1. CIUDADES PARA UN PEQUEÑO PLANETA
Autor del libro: Richard Rogers
El último capítulo del libro de Rogers manifiesta aspectos que deben ser tomados en
cuenta para cambiar una ciudad común en ciudad sostenible llegando a la conclusión de
que esta debe ser justa, bella, creativa, ecológica, que favorezca el contacto, compacta y
poli céntrica y diversa y que con el desarrollo de macro proyectos, estas ciudades se
encuentran a nuestro pleno alcance.
Los avances tecnológicos y científicos de la actualidad, han logrado un desarrollo
económico representativo y gracias a este se han construido las ciudades de metalismo
lineal, aspecto prioritario ante ideas de conservación ambiental sin embargo,esta misma
tecnología ahora la estamos empezando a utilizar como atenuante de la destrucción y
contaminación además de que nos hace el trabajo más fácil y rápido lo que nos permite
ser más productivos y aprovechar mejor nuestro tiempo pero también ha llevado a que
el trabajo de la gente sea remplazado por máquinas.Contraria al pensamiento de Rogers
que indica que problemas de drogadicción, vandalismo y odio contra la sociedad tiene
como raíz el desempleo de jóvenes que salen de los estudios y por mucho tiempo no
encuentran trabajo, pienso que una persona que ha sido educada para una u otra
profesión se forma con una conciencia social valiosa y aunque no encontrase trabajo no
se dedicaría al vandalismo ni a la desestructuración social. Al menos en nuestro país
gente que se dedica a estas malas actividades son personas que han tenido este ejemploy
han vivido esa realidad como algo normal desde niños.
Las comunidades sociales se encuentran en crisis, pero aprovechando el tiempo libre
que deja la tecnología, se debería aprovechar en actividades culturales, familiares,
organizaciones juveniles, cuidados medio ambientales, artes o educación lo que
dinamizaría la participación social y generaría un mayor sentido de comunidad,
definiendo el carácter particular de una ciudad y su identidad.
Actualmente se califica a los países de acuerdo a su gasto de consumo y avance
económico, creando modelos erróneos a seguir por países en vías de desarrollo; también
debería ser calificado el impacto de la producción y uso de bienes generados con dicha
economía, los bajos precios de contaminantes como los automóviles o celulares,
alientan a adquirir uno nuevo sin tener la necesidad; si su precioaumentara debido al
costo que representa su elaboración y funcionamiento para el medio ambiente, se
pensaría 2 veces antes comprar ese exceso de tecnología típico de nuestros días.
Parece que crear una conciencia medioambiental es una tarea difícil en una sociedad
acostumbrada al consumismo, ante esto no queda más que obligar a la población a
cambiar su comportamiento, ya sea a través de la delegación de responsabilidades,
multas o leyes muy estrictas como en los países occidentales que aplican el principio
medioambiental de “el que contamina paga”.
Debemos promover una ciudad de participación, educación, salud, trabajo y distracción
distribuidos en nodos compactos fáciles de acceder a fin de lograr ciudades sostenibles.
“La sostenibilidad podría convertirse en la filosofía dominante de nuestra era”.
Los avances tecnológicos a la vez que han contribuido con la contaminación también
han sido utilizados en bien de la sociedad y el ambiente lo cual debe ser difundido en
profesiones que tienen la oportunidad de hacer cambios significativos en el entorno y en
el comportamiento de la comunidad cono son los arquitectos y urbanistas.
Libro: Ciudades para un pequeño planeta. Capítulo V