1. PARALISIS CEREBRAL (PC)
Con la denominación parálisis cerebral nos referimos a un conjunto de síndromes o
estados patológicos secundarios a una lesión cerebral antigua motivada por factores de
riesgo de variada localización cerebral, sin tendencia evolutiva, que se traducen por
trastornos de la motricidad y su función; pudiendo añadirse además trastornos en
otras esferas como la inteligencia, el lenguaje, la conducta o deficiencias sensoriales,
disfunciones bioeléctricas cerebrales, etc.
Según la International Society of Cerebral Palsy (Edimburgo 1969), la parálisis cerebral
es un desorden permanente y no inmutable (irreversible) de la postura y el
movimiento debido a una lesión cerebral antes que su desarrollo y crecimiento sean
completos.
Cuando un paciente sufre de parálisis cerebral normalmente tiene problemas de
lenguaje, visión, audición, retardo mental y convulsiones, afectando su desarrollo ya
que no es un niño normal. De igual manera la familia es afectada, ya que de alguna
manera le cuesta aceptar y manejar dicha situación, por lo cual se hace necesario que
participe en terapias grupales familiares con el apoyo de profesionales en diferentes
áreas de la Salud y Trabajo Social.
Clasificación de Parálisis Cerebral
Depende del tipo de trastorno motor que se dé en cada persona que la padece, siendo
de la siguiente manera:
1. Lesión de vía piramidal y Espasticidad: exceso de tono muscular.
2. Lesión de vía piramidal e Hipotonía o flacidez: disminución del tono muscular.
3. Lesión extrapiramidal y Atetosis: movimientos incoordinados.
4. Lesión cerebelosa y Ataxia: marcha titubeante.
Con relación a las características de cada trastorno motor se tiene lo siguiente:
Que espasticidad supone un incremento del tono muscular, sobre todo en la realización
de movimientos voluntarios. La espasticidad se subdivide en moderada y grave, las
cuales se caracterizan de la siguiente manera:
- Espasticidad moderada: suele producirse cuando el paciente está en reposo, pero no
necesariamente en decúbito supino (tumbado hacia arriba). Cuando intentan moverse,
se produce un importante aumento del tono, particularmente si este movimiento
responde a una amenaza a su equilibrio. La variabilidad del tono es mucho mayor en
estos pacientes que en los gravemente espásticos.
- Espasticidad Grave: los pacientes experimentan pocos cambios en el estado de su
tono cuando se cambia de postura. Sus músculos se encuentran en un estado de co-
contracción y los miembros y el tronco (agonista y antagonistas) están espásticos o
tensos, si bien algunos suelen estarlo más que otros. Cuando existe una grave co-
contracción, el paciente deberá realizar un gran esfuerzo si intenta moverse. Y este
esfuerzo, por sí mismo, puede causar aumento de tono, dificultando más todavía los
2. movimientos. El paciente no puede elegir sus movimientos, realiza aquellos que sus
músculos espásticos le dictan y acabará presentando contracturas y deformidades, si la
espasticidad no es corregida. Las contracturas son debidas al desequilibrio muscular,
las deformidades pueden llegar incluso a producir subluxaciones o luxaciones
articulares.
- Atetosis: corresponde a la clasificación extrapiramidal, cuando determinadas células
cerebrales, incluidas las de los ganglios basales y del tronco cerebral, se encuentran
implicadas en la lesión, el paciente presentará un trastorno del movimiento. Los
movimientos involuntarios apreciados pueden ser en realidad cambios de tono que
pueden producirse en forma de espasmos tónicos intermitentes, como movimientos
rítmicos repetitivos o como contracciones transitorias e irregulares de grupos
musculares que son los que producen muecas faciales de muchos pacientes. El control
de la cabeza se desarrolla con lentitud. Los pacientes atetósicos no pueden sentarse ni
levantarse, ni desarrollar el control ojo-mano hasta haber logrado cierto control de la
cabeza. Las deformidades y escoliosis son comunes en estos pacientes, así como los
trastornos respiratorios y del habla, les resulta difícil coordinar la respiración y la
articulación (habla) y también sostener un sonido. A veces la coordinación del lenguaje
es mejor a nivel automático que a nivel voluntario y así, el paciente puede ser capaz
de comunicarse.
