1. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
NIVEL: Secundaria
NOMBRES: __________________________________
____________________________________
GRADO: 5º FECHA: 02/05/2019
INSTITUCIÓN EDUCATIVA PARTICULAR
CURSO: Comunicación
Literatura del mundo clásico
I. Lee el siguiente argumento:
LA ENEIDA
Llegada a la costa de Libia - La profecía de Júpiter - Aparición de Venus - Cartago - Acogida de Dido - Festín)
Los troyanos salen victoriosos y con rumbo a Italia, al ver esto Juno con unión a Eolo arremeten contra Eneas y su
tripulación. Estando mar adentro las olas se enfurecen contra los troyanos y estos piden ayuda a los dioses;
Neptuno al observar esto los ayuda arrastrándolos a la isla Libia. Mientras tanto Júpiter le cuenta a su Capítulo I
INVOCACIONES DE JUNO
(La tempestad hija Citerea cual es la misión de Eneas, la cual es crear Roma. Eneas no sabía dónde estaba hasta
que una hermosa mujer le dijo, ella era su madre Venus; en aquel país vivía la reina Dido la cual recibió muy bien
a los troyanos con muchas atenciones; ella también por culpa de cupido y Venus se enamora profundamente de
Eneas.
Capítulo II
DESTRUCCIÓN DE TROYA
(El caballo de madera - La traición de Sinón - Laocoonte)
Estaban todos reunidos y Eneas comienza a contar las historias que habían tenido en la guerra; como la de un
caballo que ellos regalaron a los griegos y estos lo despreciaron dañándolo; también sobre Sinón, un hombre al
que pensaban matar y ellos decidieron perdonarle la vida sí este los seguía pero él desagradecido habló mal de los
troyanos, también sobre un sacerdote llamado Laocoonte sobre como dos horribles monstruos del mar lo
mataron; y también de que manera se le aparece Héctor a Eneas pidiéndole que saliera de esa tierra.
Capítulo III
EL VIAJE
(De Troya a Creta - La lucha con las harpías - Encuentro con Andrómaca - Del Espiro a Sicilia - El Cíclope Polifemo)
Aquí Eneas cuenta como hicieron la tierra de Pérgamo junto la compañía de su padre Anquises, su mujer Creusa y
sus hijos Iulo y Ascanio, también sobre las Harpías y la maldición que una de ellas llamada Celeno les hace. Habla
sobre el encuentro con su amiga Andrómaca y las advertencias que ella le hace para seguir su camino,
recomendándole que hable con Sibilia de Cumas ya que ella le indicaría lo demás; Gracias a las predicciones de
Palunior el astrónomo, se continuó el viaje; ¡claro sufriendo por culpa de tormentas! Al llegar a la isla del cíclope
nos encontramos con un Aqueo y nos rogó que nos lo lleváramos y explicó lo peligrosos que eran los cíclopes, con
miedo salimos de ahí y llegamos a Cartago.
Capítulo IV
LAS DESVENTURAS DE DIDO
(Dido y Ana - La partida de caza - El mensaje de Mercurio - El furor de Dido - El suicidio)
Eneas termina de contar su historia; con el tiempo Dido le cuenta a su prima Ana, el Amor que siente por Eneas y
esta le dice que luche por él; de repente Yarbas antiguo admirador de Dido se entera y le suplica a Júpiter que los
separe, Júpiter cumple, pero al hacerlo Dido se desquicia buscando así su suicidio.
2. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
Capítulo V
EN SICILIA
(Conmemoración de Anquises - Los juegos - Los Arqueros - El incendio de la flota - La última Travesía - Muerte de
Palinuro)
Eneas cree saber que paso con Dido pero no se quiere mortificar; con el tiempo muere su padre Anquises pero
Eneas trata de hablar con él por medio del juego y su padre se siente orgulloso, después para distraerse juegan
con dardos; el mejor fue Alcestes y gracias a él les llegó una predicción. A Juno no le convenía que ellos continuaran
con su viaje, así que mandó a Iris a destruir los barcos quemándolos, esto lo hizo con la ayuda de algunas guerreras
troyanas que estaban aburridas; Eneas al ver eso, recurre a la ayuda de Júpiter y sigue navegando con los que
quieren continuar; uno de ellos llamado Polinuro muere, por desafiar a Morfeo dios del sueño y la noche.
