La obra La Celestina, publicada en 1499 en Burgos, narra los amores trágicos entre Calixto y Melibea, mediados por la alcahueta Celestina. Aunque es un texto enteramente dialogado que incluye técnicas teatrales, su extensión y frecuentes cambios de escenario dificultan su representación, por lo que su género literario es incierto, ya sea teatro o novela.
2. LA CELESTINA.
Apareció en
Burgos en 1499.
Su autor
Fernando de
Rojas, escondió
su nombre en
unos versos. En
el prologo cuenta
como leyó un
tramo de autor
anónimo y
decidió
3. La celestina refleja la crisis de la sociedad
medieval y el auge de una nueva clase social,
la Burguesía.
En la obra se narran los amores de Calixto
y Melibea, mediados por la alcahueta
Celestina, que terminaran de forma trágica.
4.
5. Siempre ha habido dudas acerca del genero
de la Celestina :
¿es teatro o es novela?.
Es un texto enteramente dialogado,
incluye técnicas dramáticas, como los apartes,
y esta dividido en veintiún actos: esto indica un
genero teatral, pero la extensión de la obra y
los continuos cambios de escenarios hacen
que sea difícil de representar.
10. En la Celestina, el amor de Calixto y Melibea es
también una parodia de amor cortes, que tanto
éxito tubo en la poesía medieval.
En este pasaje, Calixto utiliza sus armas
retoricas, heredadas del amor cortes para
seducir a Melibea. Calixto salta a el huerto de
Melibea persiguiendo un halcón que se le ha
escapado. Queda deslumbrado por la belleza
de la muchacha e intenta conquistarla. Sin
embargo, Melibea no reacciona demasiado
bien.
11. Calixto: En esto veo Melibea, la grandeza de dios.
Melibea: ¿ en que Calixto?
Calixto: En dar poder a natura que de tan perfecta hermosura te
dotase y a mi inmérito, tanta merced que verte alcanzase y en tan
conveniente lugar, que mi secreto dolor manifestarte pudiese. Sin
duda incomparablemente es mayor tal galardón que el servicio,
sacrificio, devoción y obras pías que por este lugar alcanza yo
tengo a dios ofrecido … ¿Quién vio en esta vida cuerpo glorificado
de ningún hombre , como ahora el mío?. Por cierto los gloriosos
santos, que se deleitan en la visión divina, no gozan mas que yo
ahora en el acatamiento tuyo. Mas, ¡oh , triste! Que en esto
diferimos: que ellos puramente se glorifican sin temor de caer de
tal bienaventuranza, y yo, mixto, me alegro con recelo del esquivo
tormento, que tu ausencia me ha de causar.
Melibea: ¿por gran premio tienes este Calixto?
Calixto: téngolo por tanto en verdad que, si dios me diese en el cielo
la silla sobre sus santos, no lo tendría por falta de felicidad.
Melibea: Pues aun mas galardón te daré yo, si perseveras.
Calixto: ¡oh bienaventuradas orejas mías, que indignamente tan
gran palabra habéis oído!.
12. Trabajo realizado integro por:
MIGUEL ÁNGEL ASENJO.