La iniciativa propone modificar el artículo 212 de la Ley del Impuesto sobre la Renta para excluir los ingresos generados por entidades extranjeras por concepto de intereses, siempre que los intereses se determinen a precios de mercado y no generen una deducción fiscal en México. El objetivo es reconocer las dificultades competitivas de las empresas mexicanas en el extranjero y alinear el sistema tributario de México con las recomendaciones de la OCDE.
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Reforma ISR intereses extranjeros
1. QUE REFORMA EL ARTÍCULO 212 DE LA LEY DEL IMPUESTO SOBRE LA
RENTA, A CARGO DEL DIPUTADO BENJAMÍN CLARIOND REYES
RETANA Y SUSCRITA POR INTEGRANTES DEL GRUPO
PARLAMENTARIO DEL PRI
Los suscritos, diputados y senadores de la LXI Legislatura del Congreso de la Unión,
integrantes de los Grupos Parlamentarios de los Partidos Acción Nacional y
Revolucionario Institucional, con fundamento en lo dispuesto en los artículos 71,
fracción II, y 72 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como
en la fracción II del artículo 55 y en el artículo 56 del Reglamento para el Gobierno
Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos someten a
consideración de la Cámara de Diputados iniciativa con proyecto de decreto por el que
se adiciona el decimocuarto párrafo al artículo 212 de la Ley del Impuesto sobre la
Renta, conforme a la siguiente
Exposición de Motivos
Una de las características de la economía mundial es la competencia en los mercados
internacionales, que redunda a su vez en crecimiento económico interno de cada país.
Diversas empresas mexicanas tuvieron que salir a competir en el entorno mundial no
sólo para crecer sino, incluso, como medida necesaria para sobrevivir.
En el último año, la economía mundial ha enfrentado una de las peores crisis que se
recuerden, cuyas consecuencias son por todos conocidas: altos niveles de desempleo,
quiebra de empresas multinacionales, cierre de plantas de producción, diferimiento o
incluso cancelación de proyectos de inversión. Por supuesto, el país no ha sido ajeno a
esta crisis, como demuestran la caída de 10.4 por ciento 1 del valor real del producto
interno bruto en el segundo trimestre de este año y la tasa de desempleo, que se situó en
5.68 por ciento.2
Las empresas mexicanas enfrentan una problemática particularmente difícil a causa de
las contracciones del mercado mundial, que han implicado una disminución de la
movilidad de capitales. Esto ha traído como consecuencias la disminución de la
inversión y de los intercambios comerciales. Las empresas mexicanas con presencia en
el extranjero se ven obligadas a buscar nuevas formas para resistir los embates de la
crisis económica.
Ante esa situación, es oportuno retomar la iniciativa que se presentó en septiembre de
2004, por el Ejecutivo federal, ante el Congreso de la Unión, con proyecto de "decreto
que reforma, adiciona, deroga y establece diversas disposiciones fiscales y se establecen
subsidios para el empleo y para la nivelación del ingreso", que fue turnada el 9 de
septiembre de 2004 a la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de
Diputados, para su estudio y dictamen. La propuesta fue aprobada por el Congreso de la
Unión el 13 de noviembre de 2004 y turnada al Ejecutivo, que la publicó el 1 de
diciembre de 2004, y entró en vigor el 1 de enero de 2005.
En virtud de esta reforma, se modificó el Título VI de la Ley del Impuesto sobre la
Renta, "De los Territorios con Regímenes Fiscales Preferentes y de las Empresas
Multinacionales", por "De los Regímenes Fiscales Preferentes y de las Empresas
Multinacionales". Asimismo, el Capítulo I del Título VI, "De las Inversiones en
2. Territorios con Regímenes Fiscales Preferentes", pasó a ser "De los Regímenes Fiscales
Preferentes".
