KELA Presentacion Costa Rica 2024 - evento Protégeles
Guión Actividad 4.2 Módulo 2.docx
1. Guión de contenidos
Módulo 2 │Las TIC en los procesos de enseñanza-aprendizaje: criterios
generales para su utilización.
1. Definición de las TIC.
Definimos las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) cuando se aplican en
contextos formativos. Al ser medios de enseñanza, son, por ende, elementos curriculares
que ayudan en el desarrollo de habilidades cognitivas en las personas, a través de
estrategias de utilización. Esto facilita la intervención mediada sobre la realidad, la captación
y la comprensión de la información por el alumno y la creación de escenografías
comunicativas, que propicien el aprendizaje.
● 1.1. Elementos que componen las TIC.
- Hardware. (Por ejemplo una cámara de vídeo)
- Mensajes y Contenidos. (La utilización educativa de las TIC)
- Propósito educativo. (Que el alumno comprenda las diferentes formas de
utilizar el vídeo en un contexto de formación)
- Sistemas simbólicos. (Planos, movimientos de cámara, zoom…)
- Estructura organizativa. (Acción presencial que consistirá en la
capacitación de alumnos de magisterio en la asignatura de “TIC aplicadas a
la formación”).
2. Clasificación de los medios y las TIC.
- Manipulativos. (Bloques lógicos, juguetes, minerales…)
- Impresos. (Libros, fotocopias, carteles…)
- Auditivos. (Cassettes, radio…)
- Audiovisuales. (Televisión, vídeo, videoconferencia…)
- Digitales. (Ordenadores, internet, tabletas…)
De la clasificación, se consideran como TIC las últimas tres citadas.
3. La integración de las TIC en los procesos de enseñanza-aprendizaje.
Uno de los errores más remarcables cometidos en la incorporación de las TIC en los
procesos de enseñanza-aprendizaje ha sido aislarlos del resto de variables curriculares, lo
que ha producido que se desarrollen de forma independiente. El docente debe adoptar con
mucho cuidado cuándo, cómo, por qué y de qué manera debe incorporarlos. La integración
curricular de las TIC en la enseñanza está condicionada a cómo los profesores toman
decisiones en torno a seleccionarlas, diseñarlas y evaluarlas para conocer su potencial
educativo. Todos los tipos de medios funcionan dentro de un ambiente de clase y de centro,
2. además de en un contexto curricular y sociocultural que condicionará la forma en la cual es
puesta en acción.
● 3.1. Posibilidades que las TIC incorporan a la formación.
1. Ampliación de la oferta informativa que se le ofrece a los estudiantes.
2. Flexibilización de los entornos formativos.
3. Eliminación de las barreras espacio-temporales.
4. Facilidad de introducir y renovar los contenidos cuando la formación es a
través de la red.
5. Nuevas herramientas de comunicación que nos permiten una formación
sincrónica y asincrónica.
6. Nuevas escenografías comunicativas para interacciones de profesores y
alumnos.
7. Formación individual y en grupo.
8. Formación multimedia, y favorece los diferentes tipos de inteligencias de los
alumnos.
9. Ofrece nuevas posibilidades para la orientación y tutorización.
10. Nuevas modalidades de organizar la actividad docente.
11. Facilitar el perfeccionamiento continuo de los egresados.
12. Gran utilidad para la formación y perfeccionamiento del profesorado.
13. Nuevas relaciones entre los tres agentes; profesor, alumnos y contenidos.
14. Realizar las actividades administrativas y de gestión de forma más rápida y
fiable.
● 3.2. Limitaciones a contemplar en la incorporación educativa de las TIC.
1. La representación audiovisual nunca es una representación exacta de la
realidad, por ende está manipulada.
2. Existe una tendencia a favorecer la contemplación pasiva, abusar de ellos,
en vez de usarlos como instrumentos de conocimientos reflexivos.
3. Formación del profesorado para su utilización e incorporación en el currículo.
4. Las características organizativas de nuestras instituciones educativas que no
facilitan su incorporación.
5. El poder que se le ha asignado para resolver los problemas de la educación.
4. Criterios a contemplar para la selección de las TIC.
- Su selección debe hacerse teniendo en cuenta los objetivos y contenidos que se
desean alcanzar y transmitir.
