1. UN TOQUE VIRTUAL PARA UN MEJOR APRENDIZAJE
La educación a distancia se a convertido en una gran oportunidad de preparación
académica que por cuestiones económicas, de tiempo y otros recursos impedían el
desarrollo personal y profesional de muchos hombres y mujeres. Es preciso señalar
que el éxito o fracaso de un curso virtual se encuentra en gran parte asociado al nivel
de tutoría con que el participante se encuentre.
Ser tutor virtual tiene sus complicaciones pues a falta de contacto físico se generan
algunas complicaciones y se hace más compleja la comunicación, siendo el punto más
neurálgico la evaluación ya que se carece de observación directa, por ello el perfil del
tutor debe alcanzar estándares como: la empatía, la confianza, la sintonía con los
participantes, la pro actividad, ser comunicativo, experto en didáctica y en el manejo
de registro de progresos de los participantes y como no un excelente anfitrión para
mantener motivados a los participantes evitando de ésta manera la deserción. Un tutor
virtual debe tener amplio conocimiento del tema tratado en el curso ya que él es quien
debe lograr que los participantes alcancen el desarrollo de sus capacidades a través de
los indicadores de evaluación y es quien debe retroalimentar para que se logre los
objetivos trazados en el programa
La educación a distancia y la tutoría virtual según Franco Gonzales (2003) el apoyo del
tutor constituye uno de los principales factores de individualización del proceso de
aprendizaje, ya que debe acompañar a cada alumno y atender las diferencias
personales.
Tutor ·Proviene del Latín tutor – tutoris y se refiere a quien cumple el papel de
defender, guardar, preservar, sostener, sustentar,