El documento describe varias anomalías en los testículos, incluyendo el hidrocele (acumulación de líquido en el escroto), criptorquidia (ausencia de uno o ambos testículos en el escroto), y testículos ectópicos (localizados en otra parte del cuerpo que no sea el escroto). El hidrocele generalmente se resuelve solo en los primeros 6-12 meses de vida, mientras que la criptorquidia y los testículos ectópicos a menudo requieren cirugía para corregirlos y prevenir problemas de fertil
1. Anomalías en los testículos
Hidrocele
¿Qué es?
El hidrocele es una colección de líquido en el escroto (piel que recubre los testículos). Cuando
esto pasa parece que el testículo sea más grande y de color más claro. Esto sucede porque el
conducto peritoneo-vaginal (conducto que comunica la cavidad abdominal y el escroto) no se
ha cerrado correctamente y permite la entrada de líquido en el escroto. Afecta al 1-2% de los
recién nacidos.
Evolución y tratamiento
En la mayoría de casos el hidrocele se resuelve sin tratamiento entre los 6 ó 12 meses de vida.
La comunicación entre el escroto y el abdomen se cierra espontáneamente y desaparece el
líquido acumulado en el escroto.
Hay algunos casos, los menos, en que este conducto permanece abierto (hidrocele
comunicante) con lo que el acumulo de líquido es mayor y puede ir acompañado de una hernia
inguinal. Es estos casos es muy típico que el hidrocele aumente a lo largo del día y sea menor
por la mañana. Es necesaria la cirugía para resolver el hidrocele y la hernia.
Testículos ectópicos
Son testículos que no están presentes en la bolsa escrotal sino que se localizan en otra parte
del cuerpo: en la base del pene, en la ingle, arriba del pubis, etc. Son testículos que
descendieron del abdomen pero que hicieron un recorrido distinto al habitual.
Estos testículos hay que localizarlos y extirparlos.
2. Criptorquidia
¿Qué es?
Es la ausencia de uno o los dos testículos dentro del escroto. Durante la vida fetal los testículos
tienen que realizar un largo recorrido desde el interior del abdomen hasta el escroto. El
descenso de los testículos se produce en el séptimo mes de embarazo. En ocasiones los
testículos se quedan a medio camino y no se pueden palpar en la bolsa escrotal y es lo que
llamamos criptorquidia.
Los testículos que no han descendido al año de vida se han de evaluar concienzudamente.
La ausencia del testículo en la bolsa puede deberse a:
Ausencia total de testículo (anorquia): puede ser por un problema hormonal o bien porque se
produjo una torsión del mismo durante la vida fetal que lo hizo desaparecer. Con el tiempo (a
partir de la adolescencia) a estos niños se les pone una prótesis dentro del escroto por razones
psicológicas.
El testículo no desciende a la bolsa escrotal porque está en el abdomen. Es una situación que
hay que resolver en los primeros dos años de vida, normalmente con cirugía. Si no se hace
descender el testículo a su posición normal existe el riesgo de tener un problema de esterilidad
en la vida adulta ya que puede perder su función: fabricar espermatozoides.
Testículos ectópicos (ver apartado)
El testículo a veces está en la bolsa escrotal y a veces no: testículo retráctil o en ascensor (ver
apartado)
Testículos en ascensor
3. El testículo permanece en su posición normal, pero cuando recibe un estímulo asciende hasta
la región inguinal. No necesitan tratamiento
Testículos retráctiles
Es testículo está fuera del escroto, se puede descender con la mano pero al soltarlo vuelve a
ascender.
En los niños mayores de un año presentan un reflejo cremastérico (ascenso automático de los
testículos ante un estímulo) muy vivo y si está nervioso o presenta cosquillas en la exploración
los testículos suben.
No hay que realizar ningún tratamiento y no causan ninguna repercusión en el niño.