- Atetosis distónica: Se da cuando se presentan fluctuaciones del tono que va de la
hipotonía a la hipertonía. La coreoatetosis presenta movimientos involuntarios
acentuados que han sido llamados movimientos voluntarios sin objetivo, son
movimientos continuos que ocurren contra la voluntad del paciente.
- Atetosis y espasticidad: En este caso si el predominio de la espasticidad es grave se
producen pocos movimientos y no se manifiesta la atetosis. Lo habitual es un
predominio de la atetosis, con una espasticidad mínima.
- Ataxia: Es cuando se lesionan las células y vías cerebelosas el movimiento resulta
incoordinado. Las neuronas del cerebelo son esenciales en la regulación de la base
postural normal del movimiento y sin la estabilidad postural que se requiere
(particularmente en las áreas proximales del tronco y la cintura) ni la capacidad de
realizar las finas adaptaciones posturales que componen esta regulación, el paciente no
puede llevar a cabo movimientos coordinados, esto, sumado a la inadaptación postural
o fallos de equilibrio dan lugar a lo que llamamos Ataxia. La ataxia pura no se ve con
frecuencia en la Parálisis Cerebral y más comúnmente es debida a hidrocefalia,
traumatismo craneal, infección (encefalitis) o tumor cerebeloso.
De los distintos tipos de parálisis con sus características, repercuten de igual forma en
todos los pacientes con parálisis cerebral, ya que todos necesitan ciertas ayudas
técnicas para lograr su independencia y también todo depende de la familia para
alcanzar su recuperación aunque no se da en un 100%, pero si en alguna medida se
logra su rehabilitación.
De acuerdo a la topografía, la PC se clasifica en diversos tipos:
• Diplegia. Afecta ya sea ambos brazos o ambas piernas.
• Hemiplegia. Afecta los miembros de un solo lado del cuerpo.
• Cuadriplegia. Afecta los cuatro miembros.
3. • Monoplegia. Afecta un solo miembro del cuerpo.
• Triplegia. Afecta tres miembros en forma indistinta.
Cada uno de los tipos principales descritos inicialmente puede afectar diferentes partes
del cuerpo, definiendo Subtipos de Parálisis Cerebral. Por ejemplo: Parálisis Cerebral
Espástica Hemiparésica o bien Hemiparesia Espástica. La Monoplegia y la Triplegia son
los más raramente encontrados.
Desde el punto de vista funcional, también se ha realizado una clasificación arbitraria
con la intención de establecer diferencias pronósticas y de tratamiento:
• CLASE I: Limitación leve.
• CLASE II: Limitación leve-moderada.
• CLASE III: Limitación moderada-grave.
• CLASE IV: Incapacidad total.
CUADRO RESUMEN
DE LA PARÁLISIS CEREBRAL INFANTIL
CRITERIO NIVELES
- TIPO
- ESPASTICIDAD
- ATETOSIS
- ATAXIA
- MIXTO
- TONO
- ISOTÓNICO
- HIPERTÓNICO
- HIPOTÓNICO
- VARIABLE
- TOPOGRAFÍA
- HEMIPARESIA O HEMIPLEJÍA
- DIPARESIA O DIPLEJÍA
- CUADRIPARESIA O CUADRIPLEJÍA
- MONOPARESIA O MONOPLEJÍA
- TRIPARESIA O TRIPEJÍA
- GRADO
- GRAVE
- MODERADO
- LEVE
Signos y síntomas, características y otros trastornos
médicos asociados
Se distingue por el daño dominante de las funciones motrices, el cual afecta al tono, a
la postura y al movimiento.
Los trastornos motores afectan a la mayoría de los casos a los órganos bucofonadores
y dificultan el desarrollo de la alimentación y el habla. (En realidad, la afección es en el
4. tono muscular de los músculos que posibilitan el habla y la alimentación, por eso es
frecuente el babeo y la necesidad de mucha concentración por parte del niño para
evitarlo).
