El Papa hace un llamado a quienes tienen más recursos y a los líderes políticos a trabajar por un mundo más justo y solidario y a no ser indiferentes ante las desigualdades existentes. También exhorta a los jóvenes a no sentirse defraudados por la corrupción y a buscar el bien común en lugar de su propio interés, y los anima a ser constructores de una Iglesia y un mundo mejores. Finalmente, les pide a los niños y niñas que no se queden al margen sino que sean protagonistas del camb