Cuando la forma es el fondo (en situaciones de discapacidad).

Cuando la forma
es el fondo
(En situaciones de
discapacidad)

José María Olayo 13 octubre 2010 olayo.blogspot.com

DEPORTE Y DISCAPACIDAD

Una conversación acerca de...

… las formas y el fondo o,
si se quiere, de lo que se
esconde debajo de lo aparente,
en situaciones de discapacidad.



En situaciones de discapacidad,
ni todo lo que reluce es oro, ni
lo importante es tener, sino
llegar a ser uno mismo...



… un juego vital complejo en
el que las reglas no siempre
se negocian ni se proponen,
simplemente se aceptan...



… sin rechistar y asumiendo
que los límites de intervención
los marcan otros.



En el ámbito de la discapacidad,
las formas son lo que cuentan y
el fondo es lo que menos interesa...



… nos preocupa más el qué
dirán que lo que pensarán o
harán; nos paraliza más el miedo
a no ser correctos que las propias
limitaciones personales...



… en el fondo, son las formas de
ser y actuar las que monopolizan
cualquier otra dimensión humana,
el propio sustrato de lo que somos
o a lo que aspiramos en la vida...



… se valora más tener que ser,
llegar que ir, acopiar que
compartir, ver que mirar,
hacerlo que hacerse...



… encontrar que buscar, ningunear
que explorar, la rutina a los
rutinarios, la mentira prevista
que la verdad imprevista.



Abusamos del mundo de las
formas porque nos falta el fondo,
ponemos el foco donde ya hay
luz porque tememos toparnos
con las sombras y sus destellos...



… no nos interesa el fondo
porque da más trabajo y
acumula muchas más exigencias
y responsabilidades
individuales y colectivas...



… exige esfuerzos y reclama
actitudes difíciles de asumir
como la solidaridad, la
empatía o el respeto a las
diferencias indivduales...



El mundo de las formas es más
amable; en él no se precisa
más atención que vigilar por
los propios intereses personales..,



,.. usar siempre palabras sencillas
y que entendamos todos
como “minusválido”,
“tonto”, o “inválido”...



,.. decidir estrategias para
marcar los territorios y sus
perímetros de los unos -los
“normales”-, y los otros- los
“discapacitados”...



,.. dejar siempre muy claro
quiénes toman las decisiones y
sobre quiénes se van a aplicar...



El mundo de las formas
ofrece una realidad social
que ni comprendemos ni
nos compromete; todo
está ya pactado, incluso
las incertidumbres...



… todos sabemos lo que
somos y dónde estamos,
pero casi ninguno sabemos
lo que podemos llegar a ser...



… el otro, más que una
referencia es una interferencia,
incluso, a veces, una injerencia,
más silencio que compromiso...



Nos pasamos la vida surfeando
sobre las olas de las formas,
siendo menos de lo que somos
capaces y más de lo que los
otros esperan de nosotros...



… confiando más en el destino
que en las propias capacidades,
por muy limitadas que estén;
dando más pábulo a lo que
se dice que a lo que se cree...



… viendo al semejante como
amenaza e inferior, en vez
de igual y cómplice...



… acumulando más temores
que deseos, más mentiras que
ficciones, más tendencias que
sensaciones, más egos revueltos
que miradas para envolver al otro...



Las personas y las cosas tienen
un fondo, pero no interesa; tienen
un por qué, pero da miedo, unas
necesidades, pero son caras...



… tienen una ética, pero se
prefiere una estética, demandan
recursos y medios para ser,
pero no hay para todos...



… plantean aspiraciones, inquietudes,
tiempos y espacios para crecer e
indagar, abandonar los territorios
de pérdida y desesperanza...



… expresar el dolor sentido,
dejar de ser esclavos de la opinión
ajena, intercambiar melancolía por
afecto, caricias por recuerdos,
ideas por verdades absolutas...



… pero no hay recursos humanos
ni medios materiales, no hay tiempo,
ni opiniones al respecto, y, además,
la ventanilla donde se realizó la
solicitud no era la correcta.



Tenemos que reconocerlo: en
el fondo, no nos gusta el fondo;
allí existen los sueños y fantasías,
los anhelos y los derechos de todos,
las dudas y las quimeras...



… un territorio en el que uno depende
más de cómo es que del tipo de
situación en la que se encuentra...



… un espacio donde todos pueden
fluir e influir, tocar y ser tocados,
mezclar y fundir, minimizar los
huecos creados entre los
afectos propios y ajenos...



… una oportunidad para crecer
juntos, morder la realidad para
transformarla en ficción, tener
la oportunidad de apoyar
y apoyarse en el otro...



Pero preferimos las formas al
fondo; da menos trabajo y se
reduce de forma drástica el nivel
de las exigencias y las condiciones...



… respetando las formas nos
aseguramos un modo de vivir
para la mayoría suficiente y
digno, aunque sea a costa de
las privaciones de una minoría...



… siempre ha sido así y no hay
razones para cambiar ahora;
nadie tiene la culpa de las
desgracias ajenas, y mucho
menos, de la mala suerte que
les depara a veces la vida...



… nadie es responsable de sus
miedos, su ira y tristeza, al fin y al
cabo son hábitos que adquieren
por su obsesión de aferrarse y
depender de los demás...



Guardando las formas aprendemos
a subsistir y crecer cada uno en su
entorno y con sus propios medios,
ajenos al crecimiento de los otros...



… descubrimos lo que somos al
cobijo de lo que ignoramos de los
otros, modificamos nuestro futuro
a costa de perpetuar su presente...



… repartimos los recursos sociales
en los supermercados de la
individualidad, interpretamos las
necesidades colectivas
mirándonos al ombligo...



… llegamos a ser lo que se espera
de nosotros, a ver la realidad
con las gafas que ofrecen las
ópticas del poder establecido...



… desdeñar la curiosidad y valentía,
solventar conflictos a golpe de
intuiciones, sacar tajada a
los afectos, pensar muy bien
y actuar muy mal.



Necesitamos llegar al fondo, superar
el perímetro de las formas, marcar
los lindes entre la forma y el
fondo de cada dimensión humana...



… afrontar la convivencia y sus
rigurosidades, recuperar el hábito
de los afectos y las caricias...



… disfrutar haciendo y soñando,
seducirse a uno mismo desde lejos,
inventar astucias, recrear las rutinas...



…perderle el miedo al miedo,
ganarle al tiempo una vida entera,
controlar las circunstancias,
pensar siempre en positivo ...



… recuperar el humor y la esperanza,
construir castillos en el aire y
prepararnos para llegar a ellos...



… hacer las paces con el pasado,
modular mejor nuestro estado
de ánimo, intercambiar
experiencias y secretos...



… no pasar nunca la página hasta que
esté llena, hacer de la costumbre una
aventura, vivir deprisa pero despacio...



… llegar siempre al fondo
de la cuestión y no guardar
nunca las formas.


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