- La predisposición que el alumnado y el profesorado tienen hacia ellas.
- Contemplar las características de los receptores: edad, nivel sociocultural y
educativo…
- El contexto instruccional y físico es un elemento condicionador, el cual facilita o
dificulta su inserción.
- Las diferencias cognitivas entre los estudiantes, que pueden condicionar el alcance
de resultados.
- Las TIC deben propiciar la intervención sobre ellas.
- Se deben considerar las características técnicas y sémicas y sus parámetros de
cualidades.
3. - Seleccionar TIC que permitan la participación del profesorado y alumnado en la
construcción de mensajes.
- Contemplar la capacidad como canal de los mensajes, además de las características
de los mensajes que transmite, y los valores.
- Sus calidades técnicas, facilidad, y versatilidad deben ser contempladas también.
- Seleccionar TIC de fácil utilización.
- Seleccionar TIC que puedan relacionarse y combinarse con otras.
SI debemos tener en cuenta unos criterios que las TIC han de tener presentes a la hora de
utilizarse por el profesorado en su práctica docente, debemos matizar que deben percibirse
antes que como elementos técnicos, como elementos didácticos y de comunicación. Esto
nos lleva a una serie de principios generales a tener en cuenta cara a su selección:
1. Se necesita un cambio en las actitudes, concepciones del aprendizaje, profesorado,
enseñanza, así como cambios en la organización de las instituciones escolares.
Dicho cambio que afectaría a:
- Las actitudes y concepciones sobre cómo deben desarrollarse los procesos
de enseñanza-aprendizaje. La introducción de las TIC modifica la posición
del alumnado de una actitud pasiva a una activa, dándoles mayor autonomía
y una posibilidad de construir su propio conocimiento.
- La concepción del aprendizaje. Con las TIC el alumno tiene una posición más
activa y autónoma.
- La concepción del profesorado y de la enseñanza, dado que el docente
puede encontrar ayuda en estas tecnologías.
- Los aspectos organizativos de las instituciones escolares. La introducción de
las TIC también supone un cambio en los elementos organizativos de los
centros.
2. Formación y actualización permanente del profesorado.
3. Dotación y renovación permanente de equipos y material de paso o programas.
5. La aplicación de las TIC desde diferentes perspectivas curriculares.
La integración de los medios en la enseñanza no solo implica una incorporación física sino
una interrelación con los demás elementos didácticos. Por otro lado, asumir que cada
perspectiva curricular supone un modelo, teórico y práctico específico, de incorporación de
las TIC a los procesos de enseñanza-aprendizaje. Desde una perspectiva sistémica, esta
integración supone que los medios influyen y son influidos por los demás componentes
curriculares, y estarán condicionados por la naturaleza del contexto curricular que los
ampara. Desde este punto de vista, los medios participan de las valoraciones,
cuestionamientos y expectativas que suscita el currículo.
Zabalza (1991) habla de tener en cuenta una serie de aspectos a la hora de tomar
decisiones sobre los medios a utilizar en la enseñanza. La primera de todas a tener en
cuenta es buscar una congruencia entre el modelo didáctico del que partimos y la función
que se les encomienda. En segundo lugar hablamos de la adaptabilidad del medio al
4. contexto curricular. El funcionamiento de determinado medio va a depender de al menos
tres características: la calidad técnica del medio, el contexto de uso en el que se integra y
su funcionalidad curricular. Por lo que para referirnos a las cualidades didácticas de un
medio debemos tener en cuenta qué medio es, con respecto a qué sujetos, para qué tipo de
resultados y en qué tipo de condiciones.
Desde la racionalidad técnica los medios contribuyen a operativizar, controlar y regular la
práctica planificada. Se plantea al profesor como el técnico que los utiliza para transmitir la
información de forma eficaz, y si realmente los alcanzaron, para garantizar la funcionalidad
del proceso seguido. La selección de los medios sigue criterios de eficacia y utilidad. Desde
esta perspectiva el docente solo es un usuario de los medios, y los estudiantes receptores.
