Lecciones 05 Esc. Sabática. Fe contra todo pronóstico.
SOCIOLOGÍA. ACTIVIDAD 4.6.
1. URBANIDAD
COMPENDIO DEL MANUAL DE
URBANIDAD Y BUENAS
MANERAS
DE
MANUELANTONIO CARREÑO
UNIDAD EDUCATIVA
“TENIENTE HUGO ORTIZ G.”
2. SOCIOLOGÍA. ACTIVIDAD 4.6.
• Alumno: Caroline Bermeo
• Curso: 3ro D
• Numero de lista: #2
• Tema: Deberes para con nuestros padres
• Profesor: Eddi Zavala
3. MANUEL ANTONIO CARREÑO
• Músico y pedagogo, célebre por su Manual de urbanidad y buenas maneras
fue fundador del colegio Roscio y padre de la pianista Teresa Carreño
Fueron sus padres Cayetano Carreño maestro de capilla de la catedral de
Caracas, y María de Jesús Muñoz. En su hogar él y sus hermanos
obtuvieron una sólida formación cultural y musical, lo cual les permitiría
destacar como excelentes ejecutantes y compositores.
• En 1853, publicó por entregas el Manual de urbanidad y buenas maneras,
obra que le valió un gran reconocimiento y fama. Dicho texto, ha sido
reeditado numerosas veces en muchos países de Latinoamérica y fue un
libro de referencia fundamental para diversas generaciones venezolanas;
el 14 de marzo de 1855, el Congreso Nacional acordó la recomendación
especial para el uso de esta obra.
4. Normas sociales de Carreño
• Todos deberíamos poner en práctica los buenos modales que
nos abren las puertas hacia el futuro, así podríamos lograr la
sociedad ideal formada para hacer el bien a toda la
comunidad y enfatizada en la necesidad de rescatar los
valores éticos y morales a través de la enseñanza de la
urbanidad como alternativa, para garantizar la formación del
hombre amoroso, educado, culto, sencillo, en otras palabras,
más sensible a sus semejantes, pero teniendo en cuenta que
cada uno es un ser individual pero al mismo tiempo reflejando
una idea concisa de una sociedad armónica.
6. • X. En el laudable y generoso empeño de enriquecer
nuestro corazón de virtudes, y nuestro entendimiento de
ideas útiles a nosotros mismos y a nuestros semejantes,
ellos no omiten esfuerzo alguno por proporcionarnos la
enseñanza. Por muy escasa que sea su fortuna, y aun
sometiéndose a duras privaciones, siempre hacen los
castos indispensables para presentarnos en los
establecimientos de educación, proveernos de libros y
pagar a nuestros maestros. ¡Y cuántas veces los vemos
someterse gustosos a toda especie de privaciones, para
impedir que se interrumpa el curso de nuestros estudios!
7.
8. • XI. — Terminada nuestra educación, y formados
ya nosotros a costa de tantos desvelos y
sacrificios, no por eso nuestros padres nos
abandonan a nuestras propias fuerzas. Su
sombra protectora y benéfica nos cubre toda la
vida, y sus cuidados, como ya hemos dicho, no se
acaban sino con la muerte.
9.
10. XII. — Si durante nuestra infancia, nuestra niñez
y nuestra juventud, trabajaron
asiduamente para alimentarnos, vestirnos,
educarnos y facilitarnos toda especie
de goces inocentes, ellos no se desprenden en
nuestra edad madura de la dulce
tarea de hacemos bien.
11.
12. Conclusión
Los padres tienen la obligación de brindarnos la
educación, ensañarnos los valores necesarios..etc.
Así mismos nosotros los hijos tenemos la obligación
de obedecer a nuestros padres mientras
permanezcamos bajo su potestad y respetarles
siempre.