El documento define el control público como una herramienta del Estado para monitorear el cumplimiento de sus actividades y el uso eficiente de los recursos de la sociedad. El control público compara los resultados con las leyes y normas establecidas y busca evaluar la eficacia de las políticas públicas para satisfacer las necesidades de la población.

1. República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular de Planificación y Finanzas
Escuela Nacional de Administración y Hacienda Pública
Especialización en Control de la Gestión Pública
Lectura Crítica:
Filosofía del Control Público: Definición de Control Público.
Realizado por:
Rossy L. Fermín B.
Maracay, Abril 2012

2. Resumen
El concepto de control público, aun cuando regularmente se entiende
como control de los recursos del Estado, puede abarcar aspectos más
amplios. Está regulado por leyes y normas impuestas por el mismo Estado y
se lleva a cabo, normalmente por instituciones públicas creadas para tal fin.
No obstante, la ciudadanía cuenta con mecanismos que las mismas leyes le
han otorgado para el control de la Gestión Pública. El control se basa en la
comparación de los hechos con un patrón o marco establecido en la
administración pública a través de leyes, reglamentos y manuales que
establecen la forma en que los servidores públicos deben proceder en el
ejercicio de sus funciones. Sin embargo, el control puede y debe ir más allá
de la detección de posibles desviaciones, debe servir para evaluar si en
realidad las actividades gubernamentales satisfacen eficaz y eficientemente
las necesidades de la sociedad, a quien el Estado debe rendir cuenta de
todos sus actos.
Palabras Claves: Control público, Estado, sociedad, objetivos, leyes,
normas, instituciones, resultados

3. Lectura tomada de:
https://docs.google.com/file/d/0BzsbMiDsvU4bMDliYTUwYWEtNThiNi00MWQx
LTlkODYtZDYwNWIxZGQ5MDJh/edit?hl=en&pli=1

5. Análisis de la Lectura
El control público es una herramienta que parte principalmente del Estado,
quien crea las leyes y normas que lo rigen para controlar al mismo Estado en
cuanto al cumplimiento de sus actividades y la eficiencia, eficacia y
transparencia con que estas se realizan en pro de obtener el mejor manejo
de los recursos de la sociedad en la satisfacción de sus necesidades. El
control público no sólo sirve para monitorear la actividad estatal, sino que
ofrece información valiosa para el diseño de los objetivos, procedimientos y
técnicas que conforman las políticas públicas, así como para evaluar las
necesidades sociales. Este sentido del control va un poco más allá de su
aplicación clásica para la vigilancia de los recursos. Un ejemplo sería el
registro que se lleva del número de nacimientos anuales, que puede servir

6. para planificar la cantidad de vacunas, el número de servicios de pediatría, la
cantidad de escuelas y maestros que se necesitan, entre otros.
Se observa entonces que el control involocra varios factores y diversas
funciones. En primer lugar, el control es una comparación del “es” con el
“deber ser”, es decir, debe existir un patrón o modelo con el cual comparar la
actividad que se está controlando. En la administración pública ese patrón
viene dado principalmente por las leyes que rigen la materia a controlar, así
como los manuales de procedimientos y las políticas formalmente
establecidas al respecto. Sin embargo, es posible y deseable ir un poco más
allá, evaluando no sólo si la actividad cumple o no con el patrón establecido,
sino las causas y consecuencias de la conformidad o no de la actividad
verificada. De esta forma se puede revisar, y ajustar de ser necesario, los
objetivos y procedimientos para que los resultados no sólo cumplan el
patrón, sino que realmente resuelvan los problemas o satisfagan las
necesidades para los cuales fueron creados.
Otro aspecto a tomar en cuenta es la responsabilidad de quienes ejecutan
las acciones, pues de comprobarse irregularidades en dicha ejecución podría
darse lugar a sanciones de orden administrativa o penal. Aunque este
aspecto no está implícitamente ligado al control, si está contemplado en las
leyes y en las funciones de las instituciones que ejercen el control, de
acuerdo a su naturaleza y a las atribuciones que les confieran las mismas
leyes. Por lo general, cada ley contempla las sanciones aplicables al
incumplimiento de las mismas, pero existen leyes explicitas sobre el control
público, como son, en la República Bolivariana de Venezuela, la ley contra la
corrupción y la ley de contraloría social e instituciones como la Contraloría
General de la República y las Oficinas de Control Interno de cada institución.
Estas leyes e instituciones buscan principalmente la salvaguarda del

7. patrimonio de la nación. No obstante, cualquier ciudadano o ciudadana
puede ejercer funciones de control dentro del marco legal venezolano.
Otra visión validad sobre el control es considerarlo “una actividad derivada o
complementaria” de la planificación. Toda organización debe establecer
anticipadamente qué hacer y cómo, quién y cuando debe hacerse, pero este
plan debe contrastarse con la realidad, que tiende a ser cambiante. Es allí
donde se hace imprescindible el control, no sólo para saber si el plan se esta
cumpliendo, sino descubrir si en verdad se están logrando los objetivos o es
necesario hacer ajustes. En la administración pública este enfoque busca no
sólo que las instituciones funcionen de la forma debida, sino también de la
forma deseada, es decir que realmente estén cumpliendo eficiente y
eficazmente con sus objetivos.
Aun cuando todos estos aspectos del control son importantes, el más
relevante seguirá siendo la transparencia de las funciones y las finanzas
públicas. Debe garantizarse que los recursos se usen de la manera más
eficiente y en concordancia con los lineamientos establecidos. En esto juega
un papel importante los tipos de controles que se establezcan y el nivel de
competencia de los funcionarios y las instituciones que lo aplican. Nunca se
debe olvidar la obligación del Estado de rendir cuentas ante la sociedad