Desde la racionalidad interpretativa los medios son utilizados como instrumentos que
interpretan y explican la realidad, en un intento de comprenderla. Los medios reconstruyen
por medio de vías los procesos de enseñanza-aprendizaje en un intento de representación,
interna y externa, del profesor y los alumnos. Su selección se lleva a cabo también durante
la acción, en las situaciones interactivas. Los medios serán parte del conocimiento del
profesor y serán útiles para manejar procesos interactivos del aula y situaciones
imprevistas. La selección estará precedida por un análisis del aula que permita mostrar el
marco contextual. Los medios desempeñan funciones más amplias, desde perspectiva, los
medios no solo son elaborados por expertos sino que los alumnos y los profesores son
productores activos.
Desde la racionalidad crítica la idea fundamental es la de la transformación de la realidad
social: interesa que el individuo sea capaz de reflexionar y reaccionar ante la realidad para
responder a las injusticias externas y las desigualdades sociales. Los individuos deben
tener al alcance medios para concienciarse de cómo las condiciones sociales e ideológicas
influyen en sus vidas. Una de sus preocupaciones será cuestionar la elección de medios, y
explicar la repercusión en alumnos y profesores. Desde esta posición los medios son
usados para el análisis ideológico de los estereotipos ideológicos y culturales que ofrecen.
Por su parte Bautista (1989) identifica tres tipos de usos de las TIC en función de las
diferentes concepciones culturales:
- Transmisores/reproductores (concepción técnica del currículum).
- Prácticos/situacionales (concepción práctica del currículum).
- Críticos/transformadores (concepción crítica del currículum).
6. TIC, TAC, TEP: Tres enfoques de aplicación de las “Tecnologías de la
información y Comunicación” en actividades formativas.
- TIC: Tecnologías de la Información y Comunicación.
- TAC: Tecnologías para el Aprendizaje y el Conocimiento.
- TEP: Tecnologías para el Empoderamiento y la Participación.
Para comenzar hay que especificar que las tres suponen perspectivas complementarias, y
requerirá que el profesor aplique visiones, recursos y posiciones diferentes.
5. Desde la perspectiva de las TIC, ofrece recursos facilitadores y transmisores de
información, además de recursos educativos para estudiantes. Recursos que pueden ser
adaptados a necesidades y características dependiendo de cada sujeto, pudiendo conseguir
una verdadera formación audiovisual, multimedia e hipertextual. Los conocimientos que
deberá tener el profesor se centran en la vertiente tecnológica e instrumental.
Desde la posición de las TAC, ofrece instrumentos facilitadores del aprendizaje y la difusión
del conocimiento. Son vistas como herramientas para la realización de actividades para el
aprendizaje. Intenta orientar el uso de tecnologías del estudiante y profesor hacia algo más
formativo, con el objetivo de aprender más y mejor. El profesor debe dominar y tener
competencias para saber instalarlas en la práctica educativa.
Por último desde la posición de las TEP, no son meros recursos educativos, también son
instrumentos para la participación y la colaboración. El aprendizaje no tiene únicamente una
dimensión individual, sino también social; el aprendizaje no se produce por tanto sólo en las
instituciones educativas, cada vez es más ubicuo. Ello nos lleva a repensar el rol de la
escuela y de las instituciones de formación. Además el alumno es más proactivo, por ende
no es sólo consumidor de información, sino creador de ella también.
Las tres últimas letras de las siglas mencionadas “CCP” serán las líneas futuras de
aplicación de estos recursos en el ámbito de la enseñanza; comunicación, conocimiento y
participación.
7. Roles del profesorado en los nuevos entornos de comunicación
mediados por las TIC.
En cuanto a la posición del profesorado, este sigue siendo la pieza clave para que el
sistema educativo funcione correctamente.
Los roles fundamentales que desempeña el profesorado en los nuevos entornos de
formación de los docentes serían los siguientes:
Los profesores en los nuevos entornos perderán su papel de transmisores de información,
ya que las TIC pondrán una amplitud de información a disposición de los alumnos las
nuevas tecnologías, lo que van a llevar al docente a que desempeñen nuevas funciones
relacionadas con ésta, que irán desde buscar información en la red para adaptarla a las
necesidades generales de sus estudiantes o a las necesidades y demandas concretas que
a la hora de la evolución del proceso de aprendizaje se vayan presentado. Sin olvidarnos
que el profesor desempeñará un fuerte papel en la formación del sujeto para que evalúe y
seleccione la información pertinente, de la voluminosa que se le ofrecerán por diversos
medios.
