- El documento provee enseñanzas sobre la oración según el ejemplo de Jesús. Explica que la oración es importante para el crecimiento espiritual y que debemos orar con humildad, alabando a Dios y sometiendo nuestras peticiones a su voluntad, confiando en que como nuestro Padre celestial proveerá lo que más nos conviene.
Luisa de Marillac y la educación de las niñas pobres
Cómo orar siguiendo el ejemplo de Jesús
1. Lección
18:
Selecciona
las
palabras
adecuadas
Lucas
11.1-‐13
«Él
les
dijo:
—Cuando
oréis,
decid:»
“Padre
nuestro
que
estás
en
los
cielos,
san;ficado
sea
tu
nombre.
Venga
tu
Reino».
—Lucas
11.2
2. Propósito
El
propósito
de
esta
lección
es
recalcar
la
importancia
que
3ene
la
oración,
como
disciplina
espiritual,
para
el
crecimiento
y
desarrollo
espiritual
de
las
personas
de
fe.
El
texto
bíblico
nos
enseña
a
orar
siguiendo
el
ejemplo
de
Jesús.
Nos
enseña,
además,
a
perseverar
en
la
oración,
sabiendo
que
Dios
siempre
nos
dará́
lo
más
conveniente.
3. Bosquejo
de
la
lección
I.
La
oración
modelo
(Lucas
11.1-‐5).
II.
Parábola
del
amigo
inoportuno
(vv.
6-‐8).
III.
Enseñanza
sobre
la
oración
(vv.
9-‐13).
4. Vocabulario
bíblico
«ABBA»:
Una
palabra
aramea
que
evoca
la
manera
como
un
bebé
se
refiere
a
su
padre.
Por
esta
razón,
puede
traducirse
como
«papá»
o
«papito».
El
Nuevo
Testamento
usa
este
vocablo
tres
veces
para
describir
la
in3midad
que
el
creyente
puede
lograr
con
Dios.
Aparece
en
Marcos
14.36,
en
un
momento
donde
Jesús
le
pide
al
Padre
que
le
libre
del
sufrimiento.
En
Romanos
8.15
y
en
Gálatas
4.6,
como
una
alabanza
espiritual
que
expresan
las
personas
de
fe
que
se
saben
adoptadas
como
hijas
de
Dios.
«REINO»:
El
Reino
de
Dios
es
el
concepto
central
de
la
teología
de
Jesús
de
Nazaret.
Se
refiere
a
la
plena
manifestación
del
poder
y
de
la
autoridad
de
Dios
sobre
el
mundo,
con
la
intención
de
salvar
a
la
humanidad.
5. Lucas
11.1-‐2
RVR
1
Aconteció́
que
estaba
Jesús
orando
en
un
lugar
y,
cuando
terminó,
uno
de
sus
discípulos
le
dijo:
—Señor,
enséñanos
a
orar,
como
también
Juan
enseñó́
a
sus
discípulos.
2
Él
les
dijo:
—Cuando
oréis,
decid:
»“Padre
nuestro
que
estás
en
los
cielos,
san3ficado
sea
tu
nombre.
Venga
tu
Reino.
Hágase
tu
voluntad,
como
en
el
cielo,
así
también
en
la
3erra.
VP
1
Una
vez,
Jesús
estaba
orando
en
un
lugar;
cuando
terminó,
uno
de
sus
discípulos
le
dijo:
—Señor,
ensénanos
a
orar,
así
como
Juan
enseñó́
a
sus
discípulos.
2
Jesús
les
dijo:
—Cuando
oren,
digan:
“Padre,
san3ficado
sea
tu
nombre.
Venga
tu
reino.
6. Lucas
11.3-‐5
RVR
3
El
pan
nuestro
de
cada
día,
dánoslo
hoy.
4
Perdónanos
nuestros
pecados,
porque
también
nosotros
perdonamos
a
todos
los
que
nos
deben.
Y
no
nos
metas
en
tentación,
mas
líbranos
del
mal.”
5
Les
dijo
también:
—¿Quién
de
vosotros
que
tenga
un
amigo,
va
a
él
a
medianoche
y
le
dice:
“Amigo,
préstame
tres
panes,
VP
3
Danos
cada
día
el
pan
que
necesitamos.
4
Perdónanos
nuestros
pecados,
porque
también
nosotros
perdonamos
a
todos
los
que
nos
han
hecho
mal.
No
nos
expongas
a
la
tentación.”
5
También
les
dijo
Jesús:
—
Supongamos
que
uno
de
ustedes
3ene
un
amigo,
y
que
a
medianoche
va
a
su
casa
y
le
dice:
“Amigo,
préstame
tres
panes,
7. Lucas
11.6-‐7
RVR
6
porque
un
amigo
mío
ha
venido
a
mí
de
viaje
y
no
tengo
qué
ofrecerle”;
7
y
aquél,
respondiendo
desde
adentro,
le
dice:
“No
me
molestes;
la
puerta
ya
está
cerrada
y
mis
niños
están
conmigo
en
cama.
