Este documento presenta información sobre el autor Alejandro Palomas y su última novela "Una madre". Palomas es un escritor español que ha publicado varias novelas y poemarios. "Una madre" describe la historia de una familia que se reúne para la cena de Nochevieja y se centra en particular en la figura de la madre, Amalia, quien ha tenido que enfrentar muchas dificultades. El documento incluye extractos de la novela y entrevistas con el autor sobre temas como las relaciones familiares, los secretos, el

1. Una madre
Alejandro Palomas

2. Alejandro Palomas (Barcelona, 1967- )
Alejandro Palomas (Barcelona, 1967- ) es licenciado en Filología Inglesa y
Master in Poetics por el New College de San Francisco.
Ha compaginado sus incursiones en el mundo del periodismo con la traducción de
importantes autores como Katherine Mansfield, Willa Cather, Oscar Wilde, Jack
London, Gertrude Stein o Françoise Sagan.
Entre otras, ha publicado las novelas El tiempo del corazón, Tanta vida, El secreto
de los Hoffman (finalista del Premio de Novela Ciudad de Torrevieja 2008 y
adaptada al teatro), El alma del mundo (finalista del Premio Primavera 2011), El
tiempo que nos une y Agua cerrada, además de los poemarios Tanto Tiempo y Entre
el ruido y la vida. Su obra ha sido llevada al teatro y traducida a ocho lenguas.
Una madre, su último trabajo, no es solo el retrato de una mujer valiente y
entrañable, y de los miembros de su familia que dependen de ella y de su peculiar
energía para afrontar sus vidas, sino también un atisbo de lo que la condición
humana es capaz de demostrarse y mostrar cuando ahonda en su mejor versión.
El autor en la web:
 Twitter: @palomas_alejand
 Facebook : facebook.com/Avenidadeladesazon11
 Web editorial : http://www.siruela.com/catalogo.php?id_libro=2443

3. Una madre
«Mamá está nerviosa e ilusionada. Lleva así unas semanas, desde que tiene
la certeza de que esta noche estaremos todos. Por fin, después de tantos
intentos frustrados, los que somos su sangre nos sentaremos a la mesa a
celebrar el fin de año y brindaremos juntos. Es un gran día para ella y no lo
disimula, porque no sabe hacerlo. Desde que se divorció de papá, siempre
ha pasado algo, algo ha terminado torciéndose y la cena de Nochevieja ha
estado coja. »
Una madre es una delicia de novela espléndidamente estructurada,
ambientada y escrita. Derrocha calidad y retrata de manera formidable los
lazos que unen a los miembros de una familia, de cualquier familia.
Una cena de Nochevieja como escenario y Fernando como único narrador son los
ejes de esta novela. Mientras sus hermanas y su tío Eduardo van llegando a casa
de su madre para la última cena del año, Fernando hace una retrospectiva de lo
que es su familia, de qué les preocupa o les ha sucedido recientemente a cada uno,
reticente a hacer esa misma reflexión sobre sí mismo. Como en todas las familias,
el pilar de la de esta historia es Amalia, la madre de Fernando. Una mujer
extremadamente peculiar, que pretende ser ingenua cuando no lo es, que se
aprovecha de su escasa visión para parecer torpe y tirar sin querer cosas para
cambiar el rumbo de una conversación y que, por encima de todo, es muy madre de
sus hijos, a pesar de haber sufrido un matrimonio infeliz en el que siempre se
sintió psicológicamente maltratada.
Y es esta madre el denominador común de cada uno de los personajes de esta
historia. Todos ellos, como en la vida real, esconden un pasado que les ha marcado,
ya sean buenos o malos, y que sólo los más cercanos a ti conocen, respetan y
entienden. Y precisamente reflexionando sobre las vidas de sus seres más
queridos, Fernando encuentra respuestas a los dilemas de la suya propia, aunque
haya algunas preguntas cuyas respuestas quisiera obviar.
Resumen de la reseña de Inés Seisdedos Martín en su blog, En busca de Mr. Darcy
https://enbuscademrdarcy.wordpress.com/2014/12/02/una-madre-de-alejandro-palomas/

