1. Ciencia Árabe
Aportaciones de la ciencia y tecnología
del mundo Árabe en la Edad Media:
Avicena, Averroes, Maimónides..
2. Avicena
• (Abu'Ali al-Husayn ibn'abd Allah ibn
Sina; Bujara, actual Irán, 980 -
Hamadan, id., 1037) Médico y filósofo
persa. Sus trabajos abarcaron todos los
campos del saber científico y artístico
de su tiempo, e influyeron en el
pensamiento escolástico de la Europa
medieval, especialmente en los
franciscanos. A los diez años ya había
memorizado el Corán y numerosos
poemas árabes. Estudió medicina
durante su adolescencia, hasta recibir,
con sólo dieciocho años, la protección
del príncipe Nuh ibn Mansur, lo cual
le permitó entrar en contacto con la
biblioteca de la corte samánida.
Durante su vida viajó mucho y después
de la muerte de su padre escribió sus
dos obras más importantes.
3. Obras
El Kitab ash-shifa' es una
extensa obra que versa sobre
lógica, ciencias naturales
(incluso psicología), el
quadrivium (geometría,
astronomía, aritmética y
música) y sobre metafísica, en
la que se reflejan profundas
influencias aristotélicas y
neoplatónicas.
El Al-Qanun fi at-tibb (canon
de medicina), el libro de
medicina más conocido de su
tiempo, es una compilación
sistematizada de los
conocimientos sobre fisiología
adquiridos por médicos de
Grecia y Roma, a los que se
añadieron los aportados por
antiguos eruditos árabes y, en
menor medida, por sus propias
innovaciones.
4. Averroes
• (Abu-l Walid Muhammad ibn Rusd,
Averroes en su forma latinizada; Córdoba,
1126 - Marrakech, 1198) Filósofo
hispanoárabe. De familia muy distinguida, su
padre había sido cadí de Córdoba durante
cierto tiempo; su abuelo, que llevaba el
mismo nombre que él, Abu l-Walid
Muhammad, había desempeñado este cargo
durante largo tiempo y había sido luego una
autoridad en derecho malikita, consejero de
varios soberanos y príncipes. Averroes
continuó la tradición jurídica de la familia y
alcanzó, siendo muy joven, fama de gran
jurisconsulto, apoyada en el libro Punto de
partida del jurista supremo y de llegada del
jurista medio. Estudió al mismo tiempo
teología y materias literarias. Hasta este
momento no había salido de los programas
ordinarios escolares de su tiempo; pero no
paró aquí y se dio a conocer al mismo
tiempo como médico de gran valor.
5. También estudió astronomía en el Almagesto, del que hizo un compendio, y filosofía, en la
que le iniciaron, sobre todo, las obras de Ibn Bayya, el filósofo hispanoárabe muerto en 1139,
conocido en Europa con el nombre de Avempace. Conoció, pues, todo lo conocido en su
tiempo y en su ambiente, y a lo largo de su vida no dejó de profundizar, no sólo con nuevas
lecturas, sino también con reflexiones y observaciones directas; tanto, que uno de sus
biógrafos dice de él que desde la edad de la razón hasta su muerte no cesó de estudiar, salvo
el día de su boda y el de la muerte de su padre.
En sus tiempos era muy arriesgado hacer filosofía, pero todos los soberanos lo admiraban y
honrado. Pero bajo el reinado de Yaqub al-Mansur (que cedió a las presiones de los
teólogos, que veían en las ciencias profanas, y sobre todo en la filosofía, un peligro para la
religión) las cosas cambiaron y el califo confinó en Lucena, arrabal situado a poca distancia
de Córdoba, a su protegido, que había sufrido el disgusto de ver cómo se quemaban sus
obras en la plaza pública y de verse expulsado, de la mezquita por la plebe fanatizada. Tres
años después, en 1198, el califa revocó sus edictos y volvió a llamar junto a sí a Averroes,
que murió pocos meses después en Marrakesh.
6. El filósofo por excelencia.
• Averroes fue conocido en
Occidente como "el Comentador"
por haber traducido y divulgado las
obras de Aristóteles. De entre sus
numerosas obras, destacan
precisamente los Comentarios a
Aristóteles, y También comentó La
república de Platón. El eje de la
filosofía de Averroes es la
diferenciación entre el
conocimiento humano y el divino.
El conocimiento humano, basado
en las cosas sensibles, es de los
sentidos y de la imaginación; no es
un conocimiento objetivo.
• Entre las grandes inquietudes de
Averroes destacó la de delimitar las
relaciones entre filosofía y religión.
Para Averroes, la religión verdadera
se encuentra en la revelación
contenida en los libros sagrados
hebreos, cristianos y musulmanes.
Pero libros como el Corán, aun
siendo base de la religión
verdadera, están dirigidos a todos
los hombres, y no todos tienen la
misma capacidad de comprensión.
La verdad auténtica sólo la alcanzan
los filósofos, que basan sus
conocimientos en demostraciones
rigurosas y absolutamente lógicas.