No
puedo
levantarme
y
dártelos”?
VP
6
porque
un
amigo
mío
acaba
de
llegar
de
viaje
a
mi
casa,
y
no
tengo
nada
que
darle.”
7
Sin
duda
el
otro
no
le
contestará
desde
adentro:
“No
me
molestes;
la
puerta
está
cerrada,
y
mis
hijos
y
yo
ya
estamos
acostados;
no
puedo
levantarme
a
darte
nada.”
8. Lucas
11.8-‐10
RVR
8
Os
digo
que,
si
no
se
levanta
a
dárselos
por
ser
su
amigo,
al
menos
por
su
importunidad
se
levantará
y
le
dará́
todo
lo
que
necesite.
9
Por
eso
os
digo:
Pedid,
y
se
os
dará́;
buscad,
y
hallaréis;
llamad,
y
se
os
abrirá́,
10
porque
todo
aquel
que
pide,
recibe;
y
el
que
busca,
halla;
y
al
que
llama,
se
le
abrirá́.
VP
8
Les
digo
que,
aunque
no
se
levante
a
darle
algo
por
ser
su
amigo,
lo
hará́
por
su
imper3nencia,
y
le
dará́
todo
lo
que
necesita.
9
Así
que
yo
les
digo:
Pidan,
y
Dios
les
dará́;
busquen,
y
encontrarán;
llamen
a
la
puerta,
y
se
les
abrirá́.
10
Porque
el
que
pide,
recibe;
y
el
que
busca,
encuentra;
y
al
que
llama
a
la
puerta,
se
le
abre.
9. Lucas
11.11-‐13
RVR
11
»¿Qué
padre
de
vosotros,
si
su
hijo
le
pide
pan,
le
dará́
una
piedra?
¿O
si
le
pide
pescado,
en
lugar
de
pescado
le
dará́
una
serpiente?
12
¿O
si
le
pide
un
huevo,
le
dará́
un
escorpión?
13
Pues
si
vosotros,
siendo
malos,
sabéis
dar
buenas
dádivas
a
vuestros
hijos,
¿cuánto
más
vuestro
Padre
celes3al
dará́
el
Espíritu
Santo
a
los
que
se
lo
pidan?
VP
11
«¿Acaso
alguno
de
ustedes,
que
sea
padre,
sería
capaz
de
darle
a
su
hijo
una
culebra
cuando
le
pide
pescado,
12
o
de
darle
un
alacrán
cuando
le
pide
un
huevo?
13
Pues
si
ustedes,
que
son
malos,
saben
dar
cosas
buenas
a
sus
hijos,
¡cuánto
más
el
Padre
celes3al
dará́
el
Espíritu
Santo
a
quienes
se
lo
pidan!»
10. Resumen
-‐
1
• La
oración
es
disciplina
espiritual
que
Jesús
mismo
cul3vó.
• El
tema
central
de
las
enseñanzas
de
Jesús
es
el
Reino
de
Dios
y
sus
implicaciones
para
el
discipulado
cris3ano.
• Dios
es
el
Padre
Celes3al
a
quien
las
personas
de
fe
pueden
acercarse
sin
temor.
Nuestra
relación
con
Dios
puede
ser
tan
ín3ma
y
personal
que
hasta
podemos
llamarle
«Abba»,
es
decir,
«papito»
o
«papá».
• Dios
es
el
Padre
Celes3al
que
suple
todas
las
necesidades
del
ser
humano.
Dios
suple
las
necesidades
materiales,
como
el
pan
diario
y
las
espirituales,
como
el
perdón
de
los
pecados.
11. Resumen
-‐
2
• El
foco
de
nuestras
oraciones
debe
ser
la
alabanza
a
Dios.
• Nuestras
pe3ciones
deben
estar
some3das
a
la
voluntad
de
Dios,
quien
conoce
lo
que
más
nos
conviene.
• Oramos
para
crecer
en
nuestro
conocimiento
de
Dios
y
en
nuestro
amor
a
Dios.
12. Oración
Bendito
Dios
y
Padre
Celes1al,
te
damos
gracias
por
el
privilegio
que
tenemos
de
comunicarnos
con1go
por
medio
de
la
oración.
Por
eso
te
alabamos,
te
bendecimos
y
te
amamos.
Gracias
por
revelarnos
tu
voluntad
y
por
ayudarnos
a
cada
paso,
dándonos
lo
que
más
nos
conviene.
Celebramos
tu
amor,
Señor,
en
el
nombre
de
Jesús.
Amén.