4. Entrevista de Manel Haro a Alejandro Palomas
Por Manel Haro
En : Llegirencasdincendi, portal de literatura
http://www.llegirencasdincendi.es/2014/10/entrevista-con-alejandro-palomas-autor-de-una-madre/
“Olvidamos constantemente que la vida se acaba
para justificar lo que no hacemos”
En tu última novela, una madre recibe en casa, en Nochevieja, a sus tres hijos y a su
hermano. La vida de cada uno de ellos necesita ser reconstruida o ha necesitado serlo en
algún momento. Cualquiera de estos personajes podría ser el protagonista de la novela, pero
¿qué te hizo poner el foco en la figura de la madre desde el principio?
Fue algo espontáneo. En ningún momento lo pensé antes de ponerme a escribir. De
hecho, ni siquiera sabía que Amalia tendría más protagonismo que los demás. Todo
fue surgiendo poco a poco: Amalia pedía sitio y yo fui dándole cuerda, atento a lo
que intuía que quería decir. Cuando quise reaccionar ya era demasiado tarde y
Amalia lo ocupaba todo, así que opté por relajarme y disfrutar del viaje.
La soledad ha marcado la vida de cada uno de estos personajes y, de algún modo, todos han
necesitado ayuda para seguir adelante. ¿Crees que en todas las cenas de Nochevieja, todos
los que nos reunimos hemos pasado por una situación similar?
Creo que todos hemos pasado por situaciones de soledad, reales o no, autoimpuestas
o no, justificadas o no. La ayuda es necesaria siempre, venga de donde venga. Es
necesario que sepamos que está si la necesitamos, aunque no la utilicemos. Es
necesario poder saber que existe buena compañía aunque sólo seamos capaces de
sentir la soledad que lo ocupa todo.

5. Cómo dice la madre, Amalia, ¿todos nos hemos escondido de la vida alguna vez?
No puedo generalizar, pero es una actitud muy común y muy humana. A veces la vida
duele y cuando eso ocurre tendemos a volvernos pequeños, a no querer más o a pedir
una tregua. Son esos momentos o temporadas en los que más cerca estamos de
nuestra propia voz. Por eso se dice que es muy difícil escribir estando feliz. En
realidad lo que eso apunta es que para escribir tenemos que estar muy cerca de lo
que realmente somos, de lo que somos sin filtros.
En el fondo, ¿todas las familias se parecen?
En el fondo todos nos parecemos. Somos arquetipos, combinaciones de fórmulas,
variaciones sobre la misma melodía. La familia es la suma de esas melodías. Aunque
no todos se parecen, sí están vertebradas sobre lo mismo: las relaciones no
elegidas. Una familia es un campo de pruebas en el que sus miembros intentan
construir desde lo impuesto, desde la obligación, y eso es lo que las hace tan
interesantes, sobre todo en la creación literaria.
¿Crees que nunca acabamos de conocer del todo a nuestros hermanos, madre, padre…
porque siempre ocultamos nuestras flaquezas o necesidades?
Creo que todo es una cuestión de interés y de ganas. De curiosidad. Ni más ni menos
que lo que ocurre con el resto de nuestras relaciones. Creo que la familia es nuestro
espejo más cercano y los espejos muestran a veces cosas que no queremos ver en
primer plano. No es ni más ni menos que eso.
¿Por qué, si parece claro que nuestra familia es quien más puede ayudarnos ante las
adversidades, como demuestra la novela, tendemos a dejarla al final de la lista a la hora de
Porque en la mayoría de los casos tememos su juicio. Porque sabemos que si quieren,
nos ven. Porque es nuestra tabla de salvación imaginaria, la que dejamos ahí, al
fondo del baúl, por sí lo demás falla. Y nos da tanto miedo que también esa tabla
falle que preferimos no utilizarla para no sentirnos huérfanos.
En una entrevista, Carmen Amoraga nos explicó que escribir El tiempo mientras tanto le
había servido para ver a sus padres como personas y no solo como a padres. ¿Te ha ocurrido
un poco lo mismo?
No, en mi caso ha sido al contrario. He podido escribir Una madre porque veo a mis
padres como personas, porque empatizo (o no) con ellos como personas, no como
padre y madre. Si no hubiera sido así, no podría haber escrito la novela porque los
personajes habrían sido demasiado planos. El descubrimiento, en mi caso, es
siempre anterior, no posterior.