7. Maimónides
• (Moshéh ben Maimón) Filósofo y
teólogo judío español (Córdoba,
1135 - El Cairo, 1204). Hijo de un
juez, se educó en colegios
musulmanes y judíos de Córdoba.
Tras la invasión almohade, que
instaló la intolerancia en al-Ándalus,
sufrió persecución por motivos
religiosos y se vio obligado a huir a
Fez (1158), antes de emigrar a
Oriente: Palestina, Alejandría y,
finalmente, El Cairo (1165). Allí
llegó a ser médico del último rey
fatimí, al-'Adid y guía espiritual de
la comunidad judía de Egipto.
8. • Su principal labor consistió
en asentar la teología
judaica sobre los principios
de la razón según la
filosofía aristotélica, papel
comparable al que
cumplieron Averroes en el
Islam y santo Tomás en el
cristianismo. La Guía de
los perplejos (1190) es su
obra más relevante en ese
terreno. También realizó
aportaciones notables a la
medicina y a la
jurisprudencia. Sufrió
continuas persecuciones,
tanto por parte de los
musulmanes como de los
judíos tradicionalistas que
recelaban de su tendencia
racionalista.
Su Obra
9. Otros científicos de Al-Andalus
En el siglo X, Al-Andalus es probablemente la civilización más avanzada de Occidente.
Los descubrimientos e inventos de sus científicos –que habían bebido de fuentes
clásicas y también orientales- suponen uno de los legados más importantes que la
cultura andalusí aportó a la Historia. Sin embargo, no es sencillo, ni frecuente,
encontrar en los libros de divulgación general demasiadas referencias a los avances que
éstos lograron.
Los musulmanes de estas tierras, grandes viajeros, perfeccionaron aquellas
herramientas que facilitaban la navegación. Para ello, revisaron en el siglo X las tablas
astronómicas de Ptolomeo y guardaron el secreto de la brújula. Dicen algunos
estudiosos que la civilización china fue quien la inventó. Sea o no así, lo cierto es que
los árabes la fabricaban y la usaban en sus viajes pues les proporcionaba enormes
ventajas estratégicas con respecto a otros navegantes. Manejaron también los
musulmanes las ampolletas náuticas, instrumentos habituales para medir el tiempo a
bordo de un navío que también se emplean para realizar estimaciones de la distancia
recorrida por el barco.
10. Ibn Al Baytar
(Botánico)
Perfeccionaron y avanzaron los
científicos de Al-Andalus en la
astronomía, las matemáticas y la
medicina. Entre ellos, destacan
algunos como Ibn Al Baytar,
médico y botánico apodado por
Menéndez Pelayo como el
“Discórides español”, que nació en
la actual Málaga pero dedicó gran
parte de su vida a recorrer el norte
de África, Arabia, Siria y
Mesopotamia donde catalogó más
de 200 nuevas especies botánicas. Al
Baytar escribió la que se considera
una de las mejores recopilaciones de
plantas de la Edad Media, “Gran
colección de medicamentos y
alimentos simples”, en la que habla
de la relación entre alimentación y
salud.
11. Sharif al Idrisi
(Geógrafo)
Nació también en Al-Andalus, en Ceuta
(Sabtah), Sharif al-Idrisi, geógrafo inminente
que viajó por el norte africano y por el
Mediterráneo hasta Asia, recopilando datos
que conformaron la que se considera una de
las más completas y más rigurosas
descripciones geográficas medievales. La fama
de su trabajo le llevó hasta la corte del rey
siciliano Ruggero II. Se dice que fue
rechazado por los demás estudiosos
musulmanes por haber elegido establecerse en
la corte de un rey cristriano. Hombre de gran
cultura, visita Asia Menor con solo 16 años.
Hizo muchos mapas, entre los cuales uno de
plata del mundo conocido hasta entonces y un
mapa del mundo dividido en 70 zonas según el
tipo de clima.
12. Abulcasis (médico
y cirujano)
Abulcasis, nacido en Córdoba, médico
y excelente cirujano, escribió una
enciclopedia médica y quirúrgica
dividida en dos partes cuyo mérito
fundamental es -además de recoger
estudios anteriores- presentar una
sección de cirugía que contiene
numerosas ilustraciones de
instrumental y dedica multitud de
detalles a técnicas de cauterización, de
cirugía oftálmica, dental o de
amputaciones, además de métodos de
tratamiento de fracturas óseas. El
cordobés fue también un gran viajero,
una actitud que le llevó a conocer
técnicas quirúrgicas de La India o las
griegas, que integró en su experiencia
personal para lograr otras nuevas en
las que usaba desde alucinógenos hasta
particulares puntos de sutura.
13. Otros
importantes
Al Gafiqi, el andalusí que
escribió la Guía Oculística en
la Belalcázar del siglo XII, o el
madrileño Maslamah al
Mayriti, apodado el Euclides
español, que destacó en las
matemáticas, la astronomía y
otras ciencias afines que
también dedicó su tiempo a
resumir libros sobre magia,
alquimia y brujería.