Este documento resume la historia bíblica de Noé y sus tres hijos Sem, Jafet y Cam. Según el relato, Noé bendijo a Sem y Jafet, decretándoles prosperidad, mientras que declaró a Cam como siervo. El documento luego explica cómo los descendientes de estos tres hijos se han asentado en diferentes regiones del mundo, cumpliendo la bendición de Noé, y cómo la ciencia ha confirmado estos orígenes de los pueblos según la genealogía bíblica. Finalmente, enfatiza la importancia de que los

1. Bendice a tus Hijos
Entonces Dijo Noé: Bendito sea el Señor, Dios de Sem, y sea Canaán su siervo. Que Dios
extienda el territorio de Jafet. Que Jafet comparta la prosperidad de Sem, y sea Canaán su
siervo. (Génesis. 9.26,27).
El anterior relato se refiere a la historia de Noé y sus tres hijos, Sem, Jafet y Cam. Noé bendijo a
sus hijos decretándole prosperidad y que serian amos y no esclavos (solo sobre Sem y Jafet).
Hoy en día, los descendientes de estos dos personajes son prósperos y su lucha siempre ha
sido por conquistar, no por ser conquistados. Lo que Noé decretó sobre sus hijos se cumplió y se
sigue cumplimento en la actualidad. Los semitas y Jaféticos son pueblos de gran prosperidad.
En su escrito NOÉ, probable origen de los pueblos postdiluvianos, Albeano Oscar Alderete
Peralta, expone de manera clara y con bases científicas los orígenes y los descendientes de
estos tres hermanos.
De acuerdo a lo anterior de Jafet proceden los pueblos del norte, de Cam los pueblos
meridionales de África y de Sem, los hebreos, arameos y árabes.1. De Sem descendientes los
Israelitas (judíos), los países árabes, los Iraquíes y los Sirios, entre otros.2
De Jafet descienden la mayoría de países europeos, Rusia, Turquía, China, Japón, Irán,
Paquistán, Afganistán, América Tropical, entre muchos más. Y de Cam proceden Somalia,
África negra, Palestina, Etiopia, Yemen, Libia, Egipto, entre otros.3
Lo anterior refleja que lo que Noé declaró con sus hijos, la ciencia lo confirma que se han
cumplido. Los semitas y Jaféticos son pueblos prósperos, son pueblos que luchan por
conquistar, no por ser conquistados. Sobre los terrenos donde habitan Jafeticos y Semitas hay
riquezas petrolíferas y de otras especies.,
1 A. Alderete Peralta. NOÉ, probable origen de los pueblos postdiluvianos. Argentina: 2003.
2
A. Alderete Peralta. NOÉ, probable origen de los pueblos postdiluvianos. Argentina: 2003.
3
A. Alderete Peralta. NOÉ, probable origen de los pueblos postdiluvianos. Argentina: 2003.

2. Pero la historia de los dos hijos de Noé bendecidos se remonta a un suceso donde como
producto del licor Noé se emborracha y cae dormido, su hijo menor Cam, dice la biblia, vio su
desnudez y salió a contárselo a sus hermanos, Sem y Jafet, estos optaron por taparlo y no
continuar con lo que Cam había hecho. Como producto de esto, sobre los camitos recae una
maldición de esclavitud.
La palaba del señor nunca dejara de cumplirse, los padres tenemos autoridad sobre los hijos y lo
que declaremos sobre ellos, se dará. Cuando un padre es de obediencia al Señor, goza de un
respaldo que lleva a que el Señor escuche sus oraciones.
Pero la historia de Noé y sus hijos no es la única donde padres de la biblia han declarado
bendiciones o maldiciones sobre sus hijos, Jacob conociendo la importancia de la bendición de
los padres, roba la bendición de Esaú (su hermano mayor). Isaac declaró que sobre su hijo
bendecido, el mayor, abundancias, riquezas, que sería padre de naciones de poder, etc.
(Génesis 27).
Así mismo, en Génesis 49 Jacob en su lecho de muerte llama a sus hijos para declarar sobre
ellos, nombra a cada uno de sus hijos y sobre ellos dicta sentencia, dictámenes que hasta el día
de hoy no han dejado de cumplirse, ni dejaran de cumplirse porque muchas declaraciones de
Jacob sobre sus hijos aun podrían faltar por cumplirse.
José conocía de la importancia de la bendición de un padre sobre un hijo, que se molestó
cuando su padre Jacob puso su mano derecha sobre la cabeza de Efraín, su hijo menor y no
sobre Manases su hijo mayor. (Génesis 48.17). Recordemos que Manases y Efraín eran los dos
hijos de José que Jacob bendijo como sus hijos propios. Recordemos que estos dos hermanos
rompen tradiciones judías, tales como conflictos entre hermanos (Caín y Abel, Isaac e Ismael,
Jacob y Esaú) y bendecir al hijo mayor primero (Deut. 21.17). Manases, (olvido y perdón); y
Efraín, (prosperidad y fructificación en tierra de aflicción), debe ser el modelo de convivencia de

3. nuestros hijos y debe ser el modelo de vida de nosotros, perdonar y seremos bendecidos con
prosperidad aun en la aflicción.4
Observado lo anterior, reflexionemos y creamos que tenemos autoridad sobre nuestros hijos,
autoridad para bendecirlos en el nombre de Jesús, autoridad para declarar bendiciones sobre
ellos, autoridad para trazar sus vidas en prosperidad, amor, obediencia y amor a Dios. Se un
padre de ejemplo, de testimonio, un padre que le obedece a Dios, un padre con autoridad y
respaldo del Señor. Si de tu boca salen bendiciones para tus hijos, benditos serán, pero si por el
contrario, los maldices, malditos serán. Bendice a tus hijos, y que vivan de acuerdo a Manases y
Efraín, quien el primero no demostró recelo al no recibir la bendición como hijo mayor..
Cordialmente,
Robert Ivam Quiñones Garavit
Esclavo de Cristo Jesús
Nota: autorizada la reproducción total y parcial de este documento. Autorizada la difusión del mismo, trascripción o demás que
permita difundir la palabra del Señor. Porque siendo Dios el Inspirador, toda obra de hombre que por el sea inspirada, le
pertenece al Señor mi Dios.
4
Iglesia Cristo es Rey. Los dos hijos de José.