Este documento describe la huelga universitaria de 1999-2000 en México y las diferentes formas políticas que surgieron dentro de este movimiento. La huelga surgió como resultado del malestar acumulado por el sistema económico y fue influenciada por movimientos previos como el EZLN. Dentro de la huelga hubo cuatro tipos de formas políticas: partidos políticos tradicionales, corrientes políticas universitarias, pequeños colectivos y estudiantes independientes sin afiliación. Los estudiantes independientes, que constituían al

1. VISIBILIZACIÓN POLÍTICA DE LAS JUVENTUDESLOS INDEPENDIENTES EN LA HUELGA DEL FIN DE MILENIO Alma Jessica Beltrán Cruz

2. La huelga universitaria de 1999-2000 es un fenómeno que permite acercarse a las nociones políticas de la juventud, en un momento coyuntural de la historia reciente de nuestro país. Es heredero de los movimientos estudiantiles de 1968 y de 1987, pero sobre todo de la oleada de movilizaciones y esperanzas nacientes que significó el EZLN. Así, el movimiento del Consejo General de Huelga, en su momento, tendió lazos con movimientos normalistas como el del Mexe (Hidalgo), indígenas como el EZLN o urbano-populares como los Panchos Villa. Después de los nueve meses que duró esta huelga, continuaron nuevas ramificaciones, en Atenco, en Oaxaca, en Guadalajara. Es un movimiento que da cuenta de la necesidad que tienen distintas colectividades de articular su malestar y ubicar su origen: el sistema económico, indiferente a todas las otras fuentes de sentido.

3. Este movimiento no fue homogéneo y esa es la razón para esta presentación, aportar elementos testimoniales acerca de los modos políticos que se gestaron en él y que necesariamente expresaron las formas en que se organiza la sociedad en su conjunto, desde la política “profesional”, hasta la participaciòn independiente. A continuación presento parte de la reflexión hecha por Carlos Montalvo, de su artículo Los independientes: el fenómeno de la diversidad en el CGH. El autor fue estudiante de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia.

5. Cuando la huelga de 1999 llegó, fueron miles de universitarios que por simple sentido común se adhirieron a ella, se tenía alguna noción de la importancia de movilizarse. Fue el asumirnos a partir de nosotros mismos, desde la diversidad que conformamos y no de designios mediáticos y autoritarios de las mafias políticas y el gran capital.

6. El Ejército Zapatista de Liberación Nacional permeó en el sector social que participamos en la huelga, tanto como referente de identidad comunitaria, como en retomar la forma horizontal en la organización política, para no repetir el viejo esquema verticalista de los pasados movimientos, como el de 1987 en el que los representantes del Comité General de Representantes, eran fijos y fueron cooptados por el PRD. El movimiento de 1999 intentó organizar asambleas comunitarias que reflejaran una forma organizativa autónoma y la idea del espacio común y la comunidad como parte de él.

7. En 1999, las llamadas bases del movimiento dejaron de confiar en toda forma vertical y elitista, decidiendo protagonizar su propia historia y, a pesar de que la mayoría carecía de experiencia política, asumieron el desarrollo del movimiento. Independiente es la revelación de la diversidad que nos conforma histórica, social y culturalmente. Sin temor a exagerar, alrededor del 90% de quienes participamos en el Consejo General de Huelga no contábamos con experiencia alguna en estas situaciones. Palabras como asamblea, moción, resolutivos, eran meros conceptos que sobre la marcha se fueron comprendiendo.

8. Se nos creía resultado de Occidente, una generación fabricada para el fracaso, dirigida al conformismo, hundida en la ignorancia. Pero con la existencia de los medios alternativos de comunicación, las luchas sociales como el EZLN, además del desencanto sobre el sistema occidental, se creó un sector estudiantil dispuesto al aprendizaje político.

9. Pueden mencionarse cuatro tipos de formas políticas. El primero operado por partidos como el PRD o el Partido Obrero Socialista, ambos con una estructura vertical y con intereses partidistas por encima de los comunes. El segundo tipo era el de las corrientes políticas, algunas con vínculos partidistas y otras no, con historia dentro de la universidad, verticales y con el interés de fortalecer su propia corriente.

10. El tercer tipo lo constituían colectivos, más pequeños y menos jerárquicos, aunque la práctica de la tolerancia, por motivos políticos y personales, era por lo general tensa. El cuarto tipo era donde convergía la diversidad del estudiantado sin filiación política ni de grupo o corriente e, incluso, sin ganas de tenerla. Estos/as estudiantes estructuraron varias formas para incidir en el rumbo del movimiento, con asambleas deliberativas o proyectos sociales, además de su labor de base que consistía en el mantenimiento físico del movimiento.

11. En cuanto a la violencia estructural, se hizo patente de diversas formas, la primera de ellas por la contribución de la rectoría con mecanismos que derivaran en la exclusión de la educación para las nuevas generaciones. Durante el movimiento con el desprestigio, estigmatización y minimización de las/os estudiantes a través de los medios de comunicación masiva.