El documento define la educación sexual como la enseñanza sobre la sexualidad, el aparato reproductor, las relaciones sexuales, la planificación familiar y los derechos sexuales con el objetivo de lograr una buena salud sexual y reproductiva. Explica que una buena educación sexual permite relaciones responsables y elimina prejuicios, y que dota a los jóvenes de conocimientos para proteger su salud y tener relaciones respetuosas. Concluye que la educación sexual permite vivir libremente la sexualidad reduciendo riesgos de embaraz