2. Es un mamífero carnívoro de la familia de
los cánidos, que constituye una sub
especie del lobo (Canis lupus).
3. HISTORIA
Las pruebas arqueológicas demuestran que el perro ha estado en
convivencia cercana con los humanos desde hace al menos 9000 años,
pero posiblemente desde hace 14 000 años. Las pruebas fósiles
demuestran que los antepasados de los perros modernos ya estaban
asociados con los humanos hace 100 000 años. Las investigaciones más
recientes indican que el perro fue domesticado por primera vez en el este
de , posiblemente en China; sin embargo, se ignora si todos los perros
domésticos provienen de un mismo grupo o si el proceso de domesticación
se repitió varias veces. Un estudio publicado por la revista NATURE revela
que, gracias al proceso de domesticación, el organismo del perro se ha
adaptado a cierta clase de alimentos, en este caso el almidón.
4. RAZAS
Se dice que una raza es un conjunto de animales
estrechamente relacionados entre sí, y con características
comunes, que engloban rasgos físicos y también en su
manera de comportarse
.
5. En comparación con lobos de tamaño equivalente, los
perros tienden a tener el cráneo un 20% más pequeño y
el cerebro un 10% más pequeño, además de tener
los dientes relativamente más pequeños que otras
especies de cánidos. Los perros requieren
menos calorías para vivir que los lobos. Su dieta de
sobras de los humanos hizo que sus cerebros grandes y
los músculos mandibulares utilizados en la caza dejaran
de ser necesarios
6. • . Algunos expertos piensan que las orejas flácidas de los perros son el resultado de
la atrofia de los músculos mandibulares. La piel de los perros domésticos tiende a
ser más gruesa que la de los lobos y algunas tribus esquimales prefieren su piel
para vestirse, debido a su resistencia al desgaste en un clima inhóspito.1 A
diferencia de los lobos, pero al igual que los coyotes, los perros domésticos
tienen glándulas sudoríparas en las almohadillas de las patas. Las patas de un
perro son aproximadamente la mitad de las de un lobo y su cola tiende a curvarse
hacia arriba, otro rasgo que no se observa en los lobos.