Capítulo VI
DESCENSO AL INFIERNO
(La Sibilia de Cumas - Funeral de Miseno - Las moradas infernales - El paso de la laguna Estigia - El tértaro - Los
campos Eliseos - La descendencia Romana - ¡Tú serás Marcelo!)
Llegando a Italia Eneas llamó a Sibilia y ella le explicó como ir al infierno, Miseno en esos días murió y sirvió para
hacer el ritual, de esta manera Eneas entra al infierno en compañía de Sibilia; ahí mira a Dido eso lo pone muy
triste, de repente el camino se divide en dos, en uno de ellos estaba el dios del rostro feo hermano de Júpiter y
Neptuno era Platón, en el otro estaba Sisífone. Por fin mira a su padre Anquises, Eneas le pregunta ¿cuál será la
nueva tierra? Y él responde que Roma, su padre también le cuenta que tendrá grandes problemas pero que la
solución será Marcelo.
Capítulo VII
LA IRRITACIÓN DE JUNO
(El lacio - La acogida del rey latino - La infernal Alecto - Guerra entre latinos y troyanos)
Eneas llega a la tierra de Lacio, el cual es un rey, esposo de Amata y padre de Lavinia; el guerrero se da cuenta que
esa es la tierra; el rey se da cuenta que el guerrero es el muchacho del oráculo, por este motivo el Rey recibe muy
bien a Eneas y a los suyos. Juno al ver el éxito de los Troyanos arma un plan, donde sale perjudicada Amata ya que
es mordida por una serpiente y Eneas por que las personas piensan que él es el culpable iniciando así una tonta
guerra.
Capítulo VIII
EVANDRO Y ENEAS
(El padre Tíber - El reinado de Saturno - La fragua de Vulcano - El escudo de Eneas)
Cuando Eneas duerme se le aparece el Tíber, el cual le indica donde hay una cueva que era habitada por Caco,
mitad hombre y fiera; cuando Eneas va se encuentra con Evandro y su hijo Palonte los cuales le cuentan la historia
de esas tierras. Para la guerra Venus le pide a Volcano que le haga armaduras a Eneas y este acepta; el escudo que
Venus le llevó a Eneas era muy hermoso.
Capítulo IX
TURCO A LOS TROYANOS
(Asedio Del campamento - Niso y Eurialo - El asalto - Encarnizamiento de turno)
Juno manda a destruir las embarcaciones de Eneas y Venus le pide a Júpiter que no lo haga. Cierta noche dos
jóvenes Niso y Eurialo quisieron matar a algunos latinos, los rútulos se dieron cuenta y después los mataron; Turno
era novio Lavinia, pero ella lo cambia por Eneas, manda una Tea encendiendo todo; Ascanio de la rabia mata ha
Lomulo conocido como Rémulo; Turno se pone furioso y entra a matarlos a todos, ellos lo acorralaron y Turno opto
por arrojarse al río.
3. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
Capítulo X
CONTINÚA LA GUERRA
(La asamblea de los dioses - los amigos de Eneas - Muerte de Palante - Muerte de Lauso y de Mezencio)
Júpiter reúne a los dioses en el Olimpo y les dice que no se peleen más entre ellos. Los guerreros de Eneas se
encuentran asustados ya que su líder no está pero siguen peleando. Turno busca a Eneas para pelear, después se
mete Palante y lo matan. Mezencio reemplaza a Turno y pelea con Eneas, el termina herido y en defensa entra su
hijo Lauso el cual muere, al enterarse de esto Mezencio, también muere.
Capítulo XI
CAMILA
(Funeral de Palante - El gran consejo Latino - Asedio la capital laurentina - Historia de Camila - Muerte de Camila)
Todos estaban muy tristes por la muerte de su amigo y Eneas juró que fundaría la tierra Troyana. Los latinos se
dieron cuenta que sus contrincantes eran muy difíciles y no querían pelear más pero Turno sí, nadie lo ayudó,
solamente la virgen Camila una valiente mujer guerrera que murió por culpa de Cloreo por causa de una lanza en
su pecho.
