Los turbofan son motores a reacción que reemplazaron a los turborreactores. Se componen de un ventilador al frente que divide el flujo de aire, compresores que aumentan la presión y temperatura del aire, una cámara de combustión donde se quema la mezcla de aire y combustible, turbinas que hacen girar ejes mediante el paso de los gases calientes, y una tobera de escape que acelera los gases para generar empuje.