Cómo fomentar vínculos sanos

1. Cecilia Muñoz Navarro
Asistente Social
Magíster en Orientación y Mediación Familiar
CEALA
Relaciones saludables
Familia y amistad.

2. El respeto a sí mismo.
Las relaciones con Padres y amigos
necesitan alimentarse diariamente, crecer y
tener un nivel de amor, respeto y confianza.
Para mantener lazos fuertes de unidad, la familia debe ser
nuestra prioridad en los momentos más importantes de
nuestro día a día, sin necesidad de que esto entorpezca las
demás relaciones.
Hay momentos sencillos, pero que son especiales al
mismo tiempo en la vida familiar y de amistad, y se debe
hacer todo lo posible para compartirlos sin interrupciones.

3. Con los Padres:
Mantener una relación saludable con tus
padres puede parecer intimidante, pero
vale la pena el esfuerzo y es algo de lo
que jamás te arrepentirás.
Salgan en una cita: Camina con
ellos….
Hablen sobre tus calificaciones:
Al principio puede que no te sientas
cómodo pero si no vas bien en la
escuela, el hablarlo creará un buen
hábito y con ello demostrarás tu
responsabilidad y honestidad hacia
tus padres.

4. Preséntales a tus amistades:
Aquí todos salen ganando, a tus amigos les
gustará enterarse tanto de las similitudes como
de las diferencias entre su familia y la tuya
mientras que a tus padres les gustará conocer
con quiénes estás la mayor parte del tiempo.
Si tienes problemas con tus padres esto
ayudará a tener una relación más saludable.

5. • Cuéntales sobre el niño o niña que te llama la
atención:
Háblales sobre los cambios que estás viviendo, en relación
a la persona que llama tu atención, y sobre las amistades
que vas formando. El que compartas con ellos estos
detalles creará un nivel de confianza y respeto, quizás
hasta te puedan dar consejos para tus relaciones.
Recuerda que ellos también pasaron por situaciones
similares a las tuyas.
• Comunicación: es importante tener una comunicación
asertiva con nuestros Padres, eso nos permite desarrollar
las competencias tan importante que necesitamos en la
vida adulta. Expresar, compartir nuestras ideas de forma
respetuosa pero con apertura de entablar un diálogo, para
escuchar lo que el otro nos tenga que decir.

6. • Respeto: No olvides que las ideas y emociones de nuestros
Padres, merecen ser respetadas. Explícale de forma simple
para ella o él, te pueda comprender.
• Confianza: Este punto va muy ligado con el anterior. Tus
Padres pueden interpretar la comunicación no verbal, es decir
tu expresión corporal, tu tono de voz, etc. Si quieres ganar
confianza, entonces aprende a confiar tsmbién en ellos,
comparte parte de tus emociones. Por ejemplo: Papá hoy tuve
un día difícil ¿Podrían darme un momento a solas para sentirse
más relajado y poder después conversamos?
• Límites: Recuerda que parte del papel fundamental de ser
padres es el establecer límites, no eres su amigo, tus Padres
son la primera figura de autoridad.

7. • Lenguaje generativo: Es importante el hablar desde
la posibilidad, nos han enseñado a hablar desde el ¡No
quiero! o no puedes, son formas de lenguaje que nos
limitan. ¿Qué pasaría si empezamos a cambiar nuestro
lenguaje? En lugar de decir: No puedes. “Hijo, si
decides conocer a ese niño, es probable que te
decepciones y te lastimen. ¿Por qué mejor no esperas
un tiempo y terminas tus estudios? O ¡No quiero!
• Amor: Abrazar, besar, jugar, cocinar y todo aquello
que ayude a construir un vínculo emotivo con tu familia.
Cosas que disfrutan hacer juntos. Pero no olvides el
punto anterior.

