Este documento presenta una introducción a la segunda carta a Timoteo de Pablo. Resume el contexto y destinatario de la carta, Timoteo, discípulo de Pablo. Explica que la carta tiene características de testamento ya que Pablo sabe que está próximo a morir. Contiene exhortaciones a Timoteo para que continúe propagando fielmente el evangelio y advierte sobre herejías futuras.

1. AÑO PAULINO 29/VI/2008 – 29/VI/2009 GUIÓN: Antonio Rodríguez Carmona MONTAJE: Antonio García Polo MUSICA: J. S. Bach Textos del NT tomados de la “Biblia de Jerusalén”

2. SERIE II “Las Cartas de Pablo” 2ª Timoteo

3. I. CUESTIONES INTRODUCTORIAS

6. Timoteo es el discípulo que encontró Pablo en Listra durante su segundo viaje, hijo de madre judía y padre pagano, por lo que lo circuncidó para evitar problemas inútiles con los judeocristianos (cf Hch 16,1-3) y lo tomó como compañero de viaje junto con Silas (Pablo es enemigo de imponer la circuncisión a los gentiles que se hacen cristianos, porque esto implicaría que la gracia de Cristo es insuficiente y necesita la ayuda de la ley de Moisés. El caso es diferente con los judíos, que pueden hacerlo por devoción, no porque sea necesario para la salvación. Como escribe en 1 Cor 9,12 no quiere crear obstáculos al Evangelio ). 2. El destinatario.

8. Más adelante lo dejó junto con Silas en Tesalónica para que terminaran la evangelización de la ciudad (Hch 17,14-15). Cumplido este encargo, se vuelven a unir con Pablo en Corinto, al que informan de la situación de la ciudad (Hch 18,5; 1 Tes 3,11), lo que dio lugar a que Pablo escribiera 1 Tesalonicenses (año 51) en la que aparecen ambos como corremitentes con Pablo (1 Tes 1,1; 3,6; 2 Tes 1,1).

9. Acompaña de nuevo a Pablo en Éfeso durante su tercer viaje (Hch 19,22; 2 Cor 1,1, donde aparece como corremitente) y lo envía con una misión a Corinto (4,17; 16,10); desde Éfeso aparece como corremitente junto a Pablo de la carta a los Filipenses (Flp 1,1) en la que les anuncia que se lo envía (Flp 2,19); igualmente aparece como corremitente de Colosenses (Col 1,1). Acompaña a Pablo en Corinto en el invierno 58-59 cuando escribe la carta a los Romanos (Rom 16,21). Finalmente le acompaña en el viaje a Jerusalén con la colecta en favor de los pobres de esta Iglesia (Hch 20,4). En 1 Tim se dice que Pablo lo dejó en Éfeso, situación que supone 2 Tim. 4,19 (Prisca y Aquila residen en esta ciudad cf Hch 18,19; Rom 16,3).

10. * La carta contiene varios trozos de carácter autobiográfico, que suponen que Pablo está en Roma en la cárcel y en expectativa de un próximo final. En la carta se despide de Timoteo, su discípulo querido y le lega su testamento, recomendándole encare-cidamente el cumplimiento de la tarea de vigilar por una recta transmisión de la fe. Véanse estos trozos de carácter autobiográfico: 3. Finalidad y ocasión.

11. + 1,15–18 : Ya sabes tú que todos los de Asia me han abandonado, y entre ellos Figelo y Hermógenes. Que el Señor conceda misericordia a la familia de Onesíforo, pues me alivió muchas veces y no se avergonzó de mis cadenas, sino que, en cuanto llegó a Roma, me buscó solícitamente y me encontró. Concédale el Señor encontrar misericordia ante el Señor aquel Día. Además, cuántos buenos servicios me prestó en Éfeso, tú lo sabes mejor. + 3,10-11: Tú, en cambio, me has seguido asiduamente en mis enseñanzas, conducta, planes, fe, paciencia, caridad, constancia, en mis persecuciones y sufrimientos, como los que soporté en Antioquía, en Iconio, en Listra. ¡Qué persecuciones hube de sufrir! Y de todas me libró el Señor.

12. + Especialmente: 4,6-8: Porque yo estoy a punto de ser derramado en libación y el momento de mi partida es inminente. He competido en la noble competición, he llegado a la meta en la carrera, he conservado la fe. Y desde ahora me aguarda la corona de la justicia que aquel Día me entregará el Señor, el justo Juez; y no solamente a mí, sino también a todos los que hayan esperado con amor su Manifestación.

