El documento lista varios proyectos colaborativos y grupos de discusión sobre temas como filosofía, audiovisual, salud mental, cine, arte, hardware libre y feminismo. También presenta preguntas sobre el rol del mediador, si requiere formación específica, si puede ser personal interno o externo, y si la mediación puede usarse como herramienta de educación, comunicación o participación para hacer los proyectos culturales más democráticos.