2. Códigos de Manu
Las Leyes de Manu es un importante
texto sánscrito de la sociedad antigua
de la India.
Estas doctrinas fueron dictadas por el
sabio Manu (quien en el hinduismo es
el antepasado común de toda la
humanidad) hace varios cientos de
miles de años a los rishis que le
habían pedido que los iluminara
acerca de ese tema.
3. Manu
En la mitología hindú, Manu es el
nombre del primer ser humano, el
primer rey que reinó sobre la Tierra, y
que fue salvado del diluvio universal.
4. Manu
En sánscrito, manu proviene
de manas: ‘mente’, y significaría
‘pensante, sabio, inteligente, criatura
pensante, ser humano, humanidad’
5. Cronología de Manu
Manu vive durante un tiempo de 4320
millones de años, llamado manu-
antara.
Cada manuantara es regido por un
Manu diferente.
El Manu de la época actual es el
séptimo, y se llama Vaivasuata.
6. Manu Śmriti
El primer Manu fue Suaiam-bhuva
Fue el autor del famoso Manu Śmriti
Historiadores creen que el texto fue
escrito durante o después del reinado
del rey Púsiamitra alrededor
del siglo III a. C.
7. Libros de Manu
Contiene 2648 versos, divididos en 18
capítulos, que presentan reglas y
códigos de conducta que debían ser
aplicados por los individuos y la
sociedad.
8. Libro I
El joven novicio debe pronunciar siempre el monosílabo
sagrado al principio y al fin del estudio de la Santa
Escritura; toda lectura que no se haya hecho preceder
de Aum se borra poco a poco, así como la que no haya
sido seguida de ese monosílabo.
La letra a, la letra u y la letra m, que reunidas forman el
monosílabo sagrado, han sido sacadas por Brahma de
los tres libros santos.
De los tres Vedas, el Señor de las criaturas ha extraído
también, estrofa por estrofa, la invocación dirigida al
Sol, y que comienza por la palabra Tad.
Repitiendo mil veces, en un sitio apartado, la triple
invocación compuesta del monosílabo sagrado y de las
tres palabras Bur, Buva y Suar; un Duidjá se descarga
en un mes de un gran pecado, como una serpiente se
despoja de su piel.
9. Libro I
El primer libro relata la creación del
mundo, el mítico origen del propio
texto, y las grandes ventajas
espirituales que se pueden obtener si
se estudia su contenido.
10. Libro II
El hombre que quiere casarse debe evitar unirse a una esposa que
pertenezca a una de las familias siguientes aunque sean muy ricas:
La familia que descuide los sacramentos; la que no procree hijos
varones; aquella cuyos individuos tengan el cuerpo cubierto de
largos vellos o que padezca de hemorroides, de tisis, de dispepsia,
de epilepsia, de lepra blanca o de elefantiasis.
Que tampoco se case con una joven de cabellos rojizos, o que
tenga un miembro de más, o enfermo, o que no tenga vello, o que
sea muy velluda, o insoportable por su charla, o que tenga el pelo
rojo.
Que tome por esposa una mujer bien formada, cuyo nombre sea
agradable de pronunciar, que ande con la gracia de un cisne o de
un elefante joven, y que tenga cabellos finos, dientes pequeños y
miembros de cierta dulzura voluptuosa.
Un padre que conozca la ley no debe recibir la menor gratificación al
casar a su hija, porque al hombre que por codicia acepta una
retribución semejante, se le considera como si hubiese vendido a su
11. Libro III
Si un hombre despreciable fija los ojos en personas
honorables convidadas a un banquete, el anfitrión no obtiene
en el otro mundo recompensa alguna por la parte del festín
correspondiente a los individuos sobre los cuales aquel
hombre haya posado su mirada.
El brahmán, para cumplir las sagradas reglas, debe procurar
que se hagan ofrendas en honor de los dioses; el que incurra
en la menor transgresión renacerá en otra existencia bajo la
forma de un puerco.
Conviene que no vea comer a los brahmanes ningún hombre
impuro, ni un puerco, ni un gallo, ni un perro, ni una mujer
enferma, ni un eunuco. Lo que esos seres vean no produce
el resultado apetecido; el puerco lo destruye con su fetidez; el
gallo con el viento de sus alas; el perro con su mirada, el
hombre vil con su contacto.
12. Libro IV
Se prohíbe leer los libros santos: durante la noche,
cuando el viento sopla; durante el día, cuando el viento
levanta polvo; cuando relampaguea, truena, llueve, o
sobrevienen grandes cataclismos del cielo o de otras
partes. Si se produce un ruido sobrenatural, o un
temblor de tierra, o un eclipse, la lectura debe
aplazarse para la misma hora del día siguiente.
El brahmán no debe estudiar tendido en una cama, ni
teniendo los pies sobre una silla, ni estando sentado y
con las piernas cruzadas, ni estando vestido con traje
que cubra sus rodillas y sus riñones, ni después de
haber comido carne cocida o arroz que se hayan
repartido con ocasión de un nacimiento o de una
muerte.
