La psicología del desarrollo estudia los cambios que ocurren en el ser humano desde la
concepción hasta la muerte, abarcando los aspectos físicos, cognitivos y psicosociales. Se
dividen las etapas del desarrollo en período prenatal, primera infancia, niñez, adolescencia,
juventud, madurez y vejez. El desarrollo está influenciado por factores hereditarios y ambientales
de forma continua a lo largo de la vida.
LA CENA DEL SEÑOR UN ESTUDIO BIBLICO PARA LA IGLESIA DE CRISTO
Psicologia del desarrollo
1. INTRODUCCIÓN
El desarrollo de la vida es un fenómeno complejo y apasionante. Es tarea complicada tratar de
condensar en un solo capítulo todo lo que hoy en día se conoce sobre el desarrollo del ciclo vital
del ser humano. Elegir los contenidos a exponer en un texto de estas características y cómo
hacerlo, tampoco son tareas fáciles. Los contenidos expuestos son conocimientos básicos y
consolidados en la disciplina, y la estructura de presentación responde al deseo de facilitar su
lectura y comprensión. El presente capítulo se divide en dos bloques. En el primero se presentan
algunas nociones fundamentales de la psicología del desarrollo, los tipos y diseños de
investigación utilizados en su estudio, y las perspectivas teóricas que se han propuesto para
analizar el desarrollo humano. El segundo bloque se divide en siete apartados relacionados con el
desarrollo y los cambios típicos que se producen en cada momento evolutivo, con el objetivo de
que el desarrollo sea entendido como un proceso continuo a lo largo de todo el ciclo vital, desde
el instante en que dos células encargadas de construir un nuevo ser humano se encuentran hasta
que llega el final de su vida.
Los objetivos de la psicología del desarrollo son:
• describir los cambios y conocer las pautas cuantitativas y cualitativas que sigue el desarrollo
humano en todas sus etapas, identificar el origen y los procesos implicados en los cambios de la
conducta a lo largo de la vida, tratando de proporcionar explicaciones sobre las causas, e intentar
predecir el desarrollo posterior en función del desarrollo previo. Los expertos en el estudio del
ciclo vital contemplan la existencia de tres factores dicotómicos que caracterizan el desarrollo: la
herencia y el medio, la continuidad y la discontinuidad, y la estabilidad y el cambio.
Ninguno de los tres factores es capaz de explicar por sí solo el desarrollo, sino la interacción de
todos ellos. La herencia y el medio se relacionan con el planteamiento de si las capacidades del
ser humano son producto de la herencia genética recibida o son fruto del aprendizaje de las
experiencias vividas por el individuo. La continuidad y la discontinuidad se refieren a interpretar
el desarrollo como un proceso en el que los cambios experimentados por la persona a lo largo de
su vida son el resultado de un proceso continuo y gradual que va sucediendo durante años o el
desarrollo es un proceso en el que los cambios son intermitentes y relativamente independientes
los unos de los otros (discontinuo). El último factor dicotómico que caracteriza el desarrollo –la
estabilidad y el cambio– está relacionado con si el individuo es el resultado final de las
experiencias que ha vivido a lo largo de su vida (estabilidad) o si el desarrollo es diferente en
cada momento y en cada etapa se desarrolla como alguien diferente de quien era en un momento
2. anterior (cambio). En sus orígenes, la psicología del desarrollo se centró en el estudio de los
cambios evolutivos en la infancia, pues se consideraba que prácticamente nada cambiaba en la
etapa adulta. Se definía el desarrollo como la adquisición progresiva de funciones, destrezas y
habilidades que van a permitir al niño interactuar con su medio ambiente para adaptarse a él.
La psicología del desarrollo es el área de la psicología que estudia los procesos de cambio y
continuidad que tienen lugar en la conducta y las habilidades psicológicas durante el transcurso
de la vida del ser humano desde la concepción hasta la muerte. Para estudiar dichos procesos se
utilizan diversos métodos (descriptivo, correlacional y experimental) y diferentes tipos de diseños
de investigación (diseños transversales, longitudinales y secuenciales) propios de esta disciplina.
