2. Los problemas que perjudican al medio ambiente en un país como Venezuela
son muy diversos y principalmente están causados por la sobrepoblación en
zonas urbanas, incumplimientos de leyes ambientales, la explotación de
recursos y el aumento de las industrias. Entre los problemas
medioambientales de Venezuela destacan:
Contaminación del agua.
Contaminación del aire.
Acumulación de desechos sólidos.
Degradación de suelos.
Deforestación e incendios forestales.
Minería ilegal.
Tráfico de especies silvestres.
Ríos, playas, lagos, lagunas y otras láminas de agua se ven contaminadas por
el agua que procede de las industrias y del uso doméstico ya que esta agua
no es tratada. Además del agua no tratada, otro contaminante aún más
peligroso que daña el agua de Venezuela son los vertidos de los desechos
industriales de la industria petrolera y petroquímica. Según estudios oficiales los
ríos Guaire, el Tuy (en la imagen de abajo), el Tocuyo y Aroa y los lagos de
Maracaibo y el de Valencia son los que mayor contaminación presentan. Con
respecto a la contaminación del agua en Venezuela no podemos dejar atrás
todos los residuos que generan turistas y habitantes, plásticos, vidrios y
desechos sólidos también contaminan los cuerpos de agua.
Las industrias petrolera y petroquímica vuelven a tomar un papel importante,
ahora en la contaminación del aire de Venezuela por todas las emisiones de
gases tóxicos que generan. El gran problema es que no hay medidas que
controlen estas emisiones.
Aunque las industrias son muy contaminantes, también lo son los millones de
vehículos que cada día se encuentran circulando por las carreteras de
Venezuela. Son las grandes ciudades como Caracas, Maracaibo o regiones
como Ciudad Guayana o la región costera oriental las que se ven más afectadas
debido a la alta concentración urbana e industrial.
3. A pesar de que Venezuela no es un país demasiado poblado y no se generan
demasiados desechos sólidos, es cierto que sí tiene un gran problema respecto
a la acumulación de basura. Venezuela no cuenta con plantas de tratamiento,
que eliminen o reciclen los desechos que se generan, cuenta con solo
algunos vertederos de basura y la gran mayoría no reciben directrices técnicas
para gestionarlos. Cuando los vertederos están ya completos, los desechos se
depositan de forma ilegal en zonas verdes contribuyendo así a un impacto
paisajístico y de contaminación del agua, el suelo y el aire del entorno,
además de ser peligrosos porque pueden ser el origen de un incendio si se dan
altas temperaturas.
La tala y la quema de la vegetación está haciendo que aproximadamente el
32% de las zonas naturales de Venezuela sea devastado. Esta intervención en
la naturaleza se hace para explotar la madera, para construir carreteras, así
como para la agricultura y ganadería. La gran mayoría de los incendios son
provocados, aunque otros se producen por tener los bosques abandonados,
llenos de basura y con el follaje seco.
Venezuela cuenta con una gran parte de territorio protegido por su valor
ecológico, aunque este también se está viendo afectado por la deforestación y
la quema. Uno de los lugares más afectados es la reserva forestal de Ticoporo,
en la que 72.000 hectáreas de las 270.000 hectáreas protegidas están siendo
destinadas para el aprovechamiento del ser humano.
Hemos mencionado que se está haciendo un uso del territorio para fines
agrícolas, el uso de herbicidas, plaguicidas y fertilizantes, en definitiva, productos
químicos está haciendo que los suelos queden contaminados y degradados.
Realmente, lo que está pasando es que el uso de estos productos está siendo
indiscriminado por la agricultura intensiva que se da en el país. Como
consecuencia de la contaminación del suelo en Venezuela, los alimentos que
son producidos en él también estarán contaminados, así como el agua
subterránea por el lixiviado de estos contaminante.
La Amazonia está siendo muy afectada por la explotación minera, ya que para
poder llevar a cabo la explotación los mineros desbrozan toda la vegetación
además de cambiar el curso de los cuerpos de agua. La minería que se practica
es legal e ilegal y además de los problemas que tiene para el medio ambiente,
es una fuente de violencia ya que estos espacios están controlados por mafias.
4. Se está produciendo una caza desmesurada de especies exóticas
autóctonas de los ecosistemas que se encuentran en Venezuela. El fin de esta
caza es por motivos comerciales, normalmente ilegales. Si a la caza le sumamos
el resto de impactos que reciben los ecosistemas silvestres, vemos que las
especies que lo habitan se encuentran en constante peligro.