13. + 4,9-21: Apresúrate a venir a mí cuanto antes, porque me ha abandonado Demas por amor a este mundo y se ha marchado a Tesalónica; Crescente, a Galacia; Tito, a Dalmacia. El único que está conmigo es Lucas. Toma a Marcos y tráele contigo, pues me es muy útil para el ministerio. A Tíquico le he mandado a Éfeso. Cuando vengas, tráeme el abrigo que me dejé en Tróada, en casa de Carpo, y los libros, en especial los pergaminos. Alejandro, el herrero, me ha hecho mucho mal. El Señor le retribuirá según sus obras. Tú también guárdate de él, pues se ha opuesto tenazmente a nuestra predicación. En mi primera defensa nadie me asistió, antes bien todos me desampararon. Que no se les tome en cuenta.

14. Pero el Señor me asistió y me dio fuerzas para que, por mi medio, se proclamara plenamente el mensaje y lo oyeran todos los gentiles. Y fui librado de la boca del león. El Señor me librará de toda obra mala y me salvará guardándome para su Reino celestial. A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén. Saluda a Prisca y Aquila y a la familia de Onesíforo. Erasto se quedó en Corinto; a Trófimo le dejé enfermo en Mileto. Date prisa en venir antes del invierno. Te saludan Eubulo, Pudente, Lino, Claudia y todos los hermanos.

15. * Como escrito pseudoepigráfico, supone la misma situación que 1 Tim y Tito y completa las ideas expuestas en ellas. * Carta credencial, igual que 1 Tim y Tito, pero además tiene las características de carta de amistad- testamento , en la que Timoteo aparece como sucesor de Pablo y depositario legítimo de su herencia pastoral, el “depósito”. 4. Género literario . * Igual que en los testamentos judíos de la época intertestamentaria, el escrito ofrece una mirada al pasado (lo que ha hecho Pablo), al presente y futuro (peligros que hay que tener presentes) con la finalidad de que se mantenga íntegra la herencia.

16. II. UN VISTAZO A LA CARTA

18. III. LEYENDO LA CARTA

19. Pablo, apóstol de Cristo Jesús por voluntad de Dios para anunciar la Promesa de vida que está en Cristo Jesús, a Timoteo, hijo querido. Gracia, misericordia y paz de parte de Dios Padre y de Cristo Jesús Señor nuestro (1-2) . I. Introducción: * Saludo: 1,1-2 * Acción de gracias a Dios a quien sirve y ora por Timoteo: 1,3-5 Doy gracias a Dios, a quien, como mis antepasados, rindo culto con una conciencia pura, cuando continuamente, noche y día, me acuerdo de ti en mis oraciones. Tengo vivos deseos de verte, al acordarme de tus lágrimas, para llenarme de alegría. Pues evoco el recuerdo de la fe sincera que tú tienes, fe que arraigó primero en tu abuela Loida y en tu madre Eunice, y sé que también ha arraigado en ti.

20. II. Cuerpo: 1,6-4,8 1. Exhortación personal a dar testimonio del Evangelio, sin miedo al sufrimiento, junto con Pablo: 1,6-2,13 a) Con el carisma recibido: 1,6-11 Por esto te recomiendo que reavives el carisma de Dios que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos dio el Señor a nosotros un espíritu de timidez, sino de fortaleza, de caridad y de templanza. No te avergüences, pues, ni del testimonio que has de dar de nuestro Señor, ni de mí, su prisionero; sino, al contrario, soporta conmigo los sufrimientos por el Evangelio, ayudado por la fuerza de Dios, que nos ha salvado y nos ha llamado con una vocación santa, no por nuestras obras, sino por su propia determinación y por su gracia que nos dio desde toda la eternidad en Cristo Jesús, y que se ha manifestado ahora con la Manifestación de nuestro Salvador Cristo Jesús, quien ha destruido la muerte y ha hecho irradiar vida e inmortalidad por medio del Evangelio para cuyo servicio he sido yo constituido heraldo, apóstol y maestro (6-11).