Los psicólogos del desarrollo hacen un recorrido por las distintas fases del ciclo vital: el período
prenatal, del nacimiento a los 2 años, la primera infancia (2 a 6 años), la segunda infancia (6 a 12
años), la adolescencia, la juventud, la madurez y la vejez. En cada una de las etapas se analizan
con cierto detalle los aspectos más relevantes que tienen lugar en el desarrollo físico, cognitivo,
social y emocional.
El desarrollo humano es el conjunto de cambios que experimentan todos los seres humanos desde
el momento de la concepción y hasta su muerte y se le denomina «desarrollo del ciclo vital».
Este proceso afecta todos los ámbitos de la vida pero los tres principales son el físico, el
cognoscitivo y el psicosocial. El aspecto físico incluye el crecimiento del cuerpo y del cerebro, el
desarrollo de las capacidades sensoriales y de las habilidades motrices y en general la salud del
cuerpo. El aspecto cognoscitivo incluye la mayoría de los procesos psicológicos básicos y
superiores (aprendizaje, memoria, atención, lenguaje, razonamiento, pensamiento y creatividad).
El ámbito psicosocial por su parte agrupa las emociones, la personalidad y las relaciones sociales
Teorías del desarrollo
Desde el punto de vista explicativo, dos de los problemas centrales que buscan resolver los
psicólogos del desarrollo son identificar cómo los factores biológicos y contextuales se relacionan
para determinar el curso del desarrollo y determinar si este es un proceso continuo y organizado
en etapas. Se han propuesto múltiples teorías para explicar estos aspectos así como la estructura y
funcionamiento general del proceso. Sin embargo, no existe un acuerdo generalizado o una teoría
universalmente aceptada.
3. Las teorías existentes en general se pueden enmarcar en cinco perspectivas que resaltan diferentes
procesos de desarrollo y adoptan posturas distintas: psicodinámica, del aprendizaje, cognoscitiva,
contextual y evolucionista. La perspectiva psicodinámica señala que el desarrollo es movido por
fuerzas inconscientes que motivan la conducta humana. La perspectiva del aprendizaje considera
que el desarrollo es el resultado de un proceso continuo de cambio de conducta basado en la
experiencia o en la adaptación al ambiente. La perspectiva cognitivista se centra en los procesos
mentales y en la conducta que manifiesta esos procesos. La perspectiva contextual considera que
el individuo es una entidad inseparable del ambiente. Finalmente, la perspectiva evolutiva o
sociobiológica se enfoca en las bases evolutivas y biológicas del comportamiento.
Influencias en el desarrollo
El desarrollo sigue una serie de etapas presentes en todos los seres humanos. Sin embargo su
curso se ve fuertemente afectado por las diferencias individuales de los individuos. Estas
diferencias se pueden clasificar en dos categorías: la herencia y el ambiente. La herencia es el
conjunto de características y rasgos innatos heredados de los progenitores. Estos rasgos definen
aspectos como el sexo y el calendario de maduración del individuo y tienen un nivel de influencia
variable en el desarrollo de todos los otros factores. El ambiente corresponde al contexto en el
que se encuentran los individuos. Este incluye elementos como la familia, el vecindario, la
posición socioeconómica, la raza, la cultura, la etnia y el contexto histórico entre otros.
Las influencias en el desarrollo pueden ser normativas o no normativas. Las influencias
normativas son las influencias biológicas y los sucesos del entorno que afectan a una gran
cantidad de individuos de una sociedad. En particular las influencias normativas de la historia son
hechos significativos que afectan un grupo de personas nacido aproximadamente en la misma
época. Las influencias no normativas son eventos inusuales que tienen un impacto significativo
en la vida de un individuo porque afectan el desarrollo esperado del ciclo vital. Pueden ser
eventos típicos que ocurren en momentos inusuales (como la muerte de un padre durante la niñez)
o eventos atípicos.
4. Etapas del desarrollo
El desarrollo es un proceso continuo a lo largo de toda la vida pero es posible dividirlo en etapas
a partir de los principales cambios que se producen en el individuo. Las etapas más comunes en
las que se divide son:
● Periodo prenatal: Comprende desde la concepción hasta el nacimiento. La influencia
de los factores genéticos y ambientales durante este periodo pueden ser determinantes
para el posterior desarrollo psicológico.