Capítulo XII
LA VICTORIA DE ENEAS
(El duelo frustrado - La paz rota - Eneas y Turno - Júpiter y Juno - Muerte de Turno)
Lacio, Amata y la misma Lavinia le piden a Turno que desista de la idea pero él no quiere, estando listos para pelear
llega la hermana de Turno Yuturna pidiéndole que no lo haga. De repente todos se escandalizan y empieza a pelear
entre todos, hasta que Eneas les dice que no lo hagan. En el Olimpo ya Juno cansada de La guerra le dice a Júpiter
que cualquiera que gane no le quite las costumbres al otro, Júpiter está de acuerdo. Turno coge una piedra y se la
tira ha Eneas pero no le pasa nada, en cambio Eneas coge su lanza y se la entierra en su pecho dando así la muerte
de Turno; con el tiempo Eneas y Lavinia crean ha Roma.
Responde :
1. ¿En qué partes puede dividirse la Eneida.
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
2. ¿Cuál es la personalidad de Eneas como héroe?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
3. ¿En qué consiste la originalidad de Virgilio?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
4. ¿Para qué fue Virgilio a Grecia?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
5. ¿Qué pidió Virgilio que hicieran con su obra antes de morir?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
6. ¿Qué encargo reciben del emperador Augusto Tuca y Vario?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
7. ¿Por qué dedica Virgilio su poema a Augusto?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
4. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
Capítulo I. La cólera de Juno
1. ¿A qué ciudad favorece Juno?
_______________________________________________________________________________
2. ¿Por qué odia a los troyanos?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
3. ¿Qué pide a Eolo?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
4. ¿Quién calma finalmente la tormenta?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
5. ¿Qué esperanzas da Eneas a sus derrotados compañeros?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
6. ¿Qué futuro promete Júpiter para los romanos?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
7. ¿Por qué enlaza Troya con Roma?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
8. ¿Por qué los dioses intervienen, como Venus?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
9. ¿Laccon por qué dice que “desconfío de los griegos, y aún de sus regalos”?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
10.¿Es similar el viaje de La Eneida al de La Odisea?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
11.¿Qué busca Eneas en el Acheronte?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
12.¿Por qué ésta obra está marcada por lo Fantástico-maravilloso?
____________________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________________
5. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
Sobre la Eneida.
1. ¿Quién le pide a Eneas que cuente la historia de la caída de Troya?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
2. En los pasajes que leímos, ¿Quiénes están en contra de que se permita la entrada del caballo a Troya?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
3. ¿A qué se refieren las siguientes palabras sobre la muerte de Laoconte? “Dicen que Laoconte ha pagado la
culpa de su crimen merecía por profanar el roble sagrado con su hierro”
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
4. ¿Quién se le aparece a Eneas en sus sueños y que le pide que haga?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
LA ILIADA: Muerte de Patroclo
Los mirmidones seguían con armas y en buen orden al magnánimo Patroclo, hasta que alcanzaron a los troyanos
y les arremetieron con grandes bríos, esparciéndose como las avispas que moran en el camino, cuando los
muchachos, siguiendo su costumbre de molestarlas, las irritan y consiguen con su imprudencia que dañen a buen
número de personas, pues, si algún caminante pasa por allí y sin querer las mueve, vuelan y defienden con ánimo
valeroso a sus hijuelos; con un corazón y ánimo semejantes, se esparcieron los mirmidones desde las naves, y
levantóse una gritería inmensa. Y Patroclo exhortaba a sus compañeros, diciendo con voz recia:
-¡Mirmidones compañeros del Pélida Aquiles! Sed hombres, amigos, y
mostrad vuestro impetuoso valor para que honremos al Pélida, que es el
más valiente de cuantos argivos hay en las naves, como son también sus
guerreros, que de cerca combaten; y conozca el poderoso Atrida
Agamenón la falta que cometió no honrando al mejor de los aqueos. Con
estas palabras les excitó a todos el valor y la fuerza. Los mirmidones
cayeron apiñados sobre los troyanos y en las naves resonaron de un modo
horrible los gritos de los aqueos.