21. b) Siguiendo el ejemplo de Pablo: 1,12-14 Por este motivo estoy soportando estos sufrimientos; pero no me avergüenzo, porque yo sé bien en quién tengo puesta mi fe, y estoy convencido de que es poderoso para guardar mi depósito hasta aquel Día. Ten por norma las palabras sanas que oíste de mí en la fe y en la caridad de Cristo Jesús. Conserva el buen depósito mediante el Espíritu Santo que habita en nosotros. c) y el buen ejemplo de Onesíforo: 1,15-18 Ya sabes tú que todos los de Asia me han abandonado, y entre ellos Figelo y Hermógenes. Que el Señor conceda misericordia a la familia de Onesíforo, pues me alivió muchas veces y no se avergonzó de mis cadenas, sino que, en cuanto llegó a Roma, me buscó solícitamente y me encontró. Concédale el Señor encontrar misericordia ante el Señor aquel Día. Además, cuántos buenos servicios me prestó en Éfeso, tú lo sabes mejor (15-18) .

22. d) Intimación a afrontar los trabajos de la transmisión fiel del Evangelio (1) transmitir a personas capaces: 2,1-2 Tú, pues, hijo mío, mantente fuerte en la gracia de Cristo Jesús; y cuanto me has oído en presencia de muchos testigos confíalo a hombres fieles, que sean capaces, a su vez, de instruir a otros (1-2) . (2) Dispuesto a afrontar las dificultades: 2, 3-7 Soporta las fatigas conmigo, como un buen soldado de Cristo Jesús. Nadie que se dedica a la milicia se enreda en los negocios de la vida, si quiere complacer al que le ha alistado. Y lo mismo el atleta; no recibe la corona si no ha competido según el reglamento. Y el labrador que trabaja es el primero que tiene derecho a percibir los frutos. Entiende lo que quiero decirte, pues el Señor te dará la inteligencia de todo (3-7) .

23. Acuérdate de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, descendiente de David, según mi Evangelio; por él estoy sufriendo hasta llevar cadenas como un malhechor; pero la Palabra de Dios no está encadenada. Por esto todo lo soporto por los elegidos, para que también ellos alcancen la salvación que está en Cristo Jesús con la gloria eterna. Es cierta esta afirmación: Si hemos muerto con él, también viviremos con él; si nos mantenemos firmes, también reinaremos con él; si le negamos, también él nos negará; si somos infieles, él permanece fiel, pues no puede negarse a sí mismo. (3) Realizar estas tareas es la forma de configurarse ahora a Jesucristo muerto con la esperanza de configurarse también en la resurrección: 2,8-13

24. Esto has de enseñar; y conjura en presencia de Dios que se eviten las discusiones de palabras, que no sirven para nada, si no es para perdición de los que las oyen. Procura cuidadosamente presentarte ante Dios como hombre probado, como obrero que no tiene por qué avergonzarse, como fiel distribuidor de la Palabra de la verdad. Evita las palabrerías profanas, pues los que a ellas se dan crecerán cada vez más en impiedad, y su palabra irá cundiendo como gangrena. Himeneo y Fileto son de éstos: se han desviado de la verdad al afirmar que la resurrección ya ha sucedido; y pervierten la fe de algunos. Sin embargo el sólido fundamento puesto por Dios se mantiene firme, marcado con este sello: “El Señor conoce a los que son suyos”; y: “Apártese de la iniquidad todo el que pronuncia el nombre del Señor “ (14-19). 2 . Testamento de Pablo : a punto de morir, prevé las dificultades del futuro y da instrucciones a Timoteo: 2,14-4,8 a) Con relación a la herejía presente: evitar palabrerías y firmeza ante los herejes, exponiendo la palabra con firmeza, no con apasionamiento juvenil sino con justicia, fe, amor y paz: 2,14-26 = * Distribuir fielmente la Palabra de Dios y evitar palabrerías vanas: 2,14-19

25. Así se actua como utensilio noble en la casa del Señor: 2,20-26 En una casa grande no hay solamente utensilios de oro y de plata, sino también de madera y de barro; y unos son para usos nobles y otros para usos viles. Si, pues, alguno se mantiene limpio de estas faltas, será un utensilio para uso noble, santificado y útil para su Dueño, dispuesto para toda obra buena. Huye de las pasiones juveniles. Vete al alcance de la justicia, de la fe, del amor, de la paz, en unión de los que invocan al Señor con corazón puro. Evita las discusiones necias y estúpidas; tú sabes bien que engendran altercados. Y a un siervo del Señor no le conviene altercar, sino ser amable con todos, pronto a enseñar, sufrido, y que corrija con mansedumbre a los adversarios, por si Dios les otorga la conversión que les haga conocer plenamente la verdad, y volver al buen sentido, librándose de los lazos del Diablo que los tiene cautivos, rendidos a su voluntad (20-26) .

