estar a la altura de las nuevas
circunstancias sociales y políticas, la primera exigencia de esa areté era el
dominio de las palabras para ser capaz de persuadir a otros.
Los sofistas gozaron de popularidad durante un tiempo, sobre todo en Atenas; sin
embargo, su escepticismo de la verdad absoluta y la moral suscitó a la postre
fuertes críticas. Sócrates, Platón y Aristóteles pusieron en tela de juicio los
fundamentos filosóficos de las enseñanzas de los sofistas. Platón y Aristóteles les
censuraron por aceptar dinero. Más tarde, fueron acusados por el Estado de
carecer de moral. Como consecuencia, la palabra sofista adquirió un significado
despectivo, al igual que el moderno término sofisma, que puede ser definido como
astuto y engañoso o como argumentación o razonamiento falsos.
2.2.1.1. Protágoras (481 – 411 a.c.):
3. Filósofo y sofista griego, nacido en Abdera, Tracia. En el 445 a.C. Viajaba de
ciudad en ciudad y se estableció en Atenas, donde llegó a ser amigo del
estadista Pericles y Eurípides y fue conocido de Sócrates consiguiendo gran
fama como maestro y filósofo. Fue el primer pensador en llamarse a sí mismo
sofista y en enseñar a cambio de dinero, recibiendo grandes sumas de sus
alumnos,el enseñaba gramática, retórica e interpretación poesía etc.
Un admirado experto en retórica que recorría el mundo griego cobrando elevadas
tarifas por sus conocimientos acerca del correcto uso de las palabras u ortoepeia.
Dice que solo podemos ver los fenómenos que impresionan nuestros sentidos; de
aquí proviene su subjetivismo, su relativismo y su escepcionismo.
Protágoras defendía el relativismo del conocimiento, de los valores y el
convencionalismo de las normas, costumbres y creencias del hombre, esto es,
negó que existieran valores y verdades universales para todos los hombres.
Afirmaba que de los objetos conocemos no lo que son, sino lo que nos parecen
(no la esencia sino la apariencia), al tiempo que defendía el carácter convencional
de las normas morales.
Como nadie es estable y cada quien percibe la realidad a su manera, no hay
verdad universal, si no tantas verdades como sujetos, cada uno es las normal de
su verdad. Todas las apariencias son verdaderas. Lo que es verdad para uno no lo
es para otro, tampoco existen la justicia ni el bien fijos y universales. Lo que unos
creen bueno otros creen malo.
El fundamento de su reflexión fue la doctrina de que nada es bueno o malo,
verdadero o falso, de una forma categórica y que cada persona es, por tanto, su
propia autoridad última
En su obra Sobre la verdad es reconocido por su dicho más famoso: "EL
HOMBRE ES LA MEDIDA DE TODAS LAS COSASDE LAS QUE SON EN
CUANTO QUE SON Y DE LAS QUE NO SON EN CUANTO QUE NO SON."Que
se suele decir: el hombre es…Y no la especie hombre, ni un pueblo determinado,
sino cada hombre, cada individuo.Con ella Protágoras ponía en duda la capacidad
del hombre de alcanzar la verdad universal y objetiva. “Como cada cosa me
aparece, así es para mí; y como aparece a ti, así es para ti”. El hombre es la
medida de la verdad, el valor, la ley y las normas. Aunque no siempre se
interpreta así, a veces se interpreta este dicho como simple antropocentrismo,
como relativismo de la verdad de las cosas, como que cada hombre es la norma
de lo que es verdad para sí mismo, y que toda verdad es relativa para el individuo
que la sostiene y que no podría tener validez más allá de él. Pensando de esta
manera se podría negar la posibilidad del conocimiento objetivo, de la validez de
las leyes, y de una "verdad absoluta" para todos.
El dominio de esta técnica ofrecería al poseedor -el dialéctico- la disposición, por
medio de su arte, de convertir en más fuerte el argumento más débil.
En cuanto a Dios profetizaba el agnosticismo más absoluto: respecto a los dioses,
no tengo medios de saber si existen o no, ni cuál es su forma. Me lo impiden
muchas cosas: la oscuridad de la cuestión y la brevedad de la vida humana.
Sus obras principales, de las que sólo perduran algunos fragmentos, fueron
tituladas Verdad y Sobre los dioses.
2.2.1.2. Gorgías (483 – 375 a.c.):
Retórico griego y filósofo sofista.
4. Este filósofo del período antropológico de la Filosofía Griega llegó a Atenas
procedente de Leontini, Sicilia en el año 427 a.C. para pedir ayuda contra los
siracusanos. Fue sobre todo un gran orador y maestro de la retórica. Negaba ser
maestro de virtud pero prometía hacer hábiles en hablar a sus discípulos. Es
considerado, junto con Protágoras la primera generación de sofistas. Murió en
Tesalia a la edad de 105 años.
Como retórico, fue de los primeros en introducir la cadencia en la prosa y en
utilizar lugares comunes en los argumentos.
La filosofía de Gorgias es “NIHILISTA” y está expresada en tres proposiciones:
Nada existe.
Aunque algo existiera, no seria cognoscible.
Aunque algo pudiera ser conocido, no podría ser expresado.
Recogió la temática de la Filosofía eleática concluyendo que nada existe. Se
encuentran en una de sus obras Sobre la Naturaleza o el No Ser, argumenta
íntegramente la inexistencia del ser, según recoge Sexto Empírico:"Que nada
existe es argumentado de este modo. Si existe algo, o bien existe lo que es o lo
que no es, o bien existen tanto lo que es como lo que no es. Pero ni lo que es
existe, como demostrará, ni lo que no es, como explicará, no existe nada, en
conclusión.
Es claro, por un lado, que lo que no es no existe. Pues si lo que no es existiera,
existiría y, al mismo tiempo, no existiría. En tanto que es pensado como no
existente, no existirá, pero, en tanto que existe como no existente, en tal caso
existirá. Y es de todo punto absurdo que algo exista y, al mismo tiempo, no exista.
En conclusión, lo que no es no existe. Pues uno y otro son mutuamente opuestos,
de modo que si la existencia resulta atributo esencial de lo que no es, a lo que es
le convendría la inexistencia. Mas no es cierto que lo que es no existe y, por tanto,
tampoco lo que no es existirá.
Que no existen, pues, ni lo que es ni lo que no es, resulta fácil de demostrar. Ya
que si tanto lo que no es como lo que es existen, lo que no es será idéntico a lo
que es en cuanto a la existencia. Y, por ello, ninguno de los dos existe. Que lo que
no es no existe es cosa convenida. Y ha quedado demostrado que lo que es, en
su existencia, es idéntico a lo que no es. Por tanto, tampoco él existirá. En
consecuencia, si lo que és es idéntico a lo que no es, no pueden existir el uno y el
otro. Porque, si existen ambos, no hay identidad y, si existe identidad, no pueden
ambos existir. De ello se sigue que nada existe."
Su escepticismo queda expresado con toda firmeza en su escrito Sobre el no ser o
De la Naturaleza.
Las obras de Gorgias que han llegado hasta nosotros son El elogio a Helena y La
apología de Palamedes.
Se vanagloriaba de haber contestado a cuantas cuestiones se le habían
propuesto, ofreciéndose después a verificar lo argumentado.Forma parte de la
primera generación de sofistas junto con Protágoras con quien compartió el
presupuesto básico de su filosofía: el relativismo y el escepticismo