Es el conjunto de conceptos para describir, informar, identificar, valorar o
cualificar el sistema natural, ambiental o ecológico que nos rodea. En si,
las características sobre el medio ambiente son aquellos elementos
descriptivos o rasgos que permitan conocer la realidad del medio físico,
biológico y sociocultural.
Cada vez son más las ciudades que intentan ser ecológicas. Y algunas ya están
poniendo todo de su parte para conseguirlo. Sin embargo, otras todavía están
planteándose cómo lo van a hacer. Yo voy a hablar de las primeras, así que he
estado investigando bastante. Una cosa muy positiva que he descubierto es que
hay gobiernos que se preocupan por la ecología y la sostenibilidad. De hecho,
hay al menos un ejemplo en cada continente. Así que he optado por hacer lo
más lógico, elegir una ciudad de cada parte del mundo que está intentando, con
buenos resultados, ser ecológica. El resultado es una lista de las seis ciudades
más ecológicas del mundo.
Todos sabemos que Nueva Zelanda es un país con mucha naturaleza, y que se
esfuerzan mucho por protegerla. Por eso no es extraño que su capital sea la más
ecológica del mundo.
En Wellington viven más de medio millón de personas. Pero, a pesar de ello,
sus índices de contaminación atmosférica y de emisiones de gases de
efecto invernadero son bajos. Hay muchas reservas naturales, un jardín
botánico de 60 acres y un montón de senderos por los alrededores. Además,
quieren transformar la ciudad en una ciudad completamente ecológica e
inteligente para el año 2040.
Los países asiáticos, como China e India, se están desarrollando muy
rápidamente. Y eso hace que cada vez más ciudades estén alcanzando unos
niveles peligrosos de contaminación atmosférica. Penang es un lugar que tiene
fuertes influencias de ambos lados. Sin embargo, es diferente y única por dos
razones.
5. En primer lugar, tiene un buen índice de calidad del aire. Y en segundo lugar,
tienen previsto convertirla en una ciudad futurista y sostenible, como ninguna
otra del planeta. Van a construir varias islas justo junto a la costa actual, en las
que vivirán en paz y armonía tanto personas como animales salvajes.
Aunque Vancouver es mucho más grande que Wellington, comparten muchos
aspectos positivos. Las dos son ciudades junto a la bahía y están muy
comprometidas con las políticas ecológicas. Está claro que no han conseguido
estar en nuestra lista de las seis ciudades más ecológicas del mundo por nada.
Las políticas a las que me refiero se centran en la alimentación sana y la
conservación de los recursos. Vancouver ha tomado muy en serio el enfoque
de «los residuos valen dinero» y los están convirtiendo en combustible. Es una
práctica que todos deberíamos adoptar y respetar.
Escandinavia está considerada como el corazón del movimiento contra el cambio
climático a nivel mundial. Así que, como era de esperar, Gotemburgo es una de
las áreas urbanas más sostenibles del mundo. Es un lugar relativamente
pequeño, pero cuenta con una amplia red de tranvías, autobuses y barcos
que llevan a la gente a donde necesita. Además, funcionan casi
exclusivamente con energías renovables.
La cuestión es que la ciudad está situada en un archipiélago y, por tanto, hay
más de 20 islas que necesitan ser atendidas por este sistema. Sin embargo, aun
así es posible llegar a cualquiera de ellas desde el centro de la ciudad en menos
de 90 minutos.
El siguiente lugar del que quiero hablar es Durban. Se encuentra en Sudáfrica, y
en 2019 fue nombrada la ciudad más ecológica del mundo. La razón por la
que consiguió el primer puesto es la cantidad de espacios verdes que tiene.
No solo construyen nuevas zonas verdes, sino que protegen las existentes para
que no sean engullidas por las nuevas edificaciones. Es una batalla que muchas
otras ciudades del mundo han perdido. Sin embargo, Durban está consiguiendo
preservar y ampliar su bosque urbano. Y por ello, se merece la medalla que ha
recibido.
6. Puede que Sudamérica no se considere un referente en la batalla contra el
cambio climático. Sin embargo, la ciudad brasileña de Curitiba es un ejemplo
para todo el continente. Es la prueba de por qué es tan importante tener un
buen sistema de transporte público, y ha ayudado a poner el nombre de este
país en el mapa.
La ciudad no quería derribar edificios históricos para hacer carreteras más
anchas, así que creó un sistema de líneas de autobuses lanzadera sobre las ya
existentes. Consiguieron aumentar radicalmente el uso del transporte público
con carriles rápidos y estaciones designadas. Y, sorprendentemente, otras
ciudades de Sudamérica han empezado a hacer lo mismo.