El documento discute las perspectivas de la integración en América Latina en el siglo XXI. Explica que la integración ya no es solo un asunto gubernamental o económico, sino que también involucra las dimensiones cultural y social. Destaca los esfuerzos de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y la creación de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) para fomentar la integración regional.
1. República bolivariana de Venezuela
Ministerio del poder popular para la educación aniversario
Instituto universitario de la frontera (iufront)
PERPECTIVAS DE LA INTEGRACIÓN EN EL
SIGLO XXI
Profesor Integrante
Luis Alfredo Gómez Ramírez Bell E Díaz P Ci 20498637
2. San Cristóbal agosto 2015
Perspectivas de la Integración
La integración ha dejado de ser una actividad exclusivamente gubernamental
o exclusivamente económica y menos aún limitada a lo político. Hoy en día se
considera a la integración como un proceso que incorpora las otras dimensiones
más allá de la mera visión economicista y en especial debe incluirse la dimensión
cultural pues el mismo Recondo lo afirma, “la cultura de nuestros pueblos es la
argamasa válida del tejido social de nuestra comunidad iberoamericana”. El autor
prefiere también que el modelo se apoye en la solidaridad, “ya que cada día que
pasa crece el mundo de los excluidos de la globalización social. Hoy se alienta la
integración en bloques regionales para que seamos más competitivos, mientras que
la idea de los Libertadores requería la solidaridad para construir la integración
latinoamericana.”
Por ello el mismo Recondo ofrece la receta para una integración efectiva
afirmando que a su juicio la integración debe ser formulada desde adentro,
convenida desde abajo con la participación de todos pues nunca será integración
verdadera cuando esté dirigida desde arriba y menos aún desde afuera.
Integración latinoamericana para el siglo XXI
La creación de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra
América (ALBA) fomenta proyectos de unidad en América Latina. En este marco
se han concretado acuerdos energéticos, económicos, políticos, culturales y
sociales. Uno de los principales defensores del proyecto fue el entonces
presidente venezolano Hugo Chávez.
Otros líderes que han demostrado esfuerzos en pro de la integración regional e
internacional y el refuerzo de la integración interna de Latinoamericana y el Caribe
son Nestor Kirchner yCristina Fernández (Argentina), Michelle
3. Bachelet (Chile), Evo Morales (Bolivia), Fidel Castro (Cuba), Luiz Inácio Lula da
Silva (Brasil), Daniel Ortega (Nicaragua), Rafael Correa (Ecuador) y José
Mujica (Uruguay). Dichos esfuerzos han desembocado en la creación de la Unión
de Naciones Suramericanas (UNASUR) y de la Comunidad de Estados
Latinoamericanos y Caribeños (CELAC)
Se espera que si Latinoamérica se une por completo así sería la nueva
potencia a nivel mundial pero existen muchos obstáculos y que a cierto países no
les convienen además hay muchas ideologías distintas y aunque se formen
bloques y hagan convenios no habrá una integración única aunque no todo es
malo pues hay muchas cosas que se han logrado y ha sido un gran paso para que
algún día se pueda lograr ese objetivo.
El pensamiento integracionista
Recondo analiza a profundidad las vertientes del pensamiento
latinoamericano anotando un par de observaciones relevantes y características del
pensamiento regional. Por un lado como el mismo lo desarrollo en su libro “Identidad
Integración y creación cultural en América Latina: “El desafío del MERCOSUR” el
pensamiento que surgió en el continente es del tipo militante, emergente de una
praxis y por lo tanto poco preocupado con una filosofía de los grandes sistemas y
más bien los nuestros fueron producto de hombres de acción que plasmaban sus
creencias en escritos filosóficos para poder volcarlos a la práctica con más o menos
inmediatez.
El propio Alberdi estimaba que el producto de su razonamiento tenía la
intención de ser aplicado a la realidad. Quizás el ejemplo más ilustrativo de esta
afirmación de Recondo haya sido la emergencia de la Teología de la Liberación
donde el pensamiento siempre sucede a la acción. Por otro lado, Latinoamérica ha
sido desde sus inicios el producto de una síntesis emergente de las dos antítesis de
conservación o identidad y cambio o modernidad. En este capítulo clave de su libro,
Recondo estima que según Leopoldo Zea, si algo caracteriza la filosofía de América
es, precisamente, su preocupación por captar la llamada esencia de lo americano.
4. De ahí surge la concepción de que modernidad y tradición son antitéticas porque
la modernidad de afuera implica una negación de las tradiciones de adentro y no
pocos filósofos como Gabriel del Mazo, Recondo nos persuade más adelante en
este capítulo de que el pensamiento latinoamericano ha superado con creces la fase
imitativa y se encuentra atravesando por momentos de creación original.
Las tres etapas históricas del pensamiento latinoamericano transitan por lo
colonial que el autor describe como el “proceso sociocultural de la incorporación “o
imitación; la cosmopolita, “cuyo correlato es la asimilación y la etapa nacional, a la
que corresponde el proceso de maduración o expresión original”.
Integración en mundo con tantos cambios y modalidades siempre buscando
el bienestar de una u otra nación, pero en realidad, ¿se busca la integración o es
solo conveniencia? Desde mi punto de visto más que una integración es el bienestar
de cada nación en el área del mercadeo de ventas importación y exportación China
Japón EEUU Rusia y ese pequeño grupo de países que serán los más beneficiados
aunque existan convenios entre naciones para mejorar el intercambio comercial
siempre habrán naciones que serán muy afectadas por esos tratados y convenios,
pienso que en realidad nunca habrá integración mutua entre naciones sino más bien
conveniencias comerciales entre los países.