ACTIVIDA PRAXIS 2.3

1. UNIVERSIDAD NACIONAL DE
EDUCACIÓN
Carrera de:
Educación
Básica
Modalidad a distancia
Marco teórico
Autores:
Chuquimarca Flores Miriam Elena
Estrella Cevallos Julio Paúl
Gómez Araujo Mónica Daniela
Zurita Duque Darwin Guillermo
Pastaza,
Ecuador01-julio-
2021

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Estrella Cevallos Julio Paúl
Gómez Araujo Mónica Daniela
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1. Marco teórico
Las emociones
Los ciudadanos poco o nada presta atención a su estado emocional, sin embargo son nuestras
compañeras de toda la vida, son parte fundamental de nuestra psiquis (el espíritu, el poder de la
mente), gracias a ellas podemos interactuar con nuestros semejantes, entender nuestro entorno,
respetar a los seres inferiores y comprender a nuestros superiores. Según Cassà (2005) “Las
emociones intervienen en todos los procesos evolutivos: en el desarrollo de la comunicación, en el
conocimiento social, en el procesamiento de la información, en el apego, en el desarrollo moral, etc”
(p.3). Los docentes no solo deben preocuparse de enseñar contenidos establecidos por un programa
de estudios, deben aprender a conocerse y a reconocer los estados emocionales de los sujetos para
entender las diferencias individuales que cada individuo posee, para buscar las mejores estrategias
en el proceso enseñanza aprendizaje.
Las emociones fueron, son y serán motivos de estudio, pero sin embargo a la hora de
comprender el comportamiento de cada individuo, no toman en cuenta sus propias emociones,
Según Bisquerra (2011) “La conciencia emocional consiste en conocer las propias emociones y las
emociones de los demás. Esto se consigue a través de la autoobservación y de la observación del
comportamiento de las personas que nos rodean” (p.2). Tomando en cuenta esta afirmación, los
individuos deben aprender a autorregular sus propias emociones para interactuar asertivamente con
los demás. Los distintos integrantes de las comunidades educativas carecen o no toman en cuenta sus
estados de ánimo para solucionar dificultades experimentadas en el diario convivir, esto ha llevado a
conflictos entre docentes, padres de familia y estudiantes.
Las emociones, juegan un papel preponderante en la vida de una persona, los gestos
que realizamos dependen del estado de ánimo y sobre todo de la salud física y mental. Las
empresas y en especial el sistema educativo ha dejado a un lado este comportamiento
humano, razón por la cual es motivo de preocupación que en pleno siglo XXI, solamente hay
interés para producir dentro un mercado consumista dejando a un lado el talento humano,
si empezamos a trabajar paralelamente las asignaturas poniendo énfasis las emociones
individuales, crearemos sociedades más justas, capaces de resolver problemas en el futuro,
como expresa Dueñas (2002) “Los niños van cambiando sus estrategias para poder hacer

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frente a las distintas experiencias a través del control de las emociones, pues el niño se
enfrenta mejor a sus emociones a medida que va comprendiendo sus causas” ( p.10).
La apatía entre seres humanos cada vez es mayor, la falta de relaciones humanas hace
que cada individuo se un mundo aparte, inclusive nadie presta atención a sus propias
emociones, peor a las de las demás personas, solo piensan en conseguir lo que desean, sin
importar si en el camino hacen daño a sus semejantes; es necesario que las instituciones
educativas presten mayor atención al comportamiento humano. La concientización es el
primer paso para comprender como interactúan con los demás, como expresa Bisquerra
(2011) “La conciencia emocional consiste en conocer las propias emociones y las emociones
de los demás. Esto se consigue a través de la autoobservación y de la observación del
comportamiento de las personas que nos rodean” (p. 2).
A lo largo de la historia los diferentes fisiólogos, solo se han dedicado, al estudio del
cerebro en su parte funcional mas no a la ejecución cognitiva y de control de sus actos. En los
últimos años se ha hecho hincapié en lo que el individuo siente, desea y anhela. Según James
(1985) “al dividir el cerebro en centro sensoriales y motores, se han encontrado con que su
división guarda un exacto paralelismo con el análisis efectuado por la psicología empírica de
las partes perceptiva y volitiva de la mente en sus elementos” (p. 1). Luego de entender que las
emociones es el alma mismo del individuo no debemos aislada en los diferentes procesos de
enseñanza y aprendizaje, una educación afectiva generará aprendizajes significativos y un
mejor desenvolvimiento por el resto de la vida.
Las emociones y el proceso aprendizaje.
Las emociones son expresiones de nuestro cuerpo cuando sienten un estímulo según
Ibarrola (2011), “son fenómenos multidimensionales […]: cognitivo (Cómo se llama y que
significa lo que siento), fisiológico (qué cambios biológicos experimento), conductual (hacia
donde dirige cada emoción mi conducta) y expresivo (a través de que señales corporales se
expresa)” (p. 5)

