1. Repasojunio/2014
1) 6 ¿Nos hemos sentido alguna vez empujados a ceder ante la opinión popular? Hoy, la gran
mayoría de las personas no respetan a Jehová ni sus normas, como se refleja, por ejemplo,
en su actitud hacia el entretenimiento. No son pocos los que caen en el error de afirmar que
la inmoralidad, la violencia y el ocultismo que inundan la televisión, el cine y los videojuegos
son del todo inofensivos (2 Tim. 3:1-5). Ahora bien, preguntémonos: “Cuando elijo las
diversiones en las que mi familia o yo participaremos, ¿dejo que la sociedad actual, con su
ley del ‘todo vale’, influya en mis decisiones y en mi conciencia?”. Si así fuera, estaríamos
pasando por alto el consejo de “no [...] seguir tras la muchedumbre”
2) 9 El tabernáculo también tenía un patio, limitado por una valla de telas. En él había una gran
palangana, donde los sacerdotes se lavaban las manos y los pies antes de entrar en el Santo
y antes de ofrecer los sacrificios sobre el altar situado en el patio. (Éxodo 30:18-21.) Este
requisito de limpieza constituye un enérgico recordatorio a los siervos modernos de Dios de
que deben procurar al máximo mantener la pureza física, moral, mental y espiritual si desean
que su adoración sea grata a Dios.
3) 32:1-8, 25-35. ¿Por qué no se castigó a Aarón por haber hecho el becerro de oro? En su
corazón, Aarón no estaba de acuerdo con la adoración idolátrica. Posteriormente se unió a
sus compañeros levitas al ponerse a favor de Dios y en contra de los que se opusieron a
Moisés. Después que se destruyó a los culpables, Moisés recordó a los israelitas que ellos
habían cometido un grave pecado, lo que indica que otros además de Aarón recibieron la
misericordia de Jehová.
4) ¿Qué hay de la actualidad? Las normas morales de los mundanos difieren muchísimo de las .
Considere la advertencia que Jehová dio al Israel de la antigüedad. Se prohibieron las
alianzas matrimoniales con personas que no adoraban a Jehová. ¿Por qué? “Porque él
apartará a tu hijo de seguirme —advirtió Jehová—, y ellos ciertamente servirán a otros
dioses.” (Deuteronomio 7:3, 4.) Ante la oposición de un cónyuge incrédulo, puede que haya
la tendencia a dejarse llevar por el camino que requiere menos esfuerzo. Es fácil pensar: ‘¡No
me va a suceder a mí!’. Pero le ocurrió a un hombre tan sabio como Salomón. ¿No podría
sucederle a usted? (1 Reyes 11:1-6; compárese con 1 Reyes 4:29, 30.)de la Biblia.
Prescindiendo de lo decentes que pudieran parecer algunos mundanos, no tienen una
conciencia cristiana, educada por la Biblia.
5) 13 Pero ¿qué hay si nos sentimos incapaces de aceptar cierta posición de servicio o participar
en el ministerio? En ese caso, debemos pedirle a Jehová que nos conceda su espíritu, el cual
potenciará nuestras habilidades (léase Lucas 11:13). Con su fuerza activa, él capacita a sus
siervos para que cumplan con cualquier labor o asignación, independientemente de su
experiencia y sus circunstancias del pasado. Por ejemplo, muy poco después de la salida de
Egipto, el espíritu santo fortaleció a simples pastores y esclavos, sin ninguna formación
militar, para que lograran derrotar a los ejércitos enemigos (Éxo. 17:8-13). No mucho más
tarde, el mismo espíritu facultó a Bezalel y Oholiab para que ejecutaran los detallados planos
del tabernáculo que Dios había revelado (Éxo. 31:2-6; 35:30-35)
6) 2 Ahora bien, ¿qué significa dedicación en el sentido bíblico? Dedicar traduce un verbo
hebreo que significa “mantener separado; estar separado; retirar”. En el antiguo Israel, el
sumo sacerdote Aarón llevaba en el turbante “la santa señal de dedicación”, una lámina
resplandeciente de oro puro en la que figuraba en hebreo la inscripción “La santidad
pertenece a Jehová”. Esa señal recordaba al sumo sacerdote que debía evitar todo lo que
profanara el santuario, “porque la señal de la dedicación, el aceite de la unción de su Dios,
[estaba] sobre él” (Éxodo 29:6; 39:30; Levítico 21:12).
3 De este relato se desprende que la dedicación es algo importante. Implica presentarse
voluntario para servir a Dios, y exige una conducta limpia. Por tanto, comprendemos por qué
razón citó el apóstol Pedro estas palabras de Jehová: “Tienen que ser santos, porque yo soy
2. santo” (1 Pedro 1:15, 16). Los cristianos dedicados tenemos la enorme responsabilidad de
cumplir con nuestra dedicación y de ser fieles hasta el fin. Pues bien, ¿qué conlleva la
dedicación cristiana? (Levítico 19:2; Mateo 24:13.)
7)Tal vez decidamos ir directamente a los ancianos. No está mal hacerlo, aunque por lo general
el proceder más amoroso es abordar a la persona implicada. Quizá los hechos no sean lo que
parecen. O puede que los ancianos ya estén tratando la situación. Hable calmadamente del asunto
con la persona. Si sigue habiendo razón para creer que se ha cometido un mal grave, anímela a
pedir ayuda a los ancianos y explíquele por qué es sabio hacerlo. No hable a otros del asunto, pues
estaría chismeando.
En caso de que la persona no lo informe a los ancianos en un período razonable, entonces
nosotros debemos hacerlo. Luego, uno o dos ancianos hablarán del asunto con el acusado. Los
ancianos tienen que “escudriñar e investigar e inquirir cabalmente” para asegurarse de que se ha
cometido un mal. Si es así, se ocuparán del caso conforme a las directrices bíblicas. (Deuteronomio
13:12-14.)
8)lo único que se pretendía con los sacrificios de comunión era estar en paz con Jehová era
como si el adorador, su familia ,los sacerdotes y Jehová celebraran un banquete juntos y en paz.En
la actualidad quienes le sacrifican a Dios de buena gana sus energías y recursos disfrutan de una
estrecha amistad con él.
9) 10:1, 2. ¿Qué puede haber implicado el pecado de Nadab y Abihú, los hijos de Aarón?
Poco después de que Nadab y Abihú obraron impropiamente al efectuar sus deberes sacerdotales,
Jehová prohibió a los sacerdotes que usaran vino o licor embriagante mientras servían en el
tabernáculo (Levítico 10:9). Eso da a entender que los dos hijos de Aarón tal vez estaban bajo los
efectos del alcohol durante la ocasión aquí mencionada. Sin embargo, la razón por la que murieron
fue porque ofrecieron “fuego ilegítimo, que [Jehová] no les había prescrito”
10)
12:2, 5. ¿Por qué se volvía “inmunda” la mujer como resultado del parto? Los órganos
reproductivos fueron hechos para transmitir vida humana perfecta. No obstante, en vista de los
efectos heredados del pecado, lo que se transmitió fue vida imperfecta y pecaminosa. Los
períodos temporales de ‘inmundicia’ relacionados con el parto, así como la menstruación y las
emisiones seminales, recordaban esta herencia pecaminosa (Levítico 15:16-24; Salmo 51:5;
Romanos 5:12). Las disposiciones reglamentarias de purificación ayudaban a los israelitas a
comprender la necesidad de un sacrificio redentor para cubrir el pecado de la humanidad y
devolverle la perfección. Por eso, la Ley llegó a ser su “tutor que [los condujo] a Cristo” (Gálatas
3:24).