6. ¿Cuándo es necesario dejar de esperar que alguien cambie?
Cuando muere.
¿Y por qué nos sentimos un poco derrotados cuando los demás no cambian como nos gustaría?
Porque quizá quienes no cambiamos como nos gustaría somos nosotros mismos.
Muchas veces los demás actúan simplemente como espejos de nuestras propias
expectativas y verlas así, expuestas, frustradas, duele. No es derrota, es toma de
conciencia.
Amalia le insiste a su hijo que no le tenga miedo a la vida, que hay que hacer cosas, salir
adelante. ¿Duele más arrepentirse de lo que no se ha hecho que de lo que se ha hecho mal?
Siempre. Duele más no hacer, no ser, lo que paraliza. Duele más no acordarnos que
la vida se acaba, de que se acaba para todos, y de que lo único inevitable es la
muerte. Duele darnos cuenta de que lo olvidamos constantemente para justificar lo
que no hacemos.
Al principio de la cuarta parte incluyes una cita de Mitch Albom que dice que todo final es
un principio, pero que en su momento no sabemos verlo. ¿Por qué resulta tan difícil
retomar el camino?
Porque a veces el camino está lleno de cruces, atajos, desvíos, bosques, desiertos,
despeñaderos y mil cosas más que parecen estar ahí para confundirnos y evitar el
movimiento. Porque estamos llenos de voces que nos dicen “cuidado, cuidado,
cuidado” a todas horas, porque es más fácil vivir sin que pase nada, vivir sin vivir,
que vivir alargando la mano hacia lo oscuro y obligarnos a descubrir lo desconocido.
Pero eso es humano. Ese es el reflejo del miedo a la muerte que nos acompaña a
todas horas. Por eso cansa vivir. Porque hay que elegir constantemente. Y porque
no elegir es no estar.
De todos los miembros de la familia que tienen que salir adelante, quién más sola ha tenido
que luchar es la madre. ¿Es ella el paradigma de “esas mujeres de familia que, cuando tocó
reaprender a vivir, fueron las primeras en salir adelante” a quienes incluyes en los
agradecimientos?
Ella ha sido la última en salir adelante, la que lo ha hecho cuando ya nadie esperaba
nada, cuando la dábamos por perdida. Por eso esta novela. Por eso este homenaje.
Porque siempre queda tiempo para apostar y porque la edad no importa: importan
las excusas, eso que llamamos “pereza” y que en realidad son muchas otras cosas
que suenan feo.

7. Esta novela es un homenaje y una carta abierta a todas esas madres que se
atreven, sea cual sea el momento, a dar un paso que nadie creía que darían por sí
mismas. Y también un aplauso.
Un personaje que resulta especialmente entrañable es el de la abuela, ya fallecida. ¿Por qué
a veces nos sentimos más compenetrados con nuestra abuela antes que con nuestra madre?
El personaje de la abuela es en realidad el protagonista de Una madre, aunque lo
sea así, en segundo plano, con una presencia ausente. Yo siempre incluyo a una
abuela en mis novelas, quizá porque mi relación con la mía fue muy especial y siento
que le debo mucho, que hubo muchas cosas que me habría gustado decirle,
compartir, regalar…
Siento que llegué tarde a mi abuela y mi forma de no separarme de ella es mediante
lo escrito. Creo que las relaciones con las abuelas son más libres, el cariño es menos
tenso y menos asfixiante, hay una distancia que hace bien, que nos ayuda a mirarnos
bien… y eso une de un modo único.
Fer reconoce que le resulta difícil decirle “gracias” a su madre. ¿Por qué es tan difícil
hacerlo? Porque está claro que esto no es solo cosa de Fer…
A mí me ha costado aprender a dar las gracias en voz alta, no así por escrito o
mediante el gesto, pero la palabra ha tardado en llegar, y cuando por fin he sido
capaz de hacerlo, cuando por fin he podido desatascar ese primer gracias y oírmelo
decir, ha sido tanta la liberación y tantas las ganas de no parar, que es un tema
recurrente en mis novelas: esos silencios que no aportan nada más que atascos, ese
no saber cómo decir, como compartir lo mejor de uno mismo por temor a no ser bien
recibido.
¿Podemos reconocer a Alejandro Palomas en Fer?
Podemos reconocer a Alejandro en Fer y en el resto de personajes. Soy todos y
ellos son una parte de mí. A veces son más Amalia, ese humor, ese filtro de color
que utiliza para mirar lo que la rodea es muy yo, pero en general intento repartirme
y diversificar.
¿Y a Rulfo en Max?
Rulfo es Max. Para mí todos los perros del mundo son los míos. Veo sus ojos en
todas las miradas perrunas con las que me cruzo, su ladrido en los de los demás. Te
lo diré à la Gertrude Stein: “Max es Rulfo es Alejandro”.

8. Alejandro Palomas en las Bibliotecas Municipales de A Coruña
El secreto de los Hoffman
Cuatro miembros de una misma familia se reúnen con motivo de la
muerte de Constanza, la abuela, y vínculos y desarraigos surgen en
torno a ellos a lo largo de un fin de semana, en un relato
introspectivo, poético y coral, que describe un pequeño universo
cerrado con mucha fuerza emotiva. Los sueños y anhelos de una
familia rota por un secreto oculto durante años.
El tiempo que nos une
Mencía tiene noventa años, y aunque está cansada y la edad no
perdona, sigue en guardia, rabiosamente empeñada en velar “por los
suyos” a cualquier precio, hasta que el tiempo y las fuerzas se lo
permitan. Novela coral que narra la historia de cuatro generaciones
de mujeres que ríen, lloran, viven, sufren y, sobre todo, se
necesitan. Una novela de emociones que entrelaza el amor de
madres a hijas, de abuelas a nietas y entre hermanas, y que
desborda humor, cariño, sabiduría y valor.
Agua cerrada
Tras décadas de silencio, Elsa invita a su hijo Isaac a un fin de
semana en Venecia para confesarle una terrible verdad que lleva
años callando. Pero un trágico suceso lo cambiará todo y Serena, la
mujer de Isaac, tendrá que volar de improviso desde Barcelona al
rescate de madre e hijo. Las dos mujeres se enfrentan entonces a
un torbellino de confesiones que cambiarán para siempre la vida de
los tres.
Un hijo
Una novela llena de ternura e intriga para los lectores de Una
madre y El curioso incidente del perro a medianoche. Guille es un
niño introvertido, con una sonrisa permanente. Tiene solo una amiga.
Hasta aquí, todo en orden. Pero esta apariencia de tranquilidad
esconde un mundo fragilísimo con un misterio por resolver. Las
piezas son un padre en crisis, una madre ausente, una profesora
intrigada y una psicóloga que intenta comprender qué esconde el niño.

9. Bibliotecas Municipais de A Coruña
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Biblioteca Municipal Ágora
Rúa Ágora s/n 15010, A Coruña
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Biblioteca Municipal Infantil e Xuvenil
Rúa Durán Loriga 10-Bjº , 15030, A Coruña
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Biblioteca Municipal Castrillón
Praza de Pablo Iglesias s/n 15009 A Coruña
Teléfono 981184390 / fax 98118439
bcastrillon@coruna.es
Biblioteca Municipal Monte Alto
Praza de los Abuelos s/n 15002, A Coruña
Teléfono 981184382
bmontealto@coruna.es
Biblioteca Municipal Forum Metropolitano
Rúa Río Monelos 1, 15006, A Coruña
Teléfono 981184298 / fax :981184295
bforum@coruna.es
Biblioteca Municipal Sagrada Familia
Rúa Antonio Pereira 1-Bj. 15007 A Coruña
Teléfono 981184392 / Fax 981184393
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