Los métodos de valoración, también llamados métodos volumétricos, incluyen un gran número
de poderosos procedimientos cuantitativos que se basan en medir la cantidad de un reactivo
de concentración conocida que es consumido por un analito durante una reacción química o electroquímica.
Las valoraciones volumétricas involucran la medición del volumen de una disolución
de concentración conocida que es necesario para reaccionar completamente con el analito. En las
valoraciones gravimétricas se mide la masa de dicho reactivo en lugar de su volumen. En las valoraciones
coulombimétricas, el “reactivo” es una corriente eléctrica de magnitud conocida que consume
al analito.