Este documento resume la bioquímica de la atracción sexual y el amor. Explica que durante el enamoramiento, el cuerpo segrega sustancias psicoactivas como las feromonas que causan euforia. Sin embargo, no está claro por qué nos sentimos atraídos por algunas personas en particular. Además, aunque las feromonas estimulan el deseo sexual, algo dentro de nosotros controla cuándo se liberan, lo que podría explicar nuestra atracción selectiva. Finalmente, el documento analiza el papel de las feromonas naturales versus artificiales en la atra
MAYO 1 PROYECTO día de la madre el amor más grande
Bioquimica de la sexualidad
1. UNIVERSIDAD TECNICA DE MACHALA
FACULTAD DE CIENCIAS QUIMICAS Y DE LA SALUD
ESCUELA DE ENFERMERIA
NOMBRE: GABRIELA FERNANDA FAJARDO VELEPUCHA
CURSO: PRIMER SEMESTRE “B” FECHA: LUNES, 29 DE LULIO DEL 2013
DOCENTE: BIOQ. CARLOS GARCIA
Bioquímica de la sexualidad
Los bioquímicos y neurólogos están empeñados en encontrar una explicación para
todas las cosas que nos pasan, incluidas las
llamadas "locuras de amor", es decir,
cuando nos sentimos atraídos y
excitados irremediablemente por
alguien y experimentamos durante un
tiempo más o menos largo pero,
generalmente demasiado breve, toda la
gloria y el vértigo de sentirnos
enamorados.
Es cierto que durante esos momentos nuestro cuerpo segrega unas cuantas
sustancias psicoactivas que como drogas naturales son las causantes de esa
euforia que viven los enamorados pero lo que nadie ha explicado todavía es por
qué todos esos sentimientos y "sus sustancias asociadas" se despiertan
solamente con alguna o algunas personas a lo largo de toda la vida y por qué no
sucede, como podría esperarse, con cualquier persona que nos sea agradable.
2. Es cierta que la euforia del amor puede
ser debida a esas sustancias pero lo
que también está claro es que algo
muy dentro de nosotros tiene la
facultad de abrir el grifo o también de
cerrarlo.
Imaginaros que de una forma
consciente y voluntaria
aprendiéramos a regular esa
compuerta de la felicidad y pudiéramos
vivir de una forma cotidiana esa maravillosa plenitud por nosotros mismos
sin tener que depender de nadie. Quizá entonces seriamos semejantes a los
Dioses y entonces nuestra vida sería totalmente mágica.
O quizá la magia de la vida consista en que eso sucede no cuando nosotros
queremos sino cuando menos lo esperamos.
Las Feromonas o drogas sexuales
Estas drogas naturales son segregadas
tanto por hombres y mujeres, deben tener
un penetrante olor porque aunque no se
percibe de una forma consciente
estimulan la vitalidad y el deseo
sexuales, además de mejorar la
fertilidad, aliviar los síntomas de la
menopausia y tener efectos
vitalizadores y estimulantes. Estas
feromonas son expulsadas también
fuera del cuerpo mediante el sudor
produciendo los característicos olores
sexuales y aun así siguen teniendo
muchos méritos como han
demostrado unos curiosos estudios
hechos entre mujeres cuya menstruación era muy
irregular y que pudieron normalizarla "aspirando" los olores naturales del cuerpo
masculino con toda su carga de feromonas. Si las hormonas son algo así como la
3. droga del sexo porque nos invita a ello, para producirlas no hay nada mejor que el
sexo puesto que haciendo el amor al
menos una vez a la semana se
ayuda a la producción de estas
sustancias.
Cuando hay alguien, sea hombre o
mujer, con un alto contenido de
feromonas, las personas con quienes
se relaciona pueden oler sus
feromonas aunque no se den cuenta,
gracias a unas células nerviosas que
por detrás de la nariz. Sí, pueden
olerlas aunque no se den cuenta
conscientemente pero algo dentro de su
cerebro sí. Quizá por esto algunas
personas nos parezcan más sexys que otras o también podemos
percibir que alguien está en un momento más sensual que de costumbre. Este
chollo biológico ha sido explotado por la industria cosmética que las produce
sintéticamente y regando con ellas todo tipo de productos y cremas, quieren
erotizarnos la vida pero me parece que, tanto en este aspecto como en otros
muchos, como lo natural no hay nada. Por eso más que regarnos de artificiales
olores, lo ideal es aprender a producir y segregar por nosotros mismos estas
sustancias responsables de la felicidad y el placer.