26. Ten presente que en los últimos días sobrevendrán momentos difíciles; los hombres serán egoístas, avaros, fanfarrones, soberbios, difamadores, rebeldes a los padres, ingratos, irreligiosos, desnaturalizados, implacables, calumniadores, disolutos, despiadados, enemigos del bien, traidores, temerarios, infatuados, más amantes de los placeres que de Dios, que tendrán la apariencia de piedad, pero desmentirán su eficacia. Guárdate también de ellos. A éstos pertenecen esos que se introducen en las casas y conquistan a mujerzuelas cargadas de pecados y agitadas por toda clase de pasiones, que siempre están aprendiendo y no son capaces de llegar al pleno conocimiento de la verdad. Del mismo modo que Yannés y Yambrés se enfrentaron a Moisés, así también estos se oponen a la verdad; son hombres de mente corrompida, descalificados en la fe. Pero no progresarán más, porque su insensatez quedará patente a todos, como sucedió con la de aquéllos (1-9) . b) Con relación a la herejía escatológica: 3,1-4,8 1) Anuncio de graves errores con consecuencias de inmoralidad (3,1-9)

27. Tú, en cambio, me has seguido asiduamente en mis enseñanzas, conducta, planes, fe, paciencia, caridad, constancia, en mis persecuciones y sufrimientos, como los que soporté en Antioquía, en Iconio, en Listra. ¡Qué persecuciones hube de sufrir! Y de todas me libró el Señor. Y todos los que quieran vivir piadosamente en Cristo Jesús, sufrirán persecuciones. En cambio los malos y embaucadores irán de mal en peor, serán seductores y a la vez seducidos. Tú, en cambio, persevera en lo que aprendiste y en lo que creíste, teniendo presente de quiénes lo aprendiste, y que desde niño conoces las Sagradas Letras, que pueden darte la sabiduría que lleva a la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para argüir, para corregir y para educar en la justicia; así el hombre de Dios se encuentra perfecto y preparado para toda obra buena (10-17) . 2) Comportamiento cuando suceda: Timoteo debe seguir el ejemplo de Pablo, su modo de vivir, su fe; debe permanecer en su tradición y en el conocimiento de las Sagradas Escrituras: 3,10-17

28. Te conjuro en presencia de Dios y de Cristo Jesús que ha de venir a juzgar a vivos y muertos, por su Manifestación y por su Reino: Proclama la Palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, amenaza, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la doctrina sana, sino que, arrastrados por su propias pasiones, se harán con un montón de maestros por el prurito de oír novedades; apartarán sus oídos de la verdad y se volverán a las fábulas. Tú, en cambio, pórtate en todo con prudencia, soporta los sufrimientos, realiza la función de evangelizador, desempeña a la perfección tu ministerio (1-5) . 3) Predicar a tiempo y a destiempo, reprender, exhortar, increpar... 4,1-5

29. 4) Pablo está a punto de morir: ha hecho lo que tenía que hacer y ahora espera la corona del Señor: 4,6-8 Porque yo estoy a punto de ser derramado en libación y el momento de mi partida es inminente. He competido en la noble competición, he llegado a la meta en la carrera, he conservado la fe. Y desde ahora me aguarda la corona de la justicia que aquel Día me entregará el Señor, el justo Juez; y no solamente a mí, sino también a todos los que hayan esperado con amor su Manifestación (6-8) .

30. Apresúrate a venir a mí cuanto antes, porque me ha abandonado Demas por amor a este mundo y se ha marchado a Tesalónica; Crescente, a Galacia; Tito, a Dalmacia. El único que está conmigo es Lucas. Toma a Marcos y tráele contigo, pues me es muy útil para el ministerio. A Tíquico le he mandado a Éfeso. Cuando vengas, tráeme el abrigo que me dejé en Tróada, en casa de Carpo, y los libros, en especial los pergaminos. Alejandro, el herrero, me ha hecho mucho mal. El Señor le retribuirá según sus obras. Tú también guárdate de él, pues se ha opuesto tenazmente a nuestra predicación. En mi primera defensa nadie me asistió, antes bien todos me desampararon. Que no se les tome en cuenta. Pero el Señor me asistió y me dio fuerzas para que, por mi medio, se proclamara plenamente el mensaje y lo oyeran todos los gentiles. Y fui librado de la boca del león. El Señor me librará de toda obra mala y me salvará guardándome para su Reino celestial. A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén (9-18) . III. Despedida: 4,9-22: * Recomendaciones personales: 4,9-18