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La cognición y la emoción influyen en el aprendizaje ya que aprendemos lo que nos
despierta la curiosidad e interés; dentro del proceso de enseñanza y aprendizaje tenemos las
emociones positivas como, la curiosidad, interés, confianza, la calma, así como las emociones
negativas, entre ellasel miedo, stress, aburrimiento y la envidia. Las emociones positivas
fortalecen el aprendizaje porque permite que el cerebro asocie mejor la información e
interiorice por si solo el conocimiento. No obstante, las emociones negativas dificultan la
asimilación del aprendizaje ya que bloquean la memoria, creando tensión y provocando un
bajo rendimiento escolar. Según Domínguez y Rodríguez (2004) “el sistema emocional
constituye el sistema motivacional primario de la conducta humana, siendo el sistema
emocional el que organiza la personalidad, la conducta y las cogniciones” (p. 53).
El rol del docente y del padre de Familia
Dentro del proceso educativo, se ha tendido a privilegiar los aspectos cognitivos por
encima de los emocionales. Incluso para muchos estos dos aspectos deben ser considerados
por separado; sin embargo, esto no es conveniente si se pretende lograr el desarrollo integral
del educando. Para poder incorporar los aspectos emocionales en el proceso educativo se
debe caracterizar en qué consisten las emociones y cómo a partir de estas surge la educación
emocional y qué papel juega está dentro de dicho proceso. Como lo afirma Contreras (2016)
“Los conocimientos, competencias, actitudes y motivaciones del profesorado se vuelven con esto
importantes anclas e impulsores del desarrollo escolar, siendo de suma relevancia para la calidad
educativa que no sean descuidados o desatendidos”. (p. 18).
Una de las falencias en la educación, es la no articulación de la trilogía educativa,
docentes, padres de familia y comunidad educativa, ya que es el eje primordial para una
aprendizaje significativo, un aprendizaje que tiene una interconexión con la educación
emocional y que la misma es desconocida por los padres de familia y en un porcentaje alto
por los docentes y estudiantes; la educación emocional tiene aspectos positivos como la
interrelación con sus pares, seguridad, autoconocimiento, autonomía y empatía por los
demás. Al igual que tiene aspectos negativos como la ansiedad, la depresión, la indisciplina, la
violencia, los trastornos de la alimentación, entre otros, los mismos que por desconocimientos

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dentro del entorno familiar ha conllevado a propiciar castigos físicos, verbales y psicológicos.
Factores que afectan notablemente en el desarrollo de la inteligencia emocional, el
razonamiento y la identificación de emociones, imposibilitando su capacidad de adaptación y
resolución de conflictos de manera eficaz, a los problemas con los que se enfrentan día a día
en el entorno en el que se desarrollan y por ende propician un bajo rendimiento escolar.
Por lo tanto, la transformación humana debe comenzar por los docentes que son la
guía dentro del proceso enseñanza y aprendizaje, los mismo que conllevara a que los
educandos sean personas críticas, reflexivas, colaborativas y sobre todo sean empáticas para
con la sociedad en la que están inmersos; y a través de ellos llegar a una concientización en
el cambio de actitudes de los padres de familia. Todo esto implica tener una sociedad más
justa autorregulada emocionalmente, que persigan objetivos en común.
Gestión del conocimiento
El éxito o fracaso de una sociedad depende del conocimiento, las instituciones
educativas son las piedras angulares para el desarrollo de la sociedad, los países en vías de
desarrollo poco o nada han invertido en la gestión del conocimiento, mientras que los países
progresistas ponen mucho énfasis en la investigación - acción. Es importante y primordial
empezar a generar conocimientos para suplir las necesidades de las futuras generaciones. La
gestión del conocimiento está inmersa en el campo educativo como uno de los elementos de
su transformación, en donde los docentes dejan su rol de transmisores de conocimientos y
pasan a ser guías del proceso de enseñanza grupal y colaborativa de los dicentes. Su función
es promover la transferencia de conocimientos de una persona a un grupo de personas de
manera sistemática, lo que permite conocernos como estamos internamente como
institución educativa y esta se fortalezca. Bhatt (2000), las estrategias para la creación de
conocimiento, la investigación y el aprendizaje continuos son esenciales para generar nuevas
ideas, formular conceptos o explorar nuevos conocimientos.
La exploración de nuevos conocimientos tiene cuatro fases que viabilizan su
ejecución, la socialización a los sujetos que están inmersos en este cambio a través del