Otros trastornos asociados pueden ser:
1. Retraso mental
2. Epilepsia (convulsiones)
3. Problemas de crecimiento
4. Visión y audición limitadas
5. Sensibilidad y percepción anormales
6. Dificultades para alimentarse, falta de control de los intestinos o vejiga y
problemas para respirar (debido a problemas de postura)
7. Problemas de la piel (llagas de presión)
8. Problemas de aprendizaje
9. Pubertad precoz
No todos estos trastornos tienen que darse en todos los casos, ni de forma simultánea
Etiología
Una de las cuestiones más difíciles de resolver cuando se trata de la PC radica en
delimitar sus causas, resulta difícil establecer una conceptualización concreta debido a
las diferentes manifestaciones que presenta, teniendo en cuenta este aspecto se puede
considerar que se produce en los periodos PRENATAL, PERINATAL O POSTNATAL,
teniendo el límite de manifestación transcurridos los 5 primeros años de vida. Es muy
importante el origen temporal de la PC, ya que desde el momento de su aparición va a
acompañar a la persona durante toda su vida.
Las causas de la PC pueden ser múltiples, dando como resultado lesiones al cerebro.
Los factores de riesgo para la parálisis cerebral incluyen:
• Nacimiento prematuro
• Bajo peso al nacer (BPN)
• Incapacidad de la placenta de proporcionar oxígeno y nutrientes al feto en
desarrollo
5. • Factores de crecimiento
• Incompatibilidad sanguínea rh o a-b-o entre la madre y el bebé
• Infección de la madre con rubéola u otra enfermedad viral durante la primera
parte del embarazo
• Bacterias que atacan directa o indirectamente el sistema nervioso del bebé
• La falta prolongada de oxígeno durante el parto
La mayoría de las causas de la PC se relacionan con los procesos de desarrollo y
embarazo y, ya que la dolencia no es hereditaria, con frecuencia se la denomina PC
Congénita, un tipo menos común es la PC adquirida, que usualmente ocurre después
del nacimiento y antes de los dos años de edad (aunque en algunos casos puede darse
en personas adultas). Los golpes en la cabeza son la causa más común de la PC
adquirida, con frecuencia como resultado de accidentes automovilísticos, caídas o
maltrato infantil.
FACTOR CAUSA
- FAMILIAR - PREDISPOSICIÓN GENÉTICA.
- PRENATAL
- HIPOXIA
- RUBÉOLA.
- EXPOSICIÓN A RAYOS X.
- DIABETES.
- PERINATAL
- DESPRENDIMIENTO PLACENTA.
- PREMATURIDAD.
- ANOXIA.
- TRAUMA.
- POSTNATAL
- ENFERMEDADES INFECCIOSAS.
- ACCIDENTES CARDIOVASCULARES.
- MENINGITIS.
- ENCEFALITIS.
Incidencia
La incidencia de esta condición en países desarrollados es de aproximadamente 2 – 2,5
por cada mil nacimientos. Esta incidencia no ha bajado en los últimos 60 años a pesar
de los avances médicos como la monitorización de las constantes vitales de los fetos.
La Parálisis cerebral no tiene cura conocida; la intervención médica aparece como una
ayuda. Estos tratamientos para el desarrollopersonal del paciente se introducen en su
vida diaria hasta su muerte.
Fisiopatología
6. La fisiopatología de la PC es, prácticamente la de los sistemas motores piramidal y
extrapiramidales. Pero, los agentes etiológicos, al actuar sobre estos sistemas,
producen lesiones y síntomas algo diferentes debido a los caracteres particulares que
presenta el sistema nervioso en desarrollo. Por lo cual en la fisiopatología se tomarán
estos tres aspectos.
La lesión del sistema piramidal en cualquier parte de su trayecto produce pérdida o
disminución de los movimientos voluntarios paresia o parálisis. Su función se ejerce
principalmente sobre los movimientos distales de las extremidades (movimientos finos)
y su déficit produce la pérdida de estos movimientos. Lesionada la vía piramidal,
todavía son posibles losmovimientos globales, automáticos, menos precisos que se dan
por la vía extrapiramidal, pero carecen de precisión y detalle.