32. IV. ALGUNOS TEMAS TEOLÓGICOS

33. Al igual que 1 Tim y Tit, esta carta se sirven de la rica tradición de la iglesia, de recuerdos autobiográficos de Pablo, que dan una viveza especial al texto, y especialmente de la experiencia eclesial que se va acumulando. La carta pretende en primer lugar solucionar problemas prácticos relacionados con la ortopraxis, en concreto con la necesidad de transmitir fielmente la tradición recibida por medio de personas competentes capaces de recibirla, defenderla y transmitirla aplicándola a las nuevas circunstancias . Pero la ortopraxis tiene su fundamento en la ortodoxia , que es fundamental para la vida cristiana, porque se vive lo que se cree. La Iglesia debe agradecer el don de la fe, conservarlo, vivirlo y aplicarlo fielmente a las nuevas circunstancias, todo a la vez. Véase cómo aparece el fondo teológico:

34. 1. Dios * El Padre nos ha salvado y nos ha llamado con una vocación santa, no por nuestras obras, sino por su propia determinación… desde la eternidad (1,9) * El Padre nos salva por Jesús , de la estirpe de David (2 Tim 2,8). Con su existencia en carne, por su resurrección y exaltación, ha destruido la muerte y ha hecho irradiar vida e inmortalidad por medio del Evangelio (1,9s). Vendrá como juez a juzgar a vivos y muertos, por su Manifestación y por su Reino: Y desde ahora me aguarda la corona de la justicia que aquel Día me entregará el Señor, el justo Juez; y no solamente a mí, sino también a todos los que hayan esperado con amor su Manifestación. (4,1.8). * El Espíritu Santo habita en los cristianos y capacita para el ministerio, especialmente para conservar el “depósito”: Conserva el buen depósito mediante el Espíritu Santo que habita en nosotros (1,14); Porque no nos dio el Señor a nosotros un espíritu de timidez, sino de fortaleza, de caridad y de templanza (1,7.14). El Espíritu, pues, no está en oposición con la "institución".

35. 2. El carisma de Timoteo. Varias veces se le recuerda a Timoteo en esta carta y en la anterior (1 Tim) la importancia del carisma que ha recibido para ejercer su ministerio. Debe reavivarlo para recabar fuerzas que le permitan cumplir su obligación en tiempos de dificultad: + Se recibe mediante la imposición de las manos del sucesor de Pablo (Timoteo) y del colegio de los presbíteros: No descuides el carisma que hay en ti, que se te comunicó por intervención profética mediante la imposición de las manos del colegio de presbíteros (1 Tim 4,14). + Timoteo debe elegir cuidadosamente a los candidatos: No te precipites en imponer a nadie las manos, no te hagas partícipe de los pecados ajenos (1 Tim 5,22). + El que lo ha recibido lo tiene permanentemente, pero debe reavivarlo en los momentos difíciles: Por esto te recomiendo que reavives el carisma de Dios, que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos dio el Señor a nosotros un espíritu de timidez, sino de fortaleza, de caridad y de templanza. ( No te avergüences, pues, ni del testimonio ...) (2 Tim 1,6-7)

36. + Según estos textos - por la imposición de las manos (rito judío de reconocimiento de que una persona ha recibido adecuadamente la tradición y la puede enseñar y transmitir, y de petición de la ayuda divina para que el interesado realice fielmente la tarea); - determinadas personas que hay que elegir cuidadosamente , sin precipitarse, pues de lo contrario, si la persona elegida es incompetente, el que lo elija indebidamente se equivoca y se hará corresponsable del mal que haga. En la Iglesia siempre ha preocupado la selección correcta de aspirantes al ministerio. Según 2 Tim 2,2 debe ser una persona capaz de transmitir fielmente lo que ha recibido. La cualidad más importante en el candidato es su capacidad para recibir fielmente toda la Tradición y su capacidad para conservarla, defenderla y transmitirla a otros.