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compartir experiencias individuales, la externalización de estas experiencias, la
combinación de información, es decir compartir y recibir experiencias, la interiorización
que permite formar un colectivo capacitado eficazmente con un objetivo en común. Todo
esto conlleva a tener actores que aprenden a trabajar en función de equipo, tomando en
cuenta el contexto en el que están inmersos para ejecutar lo aprendido a través de la
organización y sistematización. La gestión del conocimiento se centra en la transformación
de la sociedad, sus niveles, contextos socioculturales y tecnológicas, razón por la que es
importante identificar los ámbitos de organización y las practicas escolares para poderlo
aplicar y de esta manera poder entregar a la sociedad profesionales para el desarrollo
económico y social, centrado en el aprendizaje y no en la enseñanza.
Taxonomías del conocimiento
Analizando la taxonomía los seres humanos poseemos distintos tipos de
conocimientos, como son el tácito, tácito cognoscitivo, tácito técnico, explícito, individual,
social, declarativo saber acerca de algo (know-about), procedural, causal, condicional saber
cuándo (know-when), relacional y pragmático, algunos de estos difícilmente podemos
cambiarlos, sin embargo, estos deben ser aprovechados como punto de partida para la
generación de nuevas ilustraciones de la percepción del espacio y tiempo. La taxonomía del
conocimiento ubica en primer lugar el proceso intelectual de cada uno de los individuos ya
que no busca solo su repetición memorística tradicional, sino la interiorización de la
enseñanza. Esta herramienta le permite al docente conocer, analizar, aplicar y evaluar si un
aprendizaje fue significativo para el dicente ya que parte desde su necesidad de aprender.
La taxonomía de Bloom (2011) persigue una educación activa que deje atrás las
practicas tradicionalista donde el aprendizaje se centra en una transmisión de conocimiento,
es decir escuchar, memoriza y comprender. Bloom se centró en las necesidades individuales
de cada uno de los discentes para desarrollar habilidades y creatividad, para general nuevos
conocimientos que les permita solucionar problemas de su entorno. Las funciones cognitivas
son los procesos mentales que nos dan la información del ambiente. Esto nos permite entender

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y relacionarnos con el mundo que nos rodea. El cerebro procesa información que llega a través
de los sentidos permitiendo seleccionar, almacenar, transformar, elaborar y recuperar la
información obtenida de nuestro entorno permitiendo tener una capacidad de análisis en la
resolución de conflictos.
Nuestra sociedad en la actualidad carece de creatividad y razonamiento crítico, lo que
ha conllevado a una búsqueda de bienestar individual, que nos afecta en todos los ámbitos,
social, cultural, económico y educativo, dejando de lado el factor principal de una sociedad de
desarrollo como lo es el bienestar grupal, a través de la organización y la sistematización de
los procesos; otro factor negativo dentro del entorno en el que nos desarrollamos es la falta
de empatía para con nuestros semejantes, por último la falta de compromiso por diferentes
entes inmersos en el campo educativo como docentes, directivos y autoridades, no ha
permitido la transformación de la educación que coadyuve a formar dicentes de manera
analítica, crítica, con razonamiento y con capacidad de discernimiento para la resolución de
conflictos, para tener una sociedad que apueste al bien común y a la solución de problemas de
manera creativa.

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2. Referencias
Bisquerra Alzina, R. (2011). Educación emocional. Padres y maestros.
https://redined.educacion.gob.es/xmlui/bitstream/handle/11162/81300/0082011301234
8.pdf?sequence=1
Carballo A. y Portero, M. (2018). ¿Es verdad que solamente aprendemos aquello que
nos emociona? En A. Carballo y M. Portero, 10 ideas clave. Neurociencia y educación.
Aportacionespara el aula (113-147). GRAO.
Cassà, È. L. (2005). La educación emocional en la educación infantil. Revista
interuniversitaria de Formación del Profesorado, 19(3), 153-167.
https://www.redalyc.org/pdf/274/27411927009.pdf
Contreras, T. S. (2016). Liderazgo pedagógico, liderazgo docente y su papel en la
mejora de la escuela: una aproximación teórica. Propósitos y representaciones, 4(2), 231-284.
http://revistas.usil.edu.pe/index.php/pyr/article/view/123
Cuevas, I. O. Implementación de Sistemas de Gestión del Conocimiento en
Organizaciones de Tecnologías de la Información y Comunicaciones.
Dueñas Buey, M. L. (2002). Importancia de la inteligencia emocional: un nuevo reto
para la orientación educativa.http://e-spacio.uned.es/fez/eserv/bibliuned:EducacionXXI-
2BB75B2C-720F-A542-4DCE-43297DDB55B7/Documento.pdf
James, W. (1985). ¿Qué es una emoción? Estudios de psicología, 6(21), 57-73.
https://scholar.google.es/scholar?hl=es&as_sdt=0%2C5&q=que+son+las+emosiones+&btn
G=
Minakata Arceo, Alberto (2009). Gestión del conocimiento en educación y
transformación de la escuela. Notas para un campo en construcción. Sinéctica, Revista
Electrónica de Educación, (32), 1-21.
Mujica, F., Inostroza, C., & Orellana, N. (2018). Educar las emociones con un sentido
pedagógico:Un aporte a la justicia social. Revista Internacional de Educación para la Justicia
Social (RIEJS). 124. [20:48]
Palmero, F. (1997). Emoción. Breve reseña del papel de la cognición y el estado
afectivo. Revista electrónica de motivación y emoción, 2(2-3).
http://reme.uji.es/articulos/apalmf245161299/texto.html