Ni cuando hay neblina; ni cuando se percibe el silbido
de flechas disparadas o el ruido de lucha; ni durante los
momentos que preceden o siguen a la aparición y a la
puesta del sol, ni durante el día de la luna nueva, ni el
día décimo cuarto lunar, ni el día octavo.
13. Libro V
El hombre que consiente en la muerte de un
animal, el que lo mata, el que lo corta en
pedazos, el que lo compra, el que lo vende,
el que prepara la comida con sus carnes, el
que la sirve, y, en fin, el que la come son
considerados como coautores de la muerte
de aquel animal.
La ley de Manú reglamentó la suerte de las
mujeres: fue hecha bajo curiosas y sutiles
preocupaciones; pero sirve para darnos a
conocer la condición de dependencia moral
absoluta aunque mezclada de respeto, en
que se hallaban las mujeres de la India.
14. Libro VI
La tierra y el agua purifican lo que está manchado; un río se
purifica por su corriente; una mujer que haya tenido
pensamientos culpables se purifica por la enfermedad; la
inteligencia se purifica por el saber.
La hierba, la leña y la paja se purifican regándolos con agua
Una cosa picoteada por un pájaro, husmeada por una vaca, o
que haya sido tocada por el pie, o sobre la cual se haya
estornudado, o bien que haya sido manchada por el contacto
de un piojo, queda purificada mediante una aspersión de
tierra humedecida.
La mano de un artesano es siempre pura, mientras aquél
trabaja; también lo es toda mercancía expuesta a la venta.
La boca de la mujer es siempre pura; un pájaro es puro en el
momento en que hace caer un fruto; un animal es puro
mientras mama; un perro lo es cuando se dedica a la caza de
15. Los capítulos dos a seis relatan el modo
de vida y la regulación de la conducta
apropiada.
Se describe las principales obligaciones
en el hogar, cómo elegir una esposa, el
matrimonio, el mantenimiento del fuego
sagrado, los sacrificios a los dioses, las
fiestas para los familiares fallecidos, el
ejercicio de la hospitalidad, las numerosas
restricciones, regulando su conducta
diaria, en detalle especialmente en lo
relativo a su ropa, comida, relaciones
sexuales, y limpieza ceremonial.
16. Libro VII
Un rey, por su poder y en sus actos,
debe esforzarse en emular a los
dioses…
Castigando a los malvados y
recompensando a las gentes de bien
es como un rey se purifica; y los
pueblos correrán hacia él como los
ríos hacia el océano.
En este libro sobre los deberes y
derechos que tiene el rey.
17. Libro VIII
La ley usa palabras severas acerca
del castigo.
Gobierna y protege al género
humano, es la justicia, para el bien de
todo el pueblo.
La ley prohíbe golpear a su enemigo
si éste se halla a pie; ni debe maltratar
a aquel que junta las manos para
pedirle caridad; ni a aquel que le dice:
"Soy tu prisionero".
18. Libro IX
Aquel que pronuncia un falso testimonio
con la esperanza de obtener algún
beneficio, debe ser condenado a 1 000
panas de multa; si mintió por temor, la
multa debe ser de 150 panas; si
obedeció a la amistad, pagará 1 000
panas; si habló contra la verdad por
concupiscencia, 2 500 panas; por cólera,
1 500; por ignorancia, 200; por
aturdimiento, 100 panas solamente...
19. Libro X
La ley es severa para el adulterio.
Si una mujer que se enorgullece de su familia es
infiel a su esposo, el rey debe hacerla devorar
por perros en una plaza pública.
El hombre cómplice de la mujer adúltera será
condenado al fuego, que sufrirá tendido en un
lecho de fuego calentado al rojo por lumbre
hecha con bambúes secos.
Por adulterio con una mujer de la clase de los
brahmanes, un vaisía será privado de sus bienes
después de un año de detención; un chatría
sufrirá la pena de 1 000 panas de multa, y su
cabeza será rasurada y regada con orines de
asno.
20. Libro XI
Las mujeres, aunque estén encerradas en su
casa bajo la vigilancia de hombres fieles y
devotos, no quedan bien guardadas:
solamente puede haber seguridad en ellas
cuando ellas mismas, y por su propia
voluntad, se guarden.
Una mujer estéril debe ser remplazada al
cabo de ocho años; una, cuyos hijos todos
hayan muerto, debe reemplazarse a los diez
años; aquella que no da al mundo más que
hijas, al año undécimo; la que habla con
aspereza, inmediatamente.
Cuando no se tienen hijos, la progenitura que
se desea puede lograrse mediante la unión
de la mujer convenientemente autorizada por
21. Libro XII
Oscuridad: Los vegetales, gusanos,
insectos, serpientes, animales salvajes,
pájaros, hombres mentirosos, los
vampiros.
Pasión: los actores, los reyes, los
guerreros,
los músicos.
Bondad: Los brahmanes, los
sacrificadores, los santos, los dioses, los
genios de los Vedas, los