8. Amistad.
¿Estoy en una relación sana?
Se siente como si fuera amor,
pero ¿lo es realmente?
En las etapas iniciales de una
relación, es absolutamente
normal ver todo color de rosa.
Pero a algunas personas, el
color rosa no les permite ver
que la relación no es tan sana
como debiera.
¿Qué hace que una relación sea sana?
Es de esperar que tú y la persona que te interesa, se estén tratando bien.
¿No estás seguro de que sea así? Toma distancia de la sensación de
que tus pies no tocan el suelo y piensa si esta nueva “amistad” tiene estas
cualidades:

9. • Respeto mutuo. ¿La otra persona se da cuenta de lo grandioso
que eres y por qué? Asegúrate de que esa persona te respete y
valore por quien realmente eres. ¿Este amigo te escucha
cuando dices que hacer algo no te hace sentir bien y frena
inmediatamente? El respeto en una relación de amistad
significa que cada persona valora a la otra y comprende sus
límites (y jamás los pondría a prueba).
• Confianza. Estás hablando con ese compañero nuevo, y justo
pasa caminando el niño con quién tienes una amistad. ¿Pierde
el control? ¿O continúa caminando porque sabe que jamás le
harías daño? Es normal sentirse un poco celoso de vez en
cuando; los celos son una emoción natural. Pero lo importante
es cómo reacciona la persona a los celos. No hay manera de
tener una relación sana si no confían el uno en el otro.

10. • Honestidad. Esto va de la mano de la confianza porque es difícil
confiar en alguien cuando uno de los dos no está siendo honesto.
¿Alguna vez descubriste que tu amigo te estaba diciendo una gran
mentira? Por ejemplo, ¿te dijo que tenía que salir con sus Padres,
pero en realidad estaba en el cine con sus amigos y te diste cuenta
por las redes sociales? La confianza se va debilitando.
• Apoyo. No solo debe apoyarte en los malos momentos. Algunas
personas son geniales cuando tu mundo se está destrozando pero no
están tan interesadas en escuchar las cosas buenas que ocurren en
tu vida. En una relación sana, está allí para lo triste y para celebrar
tus éxitos.
• Equidad. En tu relación, es necesario dar y recibir. ¿Se turnan para
elegir qué película ver? Como pareja, ¿pasan tanto tiempo con los
amigos de tu pareja como con los tuyos? Si no hay un equilibrio, te
darás cuenta. Las cosas se ponen mal rápidamente cuando una
relación se convierte en una lucha de poder y una de las personas se
esfuerza por imponer su parecer todo el tiempo.

11. • Identidades separadas. En una relación sana, todos
necesitan ceder. Pero eso no significa que debas sentir que
estás perdiendo tu propia personalidad. Cuando la amistad
comienza, tenían sus propias vidas (familiares, amigos,
intereses, hobbies, etc.) y eso no debe cambiar. Nadie debe
hacer de cuenta que le agrada algo que en realidad no le
agrada, ej: Dejar de ver a sus amigos o abandonar las
actividades que le apasionan. Debes sentirte libre para
continuar desarrollando nuevos talentos o intereses, hacer
nuevos amigos y seguir adelante.
• Buena comunicación. ¿Pueden hablar y compartir
sentimientos importantes para ti? No ocultes tus sentimientos
simplemente porque tienes miedo de que sea algo que tu
amigo o amiga no desea escuchar. Y si necesitas tiempo para
pensar antes de estar preparado para hablar, la persona
correcta te dará espacio para que lo hagas.

12. ¿Qué es una relación nociva?
Una relación es nociva cuando implica una conducta
malvada, irrespetuosa, controladora o abusiva. Algunas
personas viven en casas en las que los padres pelean
mucho o se tratan de forma abusiva, tanto emocional,
como verbal y físicamente. Para algunas personas que
se han criado rodeadas de este tipo de conducta, se
trata de algo prácticamente normal. ¡No lo es!
Muchos de nosotros aprendemos mirando e imitando a
las personas que tenemos cerca. Entonces, una persona
que ha vivido rodeada de conductas violentas o
irrespetuosas tal vez no haya aprendido a tratar a los
demás con amabilidad y respeto, ni a esperar el mismo
tipo de trato.

