El documento habla sobre la brecha participativa digital, que es la división entre aquellos que pueden crear contenido usando tecnología digital y aquellos que no. Esta brecha no solo existe a nivel básico como páginas web o perfiles de Twitter, sino también en esferas más altas como prácticas y discursos profesionales. Comenzar a aprender es comenzar a participar en la periferia de una comunidad y volverse experto reduce la brecha entre uno mismo y los miembros más comprometidos de dicha comunidad.