● Primera infancia: Comprende los primeros 18 a 24 meses de edad. El niño adquiere
destrezas motoras y sensoriales e inicia la adquisición de capacidades psicológicas
como el lenguaje. Se corresponde con la etapa sensorio-motora de la teoría del
desarrollo cognitivo de Jean Piaget.
● Niñez temprana: Comprende desde el final de la primera infancia hasta los 6 o 7 años.
El niño aprende a ser más autosuficiente, a cuidar de sí mismo y a utilizar
representaciones mentales pero con cierta incapacidad para utilizar la lógica. Se
corresponde con la etapa preoperacional de Piaget.
● Niñez intermedia y tardía: Comprende de los 7 a los 12 años y se corresponde con la
etapa de operaciones concretas de Piaget y aproximadamente con la escuela primaria.
El niño desarrolla un pensamiento más flexible, lógico y organizado y aprende
destrezas básicas de su entorno cultural.
● Adolescencia: Comprende de los 12 a los 18 años. Marca el inicio de la etapa de
operaciones formales de Piaget y coincide con el proceso de maduración sexual del
individuo. El pensamiento es más lógico, abstracto e idealista y la búsqueda de
independencia e identidad son fundamentales.
● Juventud: Corresponde a la edad adulta y su inicio se define usando criterios
psicosociales (la mayoría de edad) en vez de biológicos. Llega hasta
aproximadamente los 30 años y es un periodo donde se establece la independencia
económica, se logra el desarrollo profesional y se elige pareja.
● Madurez: La madurez va aproximadamente de los 30 o 40 años hasta los 60. Es un
periodo de expansión personal, participación y responsabilidad social. Los individuos
buscan ayudar en la formación de las siguientes generaciones y alcanzar y mantener
el éxito profesional.
5. ● Vejez: Comienza a los 60 o 70 años y dura hasta la muerte. Durante este periodo la
persona reflexiona sobre la vida, se adapta a la reducción de las capacidades físicas, a
los nuevos roles sociales y a la jubilación.
Los ámbitos que abarca esta rama de la psicología en cuanto al desarrollo humano son, en
general, los físicos y neurológicos.
La psicología de desarrollo abarca el estudio en los seres humanos desde el momento en el que
fueron concebidos hasta su deceso.
Se observa el crecimiento y evolución de las personas en, por ejemplo, su etapa de concepción y
primera infancia remarcando que se produzca en un ambiente saludable en todos los aspectos. Se
toma en cuenta desde la condición social, la relación de sus progenitores, porque se considera que
todos estos aspectos serán fundamentales para el correcto desarrollo del niño en cuestión incluso
desde antes de nacer.
Hace no muchos años, esta rama de la psicología solamente estudiaba el desarrollo del ser
humano hasta su etapa adolescente porque se consideraba que, luego de esta etapa, ya no se
producirían cambios fundamentales en el individuo. Ahora se ha convertido en indispensable
estudiar todas las etapas del desarrollo porque podría haber cambios significativos en la adultez e
incluso en la vejez.
Entonces esta psicología se encarga de delimitar las características generales y particulares de
cada fase (niñez, adolescencia, adultez, vejez) y contrastarlas con determinado periodo del
individuo para ver si su desarrollo está acorde con cada una de las etapas, con relación a lo que se
ha aprendido, así como los conocimientos y habilidades adquiridas con el tiempo. Aunque claro
que existen características individuales, en este caso la psicología del desarrollo, además de
describir las peculiaridades en cada caso particular y la forma en que éstas inciden en la
evolución de la gente.
Para este fin, la psicología del desarrollo tiene diferentes ramificaciones dentro de sí misma que
ayudan a analizar la evolución humana desde sus distintos aspectos. De entre éstas podemos
destacar las teorías organicistas, las cuales determinan el paso de los individuos de una etapa
hacia otra; las mecanicistas, y, por último, las socioculturales, referentes al entorno en el que ha
vivido la persona.