13. La amabilidad y el respeto son
requisitos indispensables para
una relación sana. Las personas
que no han aprendido esto tal
vez deban trabajarlo con un
terapeuta antes de estar
preparadas para una relación.
Mientras tanto, aunque te
sientas mal por alguien que ha
sido maltratado, debes cuidar
de ti mismo; no es sano
permanecer en una relación con
conductas abusivas de ningún
tipo.

14. Señales de advertencia
Cuando un novio o novia usa insultos,
lenguaje ofensivo, palabras despectivas,
maltrata físicamente con golpes o
bofetadas, o fuerza a la otra persona a
mantener relaciones íntimas, es una señal
de abuso verbal, emocional, sexual o
físico.
Pregúntate a ti mismo si tu nueva amistad:
• se enoja cuando no dejas todo por él o ella
• critica la manera en la que te vistes o te ves, y te dice que jamás
podrás encontrar a otra persona que quiera salir contigo
• te impide ver a tus amigos o hablar con otros muchachos o
muchachas
• desea que abandones una actividad, aun cuando te fascina
• alguna vez te levanta la mano cuando se enoja, como si estuviera a
punto de golpearte, o a través de las redes sociales te expone.
• Intenta forzarte para avanzar más de lo que deseas sexualmente

15. Estas no son las únicas preguntas que te puedes hacer. Si
está intentando controlarte, hacerte sentir mal contigo
mismo, aislarte del resto de tu mundo o (y esto es muy
importante) dañarte física o sexualmente, entonces es
tiempo de que termines la relación, rápido. Dile a un familiar
o un amigo de confianza lo que te está ocurriendo y
asegúrate de estar a salvo.
Puede ser tentador disculpar o malinterpretar la violencia, la
posesividad o el enojo por una expresión de amor. Pero
aunque sepas que la persona que te está haciendo daño te
“ama”, eso no es saludable. Nadie merece ser dañado,
golpeado, empujado o forzado a hacer algo que no desea
hacer.

16. ¿Por qué algunas relaciones son tan difíciles?
¿Alguna vez escuchaste decir que es muy difícil que alguien
te ame, si no te amas primero a ti mismo?
Es un gran obstáculo para una relación que uno o ambos
tengan problemas de autoestima. Tu novio o novia no está
allí para hacerte sentir bien contigo mismo si tú no puedes
hacerlo por tu cuenta.
Concéntrate en estar feliz contigo mismo y no asumas la
responsabilidad de preocuparte por la felicidad de otra
persona.

17. ¿Y si sientes que tu amigo o amiga necesita demasiado de ti?
Si la relación se siente como una carga o un peso en lugar de una
alegría, tal vez sea el momento de pensar si es o no lo que
mereces, debe ser saludable para ti.
Una persona que no es feliz ni segura tal vez tenga problemas
para formar una amistad sana, o un pololeo.
Además, las relaciones intensas pueden ser difíciles para algunos
adolescentes.
No te preocupes si no estás listo. Lo estarás y puedes tomarte todo
el tiempo que necesites, no es obligación estar acompañado.

18. ¿Alguna vez notaste que algunas relaciones adolescentes no duran
mucho tiempo?
No es de extrañar: los dos están creciendo y cambiando día a día.
Tal vez parezcan perfectos el uno para el otro en un primer momento, pero
eso puede cambiar.
Si tratas de aferrarte a la relación, es muy probable que termine de forma
amarga.
Es mejor separarse y ser amigos que quedarte en una relación que ya has
superado o que ya no se siente bien para uno de los dos o para ambos.
Las relaciones pueden estar llenas de diversión, romance, pasión,
sentimientos intensos y también de quiebres ocasionales.
Sin importar si estás solo o en una relación, recuerda que es bueno elegir
bien a quién te acercas.
Piensa en las cualidades que valoras en una amistad y ve de qué manera se
asemejan a los ingredientes de una relación saludable. Trabaja para
desarrollar tú mismo esas cualidades; te harán mucho más atractivo ante los
demás.

19. Muchas gracias