1. Una vez sentados a la mesa, y desdoblada la servilleta sobre su
regazo, solo tiene que seguir el ritmo de la comida y ser lo más
sociable posible con sus compañeros de mesa. Este "buen
comportamiento" es el resultado de haber tenido una buena
educación, y ponerla en práctica.
Al uso correcto de los cubiertos (tema ya tratado en otros artículos
de este portal) hay que añadir algunos otros comportamientos que
debe tener en cuenta cualquier buen comensal (amén de los
consabidos no hable con la boca llena, ni beba hasta que haya
tragado su bocado, no haga ruido al comer, etc.).
1. Los alimentos no se tocan, y si los toca, debe servírselos para
usted o desecharlos, pero no dejarlos para otras personas.
2. Los alimentos que se llevan a la boca no se escupen o se
devuelven al plato de forma evidente. Si algo tiene mal sabor o no le
ha gustado, debe retirar este bocado de la forma más discreta
posible, dejándolo a un lado del plato. Los expertos recomiendan no
dar excusas, ya que esto solo haría que llamar más la atención de
otros comensales.
3. Las manos siempre limpias tanto para tomar los cubiertos como
las copas. Los labios siempre limpios antes y después de beber.
4. Si un plato no le gusta, no lo "desarme" para dar la impresión de
que lo ha comido. Nada más lejos de la buena educación. Puede
probar un poco y dejar el resto tal y como se lo sirvieron. Un anfitrión
educado no le hará ninguna pregunta. Y si se la hace, usted puede
responder con alguna disculpa.
5. No se pasan alimentos de un plato a otro, ni bebidas de una copa
a otra.