1. Barranquilla, Colombia de 2017
Señora
Hirina Escobar
Directora del Colegio Beato Mariano de Jesus
Querida seño Hirina:
Han pasado muchos años ya desde que entraste a mi vida. Entonces fuiste una de
las personas más influyentes en ese momento y ese influjo permanece. Por eso hoy
quería regalarte esta carta de recuerdo o de agradecimiento, lo que prefieras. Es de
recuerdo porque tu figura no ha desaparecido de mi vida. Y es de agradecimiento
porque aún llevo conmigo todo lo que diste.
Sé que no todos lo hacen, sé que algunos maestros se limitan a recitar lo escrito,
pero tú fuiste más allá y me considero afortunada de haberte tenido como maestro. Por
ese empeño que ponías en que las cuentas me salieran bien, porque no dejabas que
perdiera la confianza en mí, porque siempre me decías que con un poco más
de esfuerzo lo conseguiría todo.
Tengo que agradecerte que no te limitaras a marcarnos los países en el mapa, que
jugáramos con la ortografía para aprenderlo de forma divertida, que nos
convencieras de que el inglés no era tan difícil como algunos decían. Y es que nos
enseñaste pensar de forma diferente, a elaborar nuestro propio criterio, a distinguir los
valores importantes de la vida.
Eso no lo hace cualquier maestro y tú lo hiciste. Pero lo que más te agradezco es la
confianza que depositaste en mí. Esa confianza me ha servido durante toda la vida
para no caer, para seguir intentándolo. En los momentos de duda, en los tiempos
en los que todo iba mal, cuando estaba a punto de tirar la toalla, siempre recordaba
tu voz diciendo: tú puedes. Pero no solo eso, lo más importante fue, que incluso
estando pequeña, pude apreciar tu gran y hermoso trabajo, del cual hoy en día
estoy profundamente enamorada.
Y si todavía no lo habías pensado, sí, quiero ser como tú. Toda la aquella
dedicación, amor, apoyo, esfuerzo que una vez me diste, es mi motivación para
querer transmitir lo mismo a mis estudiantes y ser cada día mejor. Gracias de
nuevo
Gracias, maestro.
Atentamente
Sharon Jimenez Goméz