Debido a los comentarios realizados esto conlleva a presentar otra de las funciones que van
a desempeñar y es aquella relacionada con el diseño de los medios y de los entornos de
aprendizaje. Esto supone la organización y gestión de diferentes elementos para que de
esta forma se pueda facilitar el aprendizaje en los estudiantes y que el profesor realice una
serie de esfuerzos para garantizar que todos los participantes en el proceso tengan las
6. mismas garantías para su incorporación, independientemente de sus posibilidades de
acceso a la tecnología, de su localización física, de su nivel de comprensión del lenguaje, o
de su habilidad y pericia para interaccionar con el sistema y que todos estén trabajando con
la información que progresivamente se les vaya presentando, realizando las actividades y
siguiendo el cronograma que se haya previsto para la secuenciación de la actividad.
El docente se convertirá en un facilitador del aprendizaje desde la perspectiva que lo
importante no será el entorno en que se produzca, sino que el mismo se encuentre a
disposición del estudiante para que éste llegue a aprender. Ello implica que desempeñe
diferentes cuestiones como son: diseñar experiencias de aprendizajes para los estudiantes,
ofrecer una estructura inicial para que los alumnos comiencen a interaccionar, animar a los
estudiantes hacia el autoestudio, o diseñar diferentes perspectivas sobre un mismo tópico.
Ahora bien, también el profesor va a jugar un papel importante en el diseño de medios,
materiales y recursos adaptados a las características de sus estudiantes, materiales que no
sólo serán elaborados por él de forma independiente, sino en colaboración, tanto con el
resto de compañeros involucrados en el proceso, como con otra serie de expertos. Desde
esta perspectiva, el profesor deberá aprender a trabajar en equipo y en colaboración con
otros profesionales.
A continuación vamos a referirnos a dos de los roles que creemos son los más significativos
son los de moderador y tutor virtual.
Las tareas que normalmente realizará el tutor, serán muy variadas y en una serie de
trabajos sobre la tutoría virtual (Cabero, 2004 y Llorente, 2006) señalamos que el tutor
deberá librar funciones más amplias que la de mero consultor académico, desempeñando
otras que podríamos considerar de tipo técnico, académica, orientadora y organizativa.
La amplitud de tecnologías que el profesor tendrá a su disposición le llevará a que tengan
que ser competentes para seleccionarlas y adaptarlas a las necesidades de los alumnos, y
para ello deberá de contemplar los aspectos y criterios que hemos presentado
anteriormente.
En definitiva la sociedad de la información requerirá de un nuevo tipo de profesores más
adaptados a las necesidades que se le plantearán a la escuela de la sociedad. Y en este
sentido o el profesor se sube a la historia o formará parte de ella.
8. Roles de los estudiantes en los nuevos entornos de comunicación
mediados por las TIC.
La Sociedad del Conocimiento requiere un estudiante con una actitud más activa y participa
en su proceso de aprendizaje. Como se indica en el texto: "Los estudiantes deberán adquirir
7. nuevas competencias y capacidades, destinadas no sólo al dominio cognitivo, sino también
a su capacidad para aprender, desaprender y reaprender para adaptarse a las nuevas
exigencias de la sociedad. Esto nos llevará a pasar de un modelo de formación centrado en
el profesor a uno centrado en el estudiante. El estudiante deberá estar capacitado para el
autoaprendizaje mediante la toma de decisiones, la elección de medios y rutas de
aprendizaje, y la búsqueda significativa de conocimientos. Hechos que les llevarán a tener
mayor significación en sus propios itinerarios formativos" (Gisbert y otros, 2007, 275).
Desde un aspecto muy concreto, y referido al aprendizaje a través de Internet, pero que
puede trasladarse a otros contextos, Horton (2000, 18), nos habla de las características que
deben poseer los alumnos, para enfrentarse a estos nuevos entornos:
● Tener cierta capacidad para el autoaprendizaje y verlo en sí mismo
como positivo.
● Ser autodisciplinado, con capacidad de controlar su tiempo y gustarle
trabajar sólo.