La reforma pretendía desalentar y fiscalizar las inversiones realizadas conforme a estos
regímenes, sobre todo cuando obtuvieran ingresos pasivos, como intereses, dividendos,
regalías, ganancias de capital, mediante los cuales se diluyera la base del pago del
impuesto en México. Específicamente, el artículo 212 de la Ley del Impuesto sobre la
Renta se modificó para establecer la obligación de anticipar el pago del impuesto por
los ingresos provenientes de este tipo de regímenes, siempre que el impuesto sobre la
renta efectivamente pagado en el extranjero fuera inferior a 75 por ciento del que se
causaría y pagaría en México, eliminando así la lista de países clasificados como
territorios con regímenes fiscales preferentes.
Con la reforma, México comenzó a adoptar las recomendaciones emitidas por la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de la cual el
país es miembro desde 1994, al homologar su sistema tributario con la tendencia
mundial para combatir y minimizar el efecto negativo de estos regímenes. La
preocupación por fortalecer las reformas aprobadas en 2004 en materia de regímenes
fiscales preferentes se ha reflejado en diversas propuestas legislativas que dieron pauta a
modificaciones de dicho régimen en 2006 y 2007, principalmente porque las normas
aprobadas para el ejercicio fiscal de 2005 tuvieron un alcance mayor que el propósito
original de la citada reforma.
Para el ejercicio de 2007, los legisladores adecuaron el Capítulo I del Título VI de la
Ley del Impuesto sobre la Renta, relativo a los regímenes fiscales preferentes,
continuando su perfeccionamiento y ajustándose cada vez más a las recomendaciones
de la OCDE, tomando en cuenta que en un entorno tan globalizado como el actual las
empresas necesitan salir a competir al extranjero, en busca de su crecimiento y, en
algunos casos, su subsistencia. Por ello, dicha reforma tuvo como propósito fomentar la
competitividad de las empresas mexicanas a escala internacional.
En el informe Harmful tax competition, la OCDE considera que los "gobiernos no
pueden permanecer inactivos mientras sus bases fiscales son erosionadas a través de
acciones de países que ofrecen a los contribuyentes caminos para explotar paraísos
fiscales y regímenes preferentes para reducir el impuesto que de otra manera les sería
pagable".3 Sin embargo, reconoce "la distinción entre regímenes fiscales preferentes
aceptables y nocivos".4
Otros países han flexibilizado sus legislaciones tratando de impulsar la competitividad
de sus grupos empresariales. Tal es el caso de Francia, que busca anticipar el pago de
impuestos únicamente por las operaciones que tienen la intención de situar ingresos
fuera de Francia. Estados Unidos estableció una reforma en el periodo 2006-2009 para
que las empresas subsidiarias en el extranjero no anticiparan el impuesto en Estados
Unidos por los ingresos pasivos, pero en cambio recibirían mayor productividad y
generación de riqueza, la cual se gravará al percibir el dividendo en Estados Unidos.
España busca evitar el uso de subsidiarias extranjeras que erosionen la base del
impuesto local, no anticipa impuestos por actividades empresariales ni anticipa rentas
cuando se correspondan con gastos fiscalmente no deducibles de entidades residentes en
ese país.
3. Precisamente, el reconocimiento de que hay operaciones pasivas en regímenes fiscales
preferentes que no erosionan la base del impuesto en México dio origen a la reforma del
ejercicio de 2007, excluyendo ciertas operaciones que no generan una deducción fiscal
en México o que implicaron la salida de ciertos activos por la cual se pague el impuesto
considerando valores de mercado para evitar así una manipulación de la base gravable.
Si bien esta reforma incorporó la posibilidad de que por concepto de ciertos intereses no
tuviera que pagarse por anticipado el impuesto, fue insuficiente, dado que desconoció la
existencia de operaciones de financiamiento que se llevan a cabo totalmente en el
extranjero; es decir, las que no involucran la participación de entidades mexicanas en el
pago de intereses. Por tanto, no se deducen en México dichos intereses devengados o
pagados y de esta forma, no se erosiona la base tributaria en nuestro país. Sin embargo,
las disposiciones vigentes obligan a que se pague el impuesto sobre la renta en forma
anticipada, dando origen a una clara desventaja competitiva para las empresas
mexicanas.