Cuando los troyanos vieron al esforzado hijo de Menecio y a su escudero,
ambos con lucientes armaduras, a todos se les conturbó el ánimo y sus
falanges se agitaron. Figurábanse que, junto a las naves, el Pélida, ligero de
pies, había renunciado a su cólera y había preferido volver a la amistad. Y
cada uno miraba adónde podría huir para librarse de una muerte terrible.
Patroclo fue el primero que tiró la reluciente lanza en medio de la pelea,
a11í donde más hombres se agitaban en confuso montón, junto a la nave
del magnánimo Protesilao; e hirió a Pirecmes, que había conducido desde
Amidón, sita en la ribera del Axio de ancha corriente, a los peonios, que
combatían en carros: la lanza se clavó en el hombro derecho; el guerrero, dando un gemido, cayó de espaldas en
el polvo, y los peonios compañeros suyos huyeron, porque Patroclo les infundió pavor al matar a su jefe, que tanto
sobresalía en el combate. De este modo Patroclo los echó de los bajeles y apagó el ardiente fuego. […]
Patroclo acometió furioso a los troyanos: tres veces los acometió, cual si fuera el rápido Ares, dando horribles
voces; tres veces mató nueve hombres. Y cuando, semejante a un dios, arremetiste, oh Patroclo, por cuarta vez,
viose claramente que ya llegabas al término de tu vida, pues el terrible Febo salió a tu encuentro en el duro
combate. Mas Patroclo no vio al dios; el cual, cubierto por densa nube, atravesó la turba, se le puso detrás, y,
alargando la mano, le dio un golpe en la espalda y en los anchos hombros. Al punto los ojos del héroe padecieron
vértigos. Febo Apolo le quitó de la cabeza el casco con agujeros a guisa de ojos, que rodó con estrépito hasta los
pies de los caballos; y el penacho se manchó de sangre y polvo. Jamás aquel casco, adornado con crines de caballo,
se había manchado cayendo en el polvo, pues protegía la cabeza y hermosa frente del divino Aquiles. Entonces
6. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
Zeus permitió también que lo llevara Héctor, porque ya la muerte se iba acercando a este caudillo. […] El estupor
se apoderó del espíritu del héroe, y sus hermosos miembros perdieron la fuerza. Patroclo se detuvo atónito, y
entonces desde cerca clavole aguda lanza en la espalda, entre los hombros, el dárdano Euforbo Pantoida; el cual
aventajaba a todos los de su edad en el manejo de la pica, en el arte de guiar un carro y en la veloz carrera, y la
primera vez que se presentó con su carro para aprender a combatir derribó a veinte guerreros de sus carros
respectivos. Este fue, oh caballero Patroclo, el primero que contra ti despidió su lanza, pero aún no te hizo
sucumbir. Euforbo arrancó la lanza de fresno; y, retrocediendo, se mezcló con la turba, sin esperar a Patroclo,
aunque le viera desarmado; mientras este, vencido por el golpe del dios y la lanzada, retrocedía al grupo de sus
compañeros para evitar la muerte.
Cuando Héctor advirtió que el magnánimo Patroclo se alejaba y que lo habían herido con el agudo bronce, fue en
su seguimiento, por entre las filas, y le envainó la lanza en la parte inferior del vientre, que el hierro pasó de parte
a parte; y el héroe cayó con estrépito, causando gran aflicción al ejército aqueo. Como el león acosa en la lucha al
indómito jabalí cuando ambos pelean arrogantes en la cima de un monte por un escaso manantial donde quieren
beber, y el león vence con su fuerza al jabalí, que respira anhelante, así Héctor Priámida privó de la vida, hiriéndolo
de cerca con la lanza, al esforzado hijo de Menecio, que a tantos había dado muerte. Y blasonando del triunfo,
profirió estas aladas palabras:
-¡Patroclo! Sin duda esperabas destruir nuestra ciudad, hacer cautivas a las mujeres troyanas y llevártelas en los
bajeles a tu patria tierra. ¡Insensato! Los veloces caballos de Héctor vuelan al combate para defenderlas; y yo, que
en manejar la pica sobresalgo entre los belicosos troyanos, aparto de los míos el día de la servidumbre, mientras
que a ti te comerán los buitres.