● Saber expresarse por escrito con claridad.
● Poseer ciertas habilidades y experiencia en el manejo de las TIC y
valorar positivamente el papel de éstas en la educación.
● Tener necesidad de una determinada formación y carecer de la
disponibilidad necesaria para asistir a un curso presencial.
● Tener sentido positivo ante los pequeños problemas técnicos que se
presenten, y ser capaz de solucionarlos.
● Tener unos objetivos formativos claros.
● Tener algunos conocimientos previos de la materia que se va a tratar en
el curso.
En esta misma línea, Bartolomé y Grané (2004, 11), nos señalan que el estudiante del
futuro necesita dejar de aprender conceptos, para desempeñar otra serie de competencias
como son:
● Desarrollar habilidades para el autoaprendizaje.
● Desarrollar el sentido crítico, la búsqueda responsable y fundamentada
de cada información.
● Trabajar en equipo y saber trabajar en red.
● Aprender a dialogar.
● Ser flexibles y saber adaptarse.
● Ser capaces de participar activamente en los procesos.
● Tener dominio de lectura y la comprensión lectura textual, audiovisual y
multimedia,
● Ser capaces de expresarse, comunicarse y crear.
● Desarrollar las competencias básicas para seguir aprendiendo toda la
vida.
Al contrario de lo que se cree, los nuevos entornos, por su flexibilidad y abundancia
tecnológica, requerirán que el estudiante invierta más esfuerzo cognitivo en el aprendizaje y
8. la colaboración constante con las otras personas que participan en la acción formativa y ello
desde mi punto de vista implica que deberá poseer una serie de competencias para
desenvolverse en este nuevo contexto y, lógicamente, las instituciones de formación deben
contribuir a su formación.
● Adaptarse a un ambiente que se modifica rápidamente.
● Trabajar en equipo de forma colaborativa.
● Aplicar la creatividad a la resolución de problemas.
● Saber cooperar.
● Aprender nuevos conocimientos y asimilar nuevas ideas rápidamente.
● Creación y aplicación del conocimiento a situaciones nuevas y
desconocidas.
● Tomar nuevas iniciativas y ser independiente.
● Identificar problemas y desarrollar soluciones.
● Reunir y organizar hechos.
● Trabajar con fuentes en diferentes tipos de códigos y con distintas
fuentes de conocimientos.
● Comunicarse con diferentes tipos de herramientas de comunicación.
● Capacidad de control y dirección de los propios procesos formativos.
● Realizar comparaciones sistemáticas.
● Identificar y desarrollar soluciones alternativas.
● Y resolver problemas de forma independiente.
En síntesis como señalan Sangrá y González (2004, 89): "... el estudiante también deberá
aprender a modificar su actitud y el rol que ha desarrollado hasta ahora. Tendrá que adoptar
un papel activo, ya que tendrá que convertirse en el protagonista real de su proceso de
aprendizaje, mientras que el educador, el profesor, como ya hemos dicho, cambia su
función y se convierte en el dinamizador, el guía, el encargado de facilitar el proceso de
aprendizaje del estudiante. Pero para ello, el profesorado deberá hacer el esfuerzo de
entender al estudiante, de acompañarlo en la entrada a un nuevo contexto formativo, más
abierto, menos normativo, más libre y, por lo tanto, menos protector".
Los estudiantes del futuro tendrán que poseer diferentes competencias básicas para
aprender conocimientos nuevos, desaprender conocimientos adquiridos y ya no válidos por
las transformaciones del mundo científico y reaprender los nuevos conocimientos que se
vayan generando. También será necesario que estén capacitados, para el autoaprendizaje
mediante la toma de decisiones, la elección de medios y rutas de aprendizaje y la búsqueda
significativa de conocimientos. Y que deberá tener mayor significación en sus propios
itinerarios formativos.
Por último, el estudiante del futuro deberá estar formado para ser más activo en su proceso
formativo, eligiendo los códigos a través de los cuales desea recibir la información o
eligiendo su propio itinerario formativo; es decir, deberá saber pasar de lector a lectoautor, y
ello implicará una competencia mediática como ya hemos tratado en el apartado de la
alfabetización digital.