Por ello y sin menoscabo al combate de los regímenes fiscales preferentes, es necesario
incorporar en la Ley del Impuesto sobre la Renta el reconocimiento de los ingresos por
intereses cuando éstos se deriven de capitales que no den lugar a una deducción fiscal
en México, toda vez que no erosionan la base del impuesto en nuestro país. Esta
propuesta pretende continuar con el reconocimiento que los propios legisladores han
observado como necesarios para mantener la competitividad de las empresas mexicanas
a nivel internacional, continuando con el fortalecimiento del régimen y el combate de la
elusión fiscal.
La competencia a nivel mundial requiere de un mayor esfuerzo tanto de los particulares
como del Estado, máxime que las condiciones actuales de la economía mundial así lo
demandan. Precisamente en estos momentos de crisis, es necesario construir una mejor
regulación para asegurar la libertad de circulación de capitales y de establecimiento que
son necesarias para el crecimiento económico, pero que también combata eficaz y
focalizadamente, la evasión y la elusión fiscal. De esta manera, se estará protegiendo la
generación de riqueza, inversión, empleos y ahorro, al mismo tiempo que se eliminarán
aquellas prácticas que sólo tengan como fin generar un daño en la recaudación.
Es importante resaltar que los ingresos por intereses a que se refiere esta iniciativa
pagarán el impuesto sobre la renta, como sucede en otros países de la OCDE, en el
momento en que la entidad o figura jurídica extranjera en la que participe directa o
indirectamente un contribuyente mexicano, distribuya los dividendos o utilidades
correspondientes y sean recibidos por las sociedades residentes en México. Por lo tanto,
estos ingresos en ningún caso dejarán de pagar el impuesto sobre la renta en México.
Así, la presente iniciativa tiene como propósito reconocer el difícil entorno competitivo
que enfrentan las empresas nacionales que operan en el extranjero y dar plena
observancia a las recomendaciones de la OCDE. Por lo anteriormente expuesto, se
propone a esta soberanía que se otorgue el mismo trato fiscal que actualmente
contempla la ley para ciertas operaciones pasivas, a los intereses que se originan en el
extranjero por operaciones celebradas totalmente en el extranjero y que no signifiquen
una deducción fiscal en México, es decir, que no erosionen la base fiscal.
4. Por lo expuesto, sometemos a consideración de esta soberanía la siguiente iniciativa con
proyecto de
Decreto por el que se adiciona el decimocuarto párrafo al artículo 212 de la Ley del
Impuesto sobre la Renta
Artículo 212. …
Adicionalmente, no se considerarán ingresos sujetos a regímenes fiscales preferentes los
generados por entidades o figuras jurídicas del extranjero por concepto de intereses,
siempre que éstos sean determinados a precios o montos que hubieran utilizado partes
independientes en operaciones comparables y no generen una deducción autorizada para
un residente en México.
…
Transitorio
Único. El presente decreto entrará en vigor el 1 de enero de 2010.
Notas
1. Informes sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública. Segundo Trimestre
2009. México: SHCP, 2009. página 4.
2. Ibídem, página 9.
3. Harmful tax competition. An emerging global issue. OCDE, Francia: 1998, página 37.
4. Ibídem, página 8.
Dado en el Palacio Legislativo de San Lázaro, a 15 de octubre de 2009.
Diputados: Benjamín Clariond Reyes Retana, Felipe de Jesús Cantú Rodríguez, María de
Jesús Aguirre Maldonado, Felipe de Jesús Cantú Rodríguez, María Cristina Díaz Salazar, Felipe Enríquez
Hernández, María Cristina Díaz Salazar, Rogelio Cerda Pérez, Ildefonso Guajardo Villarreal, Fermín
Montes Cavazos, Eduardo Alonso Bailey Elizondo, David Hernández Pérez, Camilo Ramírez Puente,
Jorge Alberto Juraidini Rumilla, Óscar Javier Lara Aréchiga, Andrés Massieu Fernández (rúbricas).
Senadores: Eloy Cantú Segovia, José Isabel Trejo Reyes, Fernando Elizondo Barragán, Ramiro
Hernández García (rúbricas).