El documento habla sobre la necesidad de formar a los estudiantes para el futuro a través de nuevas políticas educativas que desarrollen sus capacidades y les brinden acceso a una educación basada en tecnología, valores y responsabilidad social. Propone diseñar e implementar medidas administrativas orientadas al desarrollo óptimo de la educación, favoreciendo a las regiones menos privilegiadas. También menciona el programa República Digital como una política estatal para lograr estos objetivos.