¡Ah, infeliz! Ni Aquiles, con ser valiente, te ha socorrido. Cuando saliste de las naves, donde él se ha quedado,
debió de hacerte muchas recomendaciones, y hablarte de este modo: «No vuelvas a las cóncavas naves, caballero
Patroclo, antes de haber roto la coraza que envuelve el pecho de Héctor, matador de hombres, teñida de sangre».
Así te dijo, sin duda; y tú, oh necio, te dejaste persuadir.
Con lánguida voz le respondiste, caballero Patroclo:
-¡Héctor! Jáctate ahora con altaneras palabras, ya que te han dado la victoria Zeus Cronida y Apolo; los cuales me
vencieron fácilmente, quitándome la armadura de los hombros. Si veinte guerreros como tú me hubiesen hecho
frente, todos habrían muerto vencidos por mi lanza. Matáronme la parca funesta y el hijo de Leto, y, entre los
hombres, Euforbo, y tú llegas el tercero, para despojarme de las armas. Otra cosa voy a decirte, que fijarás en la
memoria. Tampoco tú has de vivir largo tiempo, pues la muerte y la parca cruel se te acercan, y sucumbirás a
manos del eximio Aquiles Eácida.
Apenas acabó de hablar, la muerte le cubrió con su manto: el alma voló de los miembros y descendió al Hades,
llorando su suerte porque dejaba un cuerpo vigoroso y joven. Y el esclarecido Héctor le dijo, aunque muerto le
veía:
-¡Patroclo! ¿Por qué me profetizas una muerte terrible? ¿Quién sabe si Aquiles, hijo de Tetis, la de hermosa
cabellera, no perderá antes la vida, herido por mi lanza? Dichas estas palabras, puso un pie sobre el cadáver,
arrancó la broncínea lanza y lo tumbó de espaldas. Inmediatamente se encaminó, lanza en mano, hacia
Automedonte, el deiforme servidor del Eácida, de pies ligeros, pues deseaba herirlo, pero los veloces caballos
inmortales, que a Peleo le dieron los dioses como espléndido presente, ya lo sacaban de la batalla.
La Ilíada. Canto XVI
Responde:
1. ¿A quiénes lidera Patroclo?
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
2. ¿Con qué palabras exhortaba Patroclo a sus compañeros?, ¿qué objetivo perseguía su discurso?
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
7. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
3. ¿Quién hiere primero a Patroclo?
_____________________________________________________________________________________
4. Del diálogo que se establece entre Héctor y Patroclo, juzgue el tono, mensaje e intención de sus palabras
para redactar dos conclusiones.
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
_____________________________________________________________________________________
EDIPO REY: Edipo Atrapado
(Entra EDIPO).
EDIPO:
Mi muy amada esposa Yocasta, ¿por qué me habéis hecho salir de palacio?
YOCASTA:
Oye a este hombre; escúchalo, y mira a lo que han venido a parar los oráculos venerables
de los dioses.
EDIPO:
Este hombre ¿quién es, y qué viene a decirme?
YOCASTA:
Viene de Corinto para anunciarte que Pólibo, tu padre, no existe ya: ha muerto.
EDIPO (Al MENSAJERO.):
¿Qué dices, extranjero? Relátame tú mismo tu mensaje.
MENSAJERO:
Si ante todo hay que anunciar claramente la noticia, has de saber que Pólibo se ha ido:
ha muerto.
EDIPO:
¿Fue en una celada o a consecuencia de alguna enfermedad?
MENSAJERO:
El menor contratiempo abate a un hombre de edad.
EDIPO:
¡El desgraciado ha sucumbido víctima de alguna enfermedad!
MENSAJERO:
Sobre todo por los años.
EDIPO:
¡Ay! ¡Ay! ¿Por qué, pues, ¡oh mujer!, prestar tanta atención a la profetisa de Delfos y a los piidos de los pájaros
en los aires? Según aquellas predicciones, yo debía matar a mi padre. Y he aquí que ha muerto y yace bajo tierra y
yo estoy aquí, y jamás puse mano sobre el pomo de la espada; ¡a menos que haya muerto por la pesadumbre que
le produjera mi ausencia! En este caso, sí que podría haber sido yo la causa de su muerte.
¡Pero no! Ya Pólibo yace durmiendo en el Hades y ha enterrado con él todos esos oráculos, lo que prueba que no
merecían crédito.