Existen neuronas que hacen sinapsis en el haz piramidal y se ven afectadas, esto
explica otros signos fundamentales como la pérdida de los reflejos nociceptivos o de
defensa, entre los que se coloca el signo de Babinski que caracteriza la lesión a este
nivel, estos reflejos son normalmente inhibidos por el haz piramidal y se liberan con su
destrucción. La lesión en el haz piramidal también origina modificaciones del tono
muscular, como hiperextensibilidad y espasticidad, lo que resulta en una resistencia
aumentada a la movilización pasiva, aumento de reflejos profundos y clonus (temblor).
El sistema extrapiramidal es menos definido, comprende las formaciones encefálicas
que intervienen en los movimientos, la regularización del tono muscular y la motilidad,
por tanto su lesión produce modificaciones del tono muscular como rigidez (una forma
de hipertonía que toma flexores y extensores, a diferencia de la espasticidad que solo
afecta uno de estos dos grupos), distonía (flacidez) y aparición de movimientos
anormales, aunque no se acompaña de hiperreflexia ni clonus. Otro síntoma de la
lesión a este nivel es la disquinesia, observándose principalmente atetosis o
coreoatetosis y el espasmo de torsión.
El sistema nervioso en desarrollo, desde el punto de vista histológico y
fisioquímico, es más lábil, sus fibras están parcialmente mielinizadas o no tienen
mielina, la glía (células de sostén) son inmaduras, por lo tanto es más “frágil” como
consecuencia, una lesión puede derivar en una gran tendencia a la necrosis (muerte
celular o tisular) y a la licuefacción, escasa tendencia a la reparación y en las primeras
etapas hay gran tendencia a la formación de cavidades. Hay que destacar también la
disposición y comportamiento de los vasos sanguíneos, pues pueden haber lesiones
vasculares con isquemia. Desde el punto de vista funcional, el sistema nervioso es
7. inmaduro, las funciones se adquieren progresivamente mientras se desarrolla hacia la
edad adulta.
Diagnóstico
Se diagnostica principalmente evaluando de qué manera se mueve un bebé o un niño
pequeño. El médico evalúa el tono muscular del niño, además de verificar los reflejos
del bebé y fijarse en éste para comprobar si ha desarrollado una preferencia por su
mano derecha o izquierda. Otro síntoma importante de parálisis cerebral es la
persistencia de ciertos reflejos, llamados reflejos primitivos, que son normales en los
bebés pequeños pero que, por lo general, desaparecen entre los 6 y 12 meses de vida.
El médico también llevará una historia clínica detallada para descartar que los síntomas
obedezcan a otros trastornos.
Asimismo, el médico puede recomendar la realización de pruebas de diagnóstico con
imágenes cerebrales, tales como resonancias magnéticas RM, tomografías computadas
TAC o ultrasonidos US. En algunos casos, estas pruebas pueden ayudar a identificar la
causa de la parálisis cerebral.
Tratamiento
La parálisis cerebral no se puede curar (por ahora). Pero la persona afectada podrá
llevar una vida plena si recibe una atención adecuada que le ayude a mejorar sus
movimientos, que le estimule su desarrollo intelectual, que le permita desarrollar el
mejor nivel de comunicación posible y que estimule su relación social. Cuanto antes se
detecte la enfermedad, mayor respuesta ofrecerá el paciente al tratamiento. Se
aconseja la asistencia a escuelas regulares.
Tradicionalmente se admite que son cinco los pilares del tratamiento de la parálisis
cerebral:
• La neuropsicología
• La fisioterapia, y dentro de la fisioterapia, estaría indicada la aplicación de la
fisioterapia neurológica , concretamente el concepto bobath.
• La terapia ocupacional,
8. • La educación compensatoria
• La logopedia
Como se ha señalado, en este padecimiento intervienen muchos factores tanto en la
etiología (causa) como en la evolución y pronóstico, de tal manera que el tratamiento
siempre tendrá que ser individualizado. En términos generales el tratamiento incluye 3
elementos básicos:
• 1.- Tratamiento conservador: Se trata fundamentalmente de un programa de
fisioterapia por medio de técnicas de facilitación neuromuscular y propioceptiva,
masoterapia, estimulación temprana, etc. y terapia ocupacional, supervisado por
los especialistas en el área y con la activa participación de los padres o la familia
del paciente.
