4. La educación social es una forma de
educación,
que, a su vez, es el objeto y ámbito
de la Pedagogía Social. La educación
social sería el fenómeno, la realidad, la
praxis y la acción, y la Pedagogía Social la
reflexión científica, la disciplina científica,
que considera, conceptúa e investiga esa
educación social.
Con alguna frecuencia, se utilizan
indistintamente los términos, y se habla
de educación social cuando se quiere
hacer referencia a la Pedagogía Social, y a
la inversa. Y es que la pedagogía y, si se
quiere, más aún la Pedagogía Social, en
cierta medida, es o debe ser reflexión e
investigación acerca de la praxis
socioeducativa.
http://www.revistaeducacion
.mec.es/re336/re336_07.pdf
5. El conocimiento de los profesores
sobre la disciplina escolar La
disciplina escolar es, en la actualidad,
una de las principales
preocupaciones a la que se enfrenta
el profesorado tanto de enseñanza
primaria como de secundaria. Pese a
ello, la preparación que reciben
durante el período de formación
docente es casi inexistente (Melnick y
Meister, 2008) ya que son escasos
los centros que introducen dicha
temática en el currículum oficial de
los futuros enseñantes. Por este
motivo, el conocimiento disponible
para afrontar dicha temática procede
básicamente de sus creencias y sus
experiencias y, en consecuencia, es
de carácter vivencial y está falto de
rigor como se ha podido verificar en
otros estudios (Gotzens, Castelló,
Genovard y Badia 2003).
http://www.uv.es/seoane/boletin/prev
ios/N99-2.pdf
6.
7. Uno de los problemas manifiestos que
hemos percibido y constatado en
nuestra práctica educativa como
docentes es la actitud de apatía que
reflejan los estudiantes para aprender
en el espacio y tiempo escolar;
fenómeno que también sucede en los
educadores al enseñar. En el presente
ensayo hacemos algunas reflexiones
primarias en torno a posibles
relaciones implicadas que observamos
en la cotidianeidad educativa de
México, y que inciden en la reacción de
apatía. Fenómeno que ocurre desde el
nivel básico hasta el superior. A lo
largo del ensayo planteamos
propuestas para refundar el acto
educativo
8.
9. La formación de los profesionales de la Pedagogía es un
cometido complejo y
difícil de abordar que requiere un planteamiento
cooperativo, una práctica compartida y cuidadosamente
tutelada y una reflexión constante por parte de cuantos
participan en el proceso, tanto profesores de las distintas
áreas científicas, como profesionales en ejercicio y los
propios estudiantes. En esta tarea, hay que tener en cuenta
que el trabajo se complica si se pasa de la mera
conceptualización del papel del Pedagogo como el de la
persona que debe orientar a los alumnos, o llevar a cabo
intervenciones especializadas, a la consideración más amplia
de la figura del "Pedagogo-Educador" que debe porar al
ejercicio de las tareas específicas de su campo de trabajo la
atención al enriquecimiento personal de cuantos entren en
contacto con él a través del desarrollo de sus competencias
profesionales.
http://e-
spacio.uned.es/fez/eserv.php?pid=bibl
iuned:20414&dsID=formacion_pedago
go.pdf