YOCASTA:
8. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
¿No te lo había dicho yo hace tiempo?
EDIPO:
Así me lo habías asegurado; pero yo vivía influido por ese temor.
YOCASTA:
Que tu corazón no tema nunca ya a ningún oráculo.
(Pausa.) EDIPO:
Pero, y lo del lecho de mi madre, ¿cómo dejar de temerlo?
YOCASTA:
¿Para qué vivir en continua alarma, si la casualidad manda siempre como un soberano en el destino de los hombres
y nada puede ser previsto con certeza? Lo mejor es vivir, en la medida de lo posible, al dictado de la Fortuna. En
cuanto a ti, no te asuste ese ayuntamiento con tu madre, pues numerosos son los mortales que en sueños han
compartido el lecho materno. Quien vive despreocupado de todos esos temores, soporta la vida de un modo más
cómodo.
EDIPO:
Todo lo que estás diciendo estaría muy bien dicho si la que me engendró no se hallase aún en vida. Pero como
vive, preciso es que, a pesar de tus justas palabras, sienta temores.
YOCASTA:
La tumba de tu padre debe, sin embargo, ser un gran alivio para ti.
EDIPO:
Lo es ciertamente. Pero tengo miedo por la que vive aún.
MENSAJERO:
¿Cuál es, pues, la mujer que a tal extremo te asusta?
EDIPO:
Mérope, anciano, la que vivía con Pólibo.
MENSAJERO:
Y ¿qué es lo que respecto a ella te causa miedo?
EDIPO:
Un oráculo, extranjero; un oráculo espantoso, que pronunciaron los dioses.
MENSAJERO:
¿Puede saberse, o no está permitido que otro lo conozca?
EDIPO:
Puede ser conocido. Loxias predijo un día que yo debía unirme a mi madre y derramar con mis manos la sangre de
mi padre. He aquí por qué desde hace tiempo vivo lejos de Corinto. No me ha ido mal; pero, siempre es dulce gozar
de la vista de los padres.
MENSAJERO:
¿De modo que por causa de todos esos temores te expatriaste de allí?
EDIPO:
Porque no quería, anciano, llegar a ser el matador de mi padre.
MENSAJERO:
Mas ¿por qué, príncipe, no te he librado de esas aprensiones, yo que he llegado aquí lleno de buenos sentimientos
hacia ti?
EDIPO:
En verdad recibirás de mí una digna recompensa.
MENSAJERO:
Pues a fe que si he venido lo hice esperando que a tu retorno a Corinto pudiera obtener un buen beneficio.
EDIPO:
Pero es que yo jamás volveré a vivir con los que me dieron el ser.
MENSAJERO:
Hijo mío, bien se ve que no sabes lo que haces...
EDIPO:
¿Cómo es eso, anciano? En nombre de los dioses, infórmame.
MENSAJERO:
Si esas son las razones que te impiden volver a tu país...
9. PROF: FABIOLA JUNCO CHANGANAQUÍ TRIUNFADORES DESDE EL PRINCIPIO…!
EDIPO:
Por temor de que Apolo hubiera pronunciado sobre mí un verídico oráculo.
MENSAJERO:
¿Temes mancharte con un sacrilegio cometido contra tus padres?
EDIPO:
Eso es precisamente, anciano, el eterno motivo de mi terror.
MENSAJERO:
¿No sabes, pues, que esas alarmas son injustificadas?
EDIPO:
¿Cómo injustificadas? ¿No soy el hijo nacido de esos dos padres?
MENSAJERO:
Pólibo no tuvo que ver nada en el hecho de tu nacimiento.
EDIPO:
¿Qué dices. ¿Pólibo no me engendró?
MENSAJERO:
Ni más ni menos que pudiera haberlo hecho yo.
EDIPO:
Y ¿cómo un padre puede ser para mí igual que un extraño?
MENSAJERO:
No fuiste engendrado ni por él ni por mí. Edipo Rey. Sófocles.
Responde:
1. ¿Quién llega buscando a Edipo?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
2. ¿Qué novedad trae a Edipo?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
3. ¿Qué idea se reafirma en Edipo y Yocasta luego de escuchar al extranjero?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
4. Finalmente, ¿qué verdad le descubre el extranjero a Edipo?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________