37. - Reciben de Dios gratuitamente una gracia al servicio de la comunidad llamada carisma. - Pablo tiene carácter fontal en la donación de esta gracia de Dios: el carisma de Dios que está en ti por la imposición de mis manos (1,6). Ten por norma las palabras sanas que oíste de mí en la fe y en la caridad de Cristo Jesús (1,13). - Es una gracia permanente: se recuerda que no se descuide; se debe reavivar (literalmente: resoplar los carbones encendidos para que surja de nuevo la llama) - Esta gracia ayuda a realizar el ministerio con fortaleza, caridad y templanza

38. + Tarea: (1) en general deben mantener la "sana doctrina": Proclama la Palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, amenaza, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá un tiempo en que los hombres no soportarán la doctrina sana, sino que, arrastrados por su propias pasiones, se harán con un montón de maestros por el prurito de oír novedades; apartarán sus oídos de la verdad y se volverán a las fábulas. Tú, en cambio, pórtate en todo con prudencia, soporta los sufrimientos, realiza la función de evangelizador, desempeña a la perfección tu ministerio (4,2-5).

39. (2) Recibir, custodiar, administrar y transmitir el “depósito”: Por este motivo estoy soportando estos sufrimientos; pero no me avergüenzo, porque yo sé bien en quién tengo puesta mi fe, y estoy convencido de que es poderoso para guardar mi depósito hasta aquel Día. Ten por norma las palabras sanas que oíste de mí en la fe y en la caridad de Cristo Jesús. Conserva el buen depósito mediante el Espíritu Santo que habita en nosotros. (1,12-14). (3) Educación de las comunidades cf. (2,25;3,16).

40. 3. El “depósito” es la tradición que ha enseñado Pablo a la Iglesia y ha confiado especialmente a sus sucesores. Pablo luchó en su tarea: Por este motivo estoy soportando estos sufrimientos; pero no me avergüenzo, porque yo sé bien en quién tengo puesta mi fe, y estoy convencido de que es poderoso para guardar mi depósito hasta aquel Día (1,12) . Este debe ser también el proceder de Timoteo: Ten por norma las palabras sanas que oíste de mí en la fe y en la caridad de Cristo Jesús. Conserva el buen depósito mediante el Espíritu Santo que habita en nosotros (1,13-14).

41. El depósito es la totalidad del material recibido de Pablo y de su Escuela, que desarrolla y aplica la tradición (1 Tim 1,18; 6,20; 2 Tim 1,14; 2,2). Solo en la preservación fiel e incorrupta de ese depósito de tradición, queda asegurada la identidad de la enseñanza paulina y no se pierde la continuidad con el Apóstol. * El peligro que se denuncia se refiere a mitos o fábulas de los judíos (4,4) y en concreto la afirmación de que la resurrección ya ha tenido lugar (2.18). Posiblemente se trata de brotes de cristología docetista que niega la realidad de la encarnación de Jesús.

42. * Como en las otras cartas pastorales, la ética en 2 Tim tiene un fondo pascual: morir con Cristo para reinar con él cf 2,11-13: Es cierta esta afirmación: Si hemos muerto con él, también viviremos con él; si nos mantenemos firmes, también reinaremos con él; si le negamos, también él nos negará; si somos infieles, él permanece fiel, pues no puede negarse a sí mismo. 4. Ética.

43. * Son importantes las virtudes teologales, fe y amor, constancia-esperanza, propias de toda vida cristiana, y que Timoteo debe practicar en el ejercicio de su ministerio: Ten por norma las palabras sanas que oíste de mí en la fe y en la caridad de Cristo Jesús (1,13) Vete al alcance de la justicia, de la fe, del amor, de la paz, en unión de los que invocan al Señor con corazón puro (2,22) Tú, en cambio, me has seguido asiduamente en mis enseñanzas, conducta, planes, fe, paciencia, caridad, constancia, (3,10) Predica la Palabra, insta a tiempo y a destiempo, reprende, exhorta, increpa con toda paciencia… (4,2) .

44. La Lectio divina comprende básicamente tres momentos: (1) entender el texto, es decir, enterarme de lo que Dios quiere decir en su palabra, (2) meditar , reflexionar sobre el texto aplicándolo a mis circunstancias concretas para ver qué tengo que responder a Dios que me habla, (3) orar respondiendo a Dios a lo que me ha dicho. Todas estas presentaciones sobre las cartas de Pablo solo pretenden ayudar en el primer momento. El segundo y tercero corren a cargo del interesado y son importantes, pues sin ellos no hay oración sino mera erudición. Nota Final

45. FIN Finaliza “Vida y Cartas de Pablo”. Pascua de Resurrección 2009.