• 2.- Tratamiento farmacológico: Entre los medicamentos que se indican están
los relajantes para disminuir los temblores y la espasticidad, y anticonvulsivantes
para prevenir o reducir las convulsiones. La cirugía puede ser necesaria en algunos
casos para liberar las contracturas en las articulaciones, las cuales son un problema
progresivo asociado con la espasticidad. También puede ser necesaria para colocar
tubos de alimentación y controlar el reflujo gastroesofágico.
Se han utilizado históricamente diversos fármacos con la idea de mejorar el tono
muscular. Sin embargo en los últimos años ha quedado de manifiesto la importancia
de laToxina Botulínica Tipo A como alternativa eficaz en el tratamiento de la
espasticidad, que es la forma más frecuente de expresión de la parálisis cerebral. La
Toxina Botulínica Tipo A (TBA) se encuentra actualmente en presentaciones de 100 y
500U, los mejores resultados se obtienen cuando se inicia el tratamiento en una edad
temprana (2 años en adelante). Esta indicación tiene que estar aprobada por el
sistema de salud de cada país. El uso correcto de este fármaco, logra mejorar
significativamente el tono muscular, lo que limita el riesgo de contracturas, mejora
postura y a largo plazo evita en la mayoría de los casos la cirugía ortopédica. Es
importante señalar que la aplicación de este medicamento es por vía intramuscular,
tiene una duración de aproximadamente 5 a 6 meses el efecto, por lo que hay que
tener un programa de seguimiento puntual por el especialista y lo más importante es
9. que el tratamiento con TBA tiene que estar asociado a un programa de rehabilitación
física, lo cual asegura un tratamiento completo para una mejor calidad de vida.
• 3.- Tratamiento quirúrgico: Está orientado principalmente a evitar, prevenir
o minimizar las deformaciones articulares. Existen diferentes técnicas más o
menos agresivas y con más o menos eficacia. Destaca por muy utilizada las
tenotomías en la que se practican cortes en diferentes tendones, dependiendo del
resultado a obtener. Es una intervención muy traumática y requiere inmovilización
posterior del paciente con un tiempo de recuperación prolongado.
• 4.- Tratamiento con células madre: Los resultados de estudios con células
madre del cordón umbilical llevan a muchos científicos a sugerir que una infusión
de la sangre del cordón umbilical puede aliviar el daño al tejido cerebral, reducir la
rigidez muscular y mejorar los síntomas relacionados con la movilidad en pacientes
con parálisis cerebral.
Prevención
En muchos casos, se desconoce la causa de la parálisis cerebral y, en consecuencia,
no puede hacerse nada para prevenirla, no obstante, se han identificado algunas de las
causas de la PC y, a menudo, se han logrado prevenir los casos resultantes de ellas. La
intolerancia de Rh (incompatibilidad sanguínea) y el síndrome de rubéola congénita
solían ser causas importantes de PC. Actualmente, la intolerancia de [Rh] por lo
general puede prevenirse aplicando a las mujeres Rh- negativo embarazadas la terapia
adecuada.
Puede probarse la inmunidad de las mujeres a la rubéola antes del embarazo y, si no
son inmunes, se las puede vacunar. Los bebés con ictericia grave pueden tratarse con
luces especiales (fototerapia).
Las lesiones en la cabeza del bebé son una causa importante de parálisis cerebral en
los primeros meses de vida y, las cuales, pueden evitarse transportando a los bebés en
sillas especiales que se fijan al asiento trasero del auto.
La vacunación periódica de los bebés ayuda a prevenir muchos casos de meningitis,
otra causa de daño cerebral en los primeros meses.
10. La mujer puede ayudar a reducir el riesgo de parto prematuro si recibe atención
prenatal de forma temprana y periódica y si se abstiene de fumar, beber